Excluido de la boda real, Thomas Markle asegura que a su medio hermana es una vanidosa que está "haciendo el papel de su vida".
Enrique de Inglaterra y Meghan Markle, el pasado 8 de marzo.Matt DunhamAP
Thomas Markle, medio hermano de Meghan, la prometida de Enrique de Inglaterra, ha lanzado duras críticas contra ella en vísperas de la próxima boda real,
fijada para el 19 de mayo. En una carta escrita a mano y dirigida al
príncipe, Thomas Markle Jr, critica a su hermana y advirte a Enrique de
Inglaterra de que no es "demasiado tarde" para cancelar el enlace. En la misiva que compartió con la revista In Touch, el hombre de 51 años escribe: "A medida que pasa el tiempo para su boda, queda muy claro que este es un gran error" El hermano mayor de Markle critica la relación de Markle con su padre,
quien, según Thomas, ayudó a la exactriz con dinero. Según Thomas, quien
no ha visto a su media hermana desde 2011, su malestar no es solo por
el hecho de que no haya invitada a su familia a su próxima boda real,
sino que convidó a "completos extraños", "¿Quién hace eso?", se
pregunta.
La carroza elegida por Meghan Markle para llegar a la capilla el día de su boda.WPA PoolGetty Images
En la carta, Thomas culpa a la fama de Hollywood de cambiar a Markle. "Es muy evidente que su pequeña fama de Hollywood se le ha subido a la
cabeza, convirtiéndola en una mujer hastiada, superficial y vanidosa que
hará una broma de usted y de la herencia de la familia real", escribió. Al concluir su carta, Thomas acusa a Markle de mantener separada a su
"familia desgarrada" al no invitarlos a la boda real, pero admite que
Markle es "todavía mi hermana". Esta no es la primera vez que el medio hermano de Markle se ha pronunciado en contra de ella. El mes pasado, Thomas le dijo al Daily Mirror
que Markle "olvidó sus raíces" y le gusta retratarse a sí misma como
una "persona del pueblo". "Ella está realizando la mejor actuación de su
vida. Es una falsa. Una vez que llegó a Hollywood se convirtió en una
persona diferente. Claramente ha olvidado sus raíces y su familia ". "No estoy amargado, solo desconcertado", le dijo a The Mirror. "Es hiriente dado lo cerca que estuvimos una vez"
Hace solo unos días fue Samantha Grant, medio hermana de la prometida
de Enrique de Inglaterra, quien publicó en Twitter mensajes con un
regusto amargo: “Es hora de madurar, Enrique. Alguien tiene que decirlo:
el Emperador está desnudo”. La mujer de 53 años, que sufre esclerosis
múltiple, está molesta porque no ha recibido una invitación para la boda
del año, que unirá al príncipe y a la exactrizel próximo 19 de mayo. Y añadía: “Madura, Enrique. Defender la ayuda humanitaria no funciona a
la vez que permites a Meg que ignore a los Markle. Es una
contradicción". La ira de Grant no es nueva. Ya había criticado a Meghan acusándola de abandonar a su familia para
ser una actriz famosa. Después, la tildó de hipócrita. Luego rectificó y
la describió como encantadora. Pero desde hace un par de semanas ha
vuelto a la carga y afeó a la pareja real de invitar a “extraños” en
lugar de a sus familiares. También les acusó de fallar en
“honorabilidad, etiqueta y tradición”. “Humo y espejos no pueden ocultar
el elefante en la habitación. Una falta de respeto, contra la tradición
y el humanitarismo, los Markles deberían ser invitados si 2.000
desconocidos van a ir a la boda”..
Dos
frentes recrudecen el conflicto entre el presidente, Dimas Gimeno
Álvarez, y sus primas, Marta y Cristina Álvarez Guill, hijas de Isidoro
Álvarez.
Dimas Gimeno, presidente de El Corte Inglés, con Marta y Cristina Álvarez Guill, consejeras del grupo, en 2015.EL PAÍS
Tensión máxima en El Corte Inglés. Las diferencias entre los dos bandos familiares siguen creciendo. El
pulso entre el presidente, Dimas Gimeno, y sus primas, Marta y Cristina
Álvarez Guill, hijas de Isidoro Álvarez, se libra en dos campos. Por un
lado, el judicial, con la existencia de tres demandas, y una cuarta en
curso, interpuestas por César y María Antonia Álvarez, tío y madre de
Dimas y hermanos de Isidoro, contra sus sobrinas. Por otro, con la
auditoría que la empresa ha encargado a EY sobre el departamento de
seguridad por el posible uso fraudulento del cargo por parte del
responsable de la misma, Juan Carlos Fernández-Cernuda Hidalgo. La pelea entre las hijas y el sobrino de Isidoro Álvarez comenzó prácticamente el día siguiente de que muriera el carismático empresario
en septiembre de 2014. El sobrino ocupó la presidencia porque así era
el deseo de su tío y sus dos hijas entraron en el consejo de la empresa y
en la Fundación Ramón Areces, principal accionista de El Corte Inglés
(ECI) con el 37,39%, como patronas. Asimismo, la participación del 22%
en ECI, canalizada a través de IASA (Isidoro Álvarez SA) quedó dividida
en tres partes: cada una de sus dos hijas heredó algo más de una tercera
parte (el 69% entre las dos). El resto se dividió entre los dos
hermanos de Isidoro, con un 2% cada uno, y su sobrino Dimas, con un 3%. En consecuencia, las hermanas tienen el control de esta firma
patrimonial y junto a la Fundación superan con creces el 50% de los
grandes almacenes. A su vez, Dimas y su familia, al estar en minoría, no
pueden disponer de los dividendos que recibe IASA sin consentimiento de
las dos hermanas, Marta y Cristina.
Demandas pendientes
Ahí germina el primer conflicto. César y María Antonia, hermanos de
Isidoro, han interpuesto sendas demandas, que recayeron en los juzgados 7
y 1 de lo Mercantil de Madrid, respectivamente, en las que reclaman la
nulidad de la junta de IASA en la que se aprobó reducir el capital de
121 millones a 50.000 euros. También piden que se vuelva a la situación
inicial, alegando que no fueron convocados a la junta, que se hizo antes
de registrarse ante notario la presencia de ellos y que la reducción de
capital les perjudica, algo que tendrá que aclararse en los juzgados. Existe otra demanda, en este caso civil, de María Antonia, en la que
reclama cinco millones. Según la demandante, Isidoro le había donado 10
millones, pero en el testamento definitivo se redujeron a cinco. Las fuentes oficiales de El Corte Inglés han rechazado hacer
comentarios al respecto. Sin embargo, en el entorno de las hermanas
Marta y Cristina alegan que los albaceas de Isidoro Álvarez (el abogado
Ramón Hermosilla; el secretario del consejo de ECI, Antonio
Hernández-Gil, y el consejero Carlos Martínez Echevarría) recomendaron
hacer la reducción y aseguran que el resto de socios de IASA lo firmó
ante notario. Asimismo, afirman que existe una carta que adjuntó
Echevarría en la que Isidoro rectifica su inicial donación pasando de 10
a cinco millones. También apuntan esas fuentes que en la herencia se
incluyeron otros activos, como viviendas, que se quedaron los hermanos
de Isidoro. Esas fuentes se preguntan, además, por qué se ha esperado más de un año a
presentar las demandas. A su juicio, se debe a que Gimeno ha perdido el
poder, por un lado, y a que tanto este como su madre y su tío tienen
que hacer frente al impuesto de sucesiones a la Comunidad de Madrid. Un
pago que, en el mejor de los casos, estaría entre 17 y 21 millones. Las
negociaciones con la Comunidad sobre el impuesto fueron las que
retrasaron la presentación de las demandas, sostienen en el entorno de
Gimeno.
El recorte de poder de este, que se produjo en el consejo de octubre
pasado, fue el segundo intento de descabalgarle y no será el último,
según esas fuentes, aunque las fuentes cercanas a las hermanas niegan
que se le quiera echar. En ese consejo se nombraron dos consejeros
delegados, Víctor del Pozo y Jesús Nuño de la Rosa, quedando él como
presidente no ejecutivo. Hubo quien apostó entonces que Gimeno arrojaría
la toalla; lejos de eso, comenzó una actividad más dinámica, en la que ha incluido la participación en actos públicos. Precisamente, en febrero las hermanas le acusaron de no dejar trabajar a los consejeros delegados
y de utilizar su puesto para promocionarse, además de instigar en las
demandas presentadas por su tío y madre, según las fuentes citadas.
.
El 31 de mayo está prevista la vista de la demanda de César Álvarez (la
de su hermana, aunque está admitida a trámite, todavía no tiene fecha).
Pero antes, probablemente, se habrá celebrado consejo de administración
de El Corte Inglés (ECI), en el que se espera que ya tengan los
resultados de EY. Gimeno se ha quedado sin apoyos en el consejo.
Alfredo Pérez Rubalcaba durante la entrevista. Vídeo:Belén Fernández, .C. Martínez, A.R.De la Rúa
“Desde el punto de vista vital, para mí ETA acabó el 20 de octubre del 2011,
cuando la democracia derrotó a ETA”. Sin duda este fue uno de los días
más importantes en la vida política de Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro
del Interior con el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero
(2006-2011) y uno de los artífices del fin de la actividad de la banda
armada. Aunque como él mismo reconoce "ese día también te vuelven a
aparecer las víctimas y te preguntas ¿todo este sufrimiento para esto?”. El que fue uno de los hombres más influyentes de la política
española reciente, reconoce a este periódico que sus momentos más duros
al frente de Interior fueron los atentados: "Me acuerdo de cada
funeral, del olor de las flores, de los llantos y las caras de las
madres y de las esposas, eso es lo peor porque al final siempre te
sientes responsable, es inevitable". Ahora que ETA se disuelve definitivamente después de 43 años de actividad y 829 víctimas mortales,
y que la escenificación del fin será este fin de semana en un acto en
el País Vasco francés, Rubalcaba recuerda los intentos de acabar con la
violencia por la vía del diálogo y también los fracasos de aquellas
reuniones. "Siempre piensas que podías haber hecho más", asegura el
exministro.
También hubo momentos reconfortantes como las buenas operaciones
policiales que detuvieron a los últimos jefes militares de la banda
terrorista: "Recuerdo muy bien la última rueda de prensa, iba con el
General de Información de la Guardia Civil y ambos sabíamos que gracias a
esas actuaciones de los Cuerpos de Seguridad del Estado aquella iba a
ser la última gran rueda de prensa". Y así llega el final. ETA se queda
sin capacidad de reacción y Batasuna se da cuenta de que la organización
terrorista se ha convertido en un problema. Para el político ahora toca pensar en el futuro de Euskadi, en los
jóvenes y en recuperar la convivencia sobre un relato sin trampas: "Y el
relato es muy sencillo, ETA fue una gente que mató mucho por imponer
unas ideas supremacistas".
Seremos ibéricos, seremos latinos y vecinos, europeos y sureños, pero
no somos tan iguales como algunos creen ni tan diferentes como otros
piensan. Aunque entre Madrid y Lisboa apenas separe una hora de avión,
las diferencias horarias, sociales y protocolarias son mayores. La 'cobra' es habitual.
A los españoles se les reconoce por su saludo, incluso antes de que
hablen. Si dan dos besos, son españoles. En Portugal la costumbre es un
solo beso, así que no se extrañe si le hacen la cobra con su segundo ósculo, fue sin querer, como David Bisbal. Ni se come a las 3 ni se cena a las 11. Sí, en Portugal
van como en Canarias, con una hora menos (ojo, en Azores son dos
menos). Pero eso es casi lo de menos. Para cosas más prácticas, no ose
almorzar a las tres de la tarde ni cenar a las 11; aquí se almuerza a
partir de las 12 y se cena a partir de las 8. En ambos casos, sobre todo
en el almuerzo, no más de una hora. Los relajados horarios españoles no
se entienden. Aquí cuando se queda a mediodía, quiere decir a las 12,
'mediodía' no es un espacio de tiempo entre las 13 y las 15 horas.
Cifuentes sería doctora aquí. Aunque la moda de inventarse títulos también hace furor en Portugal (recientemente dimitió el secretario general del PSD por eso), aquí cualquiera es doutor y doutora,
al menos así son cumplimentados como forma de respetuoso saludo. Los
formalismos, muy en desuso en España, en Portugal son la norma de
conducta. Pero el uso extensivo del doctor que, originariamente se reservaba para los licenciados, ha hecho que el Colegio de Médicos se plantee su retirada y que sus colegiados sean llamados médicos para diferenciarse de la plebe doctora.
Señal de no orinar en la plaza Camões.J. M.
Fumar en los restaurantes, beber en la calle. La
educación y los formalismos son sagrados en las relaciones personales y
privadas, otra cosa son las costumbres practicadas en el espacio
público. Ahí cada cual va a la suya. Fumar es habitual en los
restaurantes. En Portugal rige la ley antitabaco que permite la
convivencia de fumadores y no fumadores en espacios públicos. En teoría
—como la primera ley española— hay que separar los espacios de unos y de
otros; en la práctica la separación es una pegatina. Da igual que por
en medio haya niños, se fuma siempre. También es habitual beber en la
calle hasta altas horas de la madrugada en zonas como Bairro Alto, Cais
de Sodré o Chiado. Las consecuencias son calles convertidas en basureros
y urinarios públicos nocturnos.
Espantosos putos. Dos palabras para que las empleen Alfred y Amaia sin miedo a meter la pata durante su estancia en Eurovisión. Aunque español y portugués comparten muchas palabras, más incluso de las que creen —la geringonça,
Gobierno portugués con apoyo de 4 partidos, en español es jerigonza—,
hay otras que no significan lo mismo, sino todo lo contrario. Los
famosos falsos amigos. Más de un escritor español ha quedado sorprendido cuando el presentador de su libro lo ha calificado de espantoso; que agradezca el elogio, pues significa que le pareció la obra 'maravillosa'. Con la misma naturalidad se emplea la palabra puto —aunque no su femenino— para hablar de los jóvenes. No tiene ninguna connotación peyorativa. Mayores de 65 años, casa asegurada. La avalancha
turística trae dinero y con él grandes ventajas, como la rehabilitación
de palacios en las últimas, pero también un aumento de los precios de
los alquileres, que provocan el desahucio de vecinos que no pueden
asumir el aumento. Esto sucede especialmente en barrios humildes —pero
con el mayor atractivo portugués— como Alfama y la Morería. Ancianos que
nunca salieron del barrio tienen que irse de la casa que los vio nacer. Una ley reciente ha cortado con ello. Mayores de 65 años, personas con
minusvalías o con más de 25 años en la casa no pueden ser desalojados. En Lisboa, es posible vivir puerta con puerta con el Palácio del Governador de Belém —una
noche 200 euros— y una humilde casita rosa —pintada por el propio
hotel—, en donde la inquilina paga menos de dos euros al día
(mensualidad de 50 euros). Son las cosas espantosas de Lisboa.