kate Middelton es la autora del nuevo retrato de la pequeña en vísperas de su aniversario.
Los duques de Cambridge han publicado una nueva foto de su hija. "Los duques están contentos de compartir una nueva foto de la princesa Carlota para celebrar su segundo aniversario mañana", se lee en la cuenta de Instagram del palacio de Kensington, que siguen 1,7 millones de personas. El mensaje va acompañado por un emoji: un globo rojo.
La
foto, una vez más, ha sido tomada por la duquesa de Cambridge en su
casa Anmer Hall, en Norfolk. Esta no es la primera vez que Kate
Middleton ejerce de fotógrafa. En junio de 2015 publicó un reportaje que
mostraba al príncipe Jorge sosteniendo en sus brazos a su hermana pequeña. La duquesa también realizó la fotografía del pequeño príncipe en su primer día en la escuela, el 6 de enero el 2016. Carlota de Cambridge
vino con algo más que un pan debajo del brazo. Cuatro meses después de
su nacimiento, la pequeña princesa generó una riqueza para sus súbditos
que asciende a más de 4.000 millones de euros. La pequeña de los Windsor
contribuyó más a la economía que su hermano el príncipe Jorge,
cuya aportación se calcula en 3.000 millones. Según la agencia de
valoración de negocios y marcas Brand Finance, los beneficios económicos
proceden de la promoción indirecta de ciertos productos, en este caso
la toquilla con que salió del hospital londinense de Santa María, y el carrito antiguo en el que llegó a la iglesia de Sandrigham para su bautizo.
Este
primer lunes de mayo se rinde homenaje a la japonesa Rei Kawakubo, en
una gala en la que son coanfitriones Tom Brady, Gisele Bündchen, Katy
Perry y Pharrell Williams.
Este lunes, centenares
de celebridades, diseñadores, magnates y titanes de la tecnología –todos
examinados por la editora en jefe de Vogue– desfilaran por la alfombra roja del Museo Metropolitano de Arte (MET)
para su tradicional gala anual. Una lista que esta noche es más
estricta que nunca por deseo de Wintour.
La industria de la moda, el show-bussines y la jet set homenajea en la edición de este año a una las creadoras más influyentes del último cuarto del siglo XX: la japonesa Rei Kawakubo, fundadora de la firma Comme des Garçons en 1969.
El número de invitados para el baile de Rei Kawakubo/Comme des Garçons
será menor que el del año pasado cuando ascendió a 610 participantes.
Desde que Wintour asumió la presidencia en 1995, la gala se ha
convertido en una extravagancia llena de estrellas. Los organizadores
pasan meses preparándolo todo.
Este año los anfitriones son Tom Brady,
Gisele Bündchen, Katy Perry y Pharrell Williams.
“El Met Ball es como la Super Bowl de los eventos sociales de moda”, dice en el video André Leon Talley, exeditor de Vogue. Madonna lo definía el año pasado como “una película de Fellini” porque en ella se reúne “lo mejor y lo peor de todo”. Y The New York Times
la considera la fiesta privada de Anna Wintour porque no solo controla
la lista de invitados –en el tráiler se ve cómo sitúa los nombres en las
mesas– y la decoración, también pone sus normas y empareja a estrellas
del cine y la música con diseñadores.
La gala del Met comenzó en 1946 como una cena solidaria. Ahora se ha convertido en uno de los eventos que más dinero recauda. El
año pasado se lograron 13,5 millones de dólares. Las entradas cuestan
desde 30.000 a 50.000 dólares.
"Anna es extremadamente restrictiva sobre quién puede comprar un boleto", dijo un socialite, que ha asistido al evento durante años a Page Six. "Muchas personas que conozco que son amigos y tienen el dinero para
pagar, han sido rechazadas. Anna decide que no pueden ir”. La misma
fuente también ha contado que los miembros que ya donaron en el pasado
10.000 dólares anuales para formar parte del comité, recibirán tarifas
de descuento. A veces incluso las celebridades no pasan el corte. Es el
caso de la supermodelo Coco Rocha, que ha acudido a la cita muchos años
pero este ha quedado excluida. “No sé el motivo”, ha declarado Rocha. Tal vez sea porque la copresidenta de esta edición, Katy Perry, esté
molesta con ella por haberla acusado de ser una imitadora después de que
la cantante se presentara a los MTV Video Music Awards 2013 con el
mismo traje de estampado leopardo firmado por Emanuel Ungaro que la
modelo había usado para el Met casi cuatro meses antes. Kei Kawakubo/Comme des Garçons: Art of the In-Between es la
primera retrospectiva que organiza el museo neoyorquino a un diseñador
vivo después de la de Yves Saint Laurent en 1983. Es también un salto
arriesgado teniendo en cuenta el éxito de las dos últimas exposiciones
que se basaban en conceptos más amplios y asequibles: China y la
tecnología. Y también va a ser la que probablemente más quebraderos de
cabeza traerá a las invitadas a la gala de hoy. Ya que habituadas a
inspirarse en el tema o protagonista de la exposición, probablemente les
será difícil meterse en las creaciones mutantes de Kawakubo, hechas
solo de mangas o a partir de siluetas imposibles como las de su última
colección. Kawakubo es quien en 2014 manifestó que “no estaba intentando
hacer ropa”. Se ciñe más a este objtivo cuando se trata de sus
colecciones de calle pero las que sube a la pasarela son el resultado de
sus reflexiones, diseños que no encajan en las alfombras rojas y que
solo Lady Gaga o Rihanna se han atrevido alguna vez a lucir.
La editora de ‘Vogue’ Japón es una prescriptora de tendencias gracias a sus apuestas por lo inesperado y a su estilo barroco.
Para ella la moda consiste en reinventarse y en arriesgar, y así lo
demuestra con las prendas que elige y muestra a través de las redes
sociales, donde acumula más de un millón de seguidores. La italiana Anna
Dello Russo (1962), editora de Vogue Japón, icono de estilo y
una de las personas más influyentes para fijar las nuevas tendencias,
siempre sorprende. Habla de la moda como una obsesión y se declara una
“maniática” del diseño, omnipresente en desfiles, presentaciones y
fiestas. Igual recibe a Domenico Dolce y Stefano Gabbana en Japón y
viaja a China a presentar la colección de los diseñadores italianos que
posa en su Instagram para Michael Kors o Fendi y se convierte en imagen de la cadena de hoteles de lujo Rosewood. Por encima de todo, la periodista, con más de 18 años de carrera en
Condé Nast Italia, considera que la moda es “una musa a la que hay que
seducir” y, para lograrlo, vale casi todo. El secreto está en
sorprender, en apostar por lo inesperado y provocar un impacto en los
demás y en uno mismo. El shock se produce vistiendo prendas de
noche durante el día, apostando por accesorios brillantes o mezclando
colores. El secreto del éxito para ella se halla en sentirse bien con el
conjunto elegido y en encontrar la armonía entre el cuerpo y las
prendas. “La moda es autenticidad, es una declaración de la propia
libertad”, afirma la italiana en su página web. Es esencial disfrutar de las creaciones que uno lleva. “Si no sientes
el vestido, significa que estás deprimido. Necesitas un cambio de look”, aconseja en una lista de recomendaciones de estilo.
Su imagen va ligada a los minivestidos y a un estilo barroco,
colorido y excesivo cargado de brillos y lentejuelas, tocados,
llamativos estampados, transparencias y tacones de vértigo. Poco tiene
que ver con lo práctico pero, para ella, “la moda es siempre incómoda. Si te gusta estar relajado, nunca conseguirás el look”. El ejemplo más claro de la desmesura es la confesión que hacía al diario italiano Corriere della Sera,
al que contó que tenía dos viviendas unidas, una para ella y otra
exclusivamente para sus vestidos y sus más de 4.000 pares de zapatos. Su gusto lo reflejó en una colección especial que lanzó con la firma sueca H&M en 2012. Tonos dorados, brillos, pieles y figuras de serpientes y cocodrilos
caracterizaron una línea excesiva que incluyó botas de piel hasta la
ingle, bisutería con su nombre grabado y complementos celebrados como un
cinturón de cadenas con abalorios o un clutch metalizado dorado con una serpiente de brillantes ojos verdes. Su pasión por la moda le obliga a estar presente en las redes sociales,
donde comparte varias imágenes al día, que suman miles de me gusta. Además de vídeos de desfiles, imágenes de las portadas de Vogue
y de sesiones de fotos, también muestra su lado más personal y comparte
su rutina de yoga y natación —tiene sus iniciales grabadas en el fondo
de su piscina— e imágenes de su perro, Pedro. En su perfil se entremezclan looks
de infarto —la mayoría de las fotos están tomadas en la calle, en
muchas ocasiones en movimiento— con imágenes relajantes de la
naturaleza. Su paisaje preferido es Apulia, su lugar natal, donde acude a
descansar en vacaciones y disfruta de las tradiciones del sur de
Italia.
No faltan las imágenes con otras personas influyentes de la industria, como la modelo Gigi Hadid, el estilista Edward Enninful —el primer hombre al frente del Vogue británico— o su mano derecha en Vogue Japón, Carlotta Oddi. Y, por su puesto, en sus redes da lecciones de moda, que también ofrece
en persona en encuentros solidarios con estudiantes que quieren hacer
carrera en la industria que ella domina. A ellos les cuenta, según
publica el Quotidiano di Puglia, que “con pasión e ideas claras
se puede llegar a cualquier parte, también partiendo de una pequeña
ciudad” y que los blogs de moda “no son suficiente para alcanzar el
éxito, aunque sí son un buen modo para comenzar un camino que exige
mucho trabajo y formación”.
La pareja se reunirá para la Primera Comunión de su hija Daniela.
Paula Echevarría y David Bustamante
tienen una cita. Será el próximo sábado. Su hija Daniela hace la
Primera Comunión y se espera la presencia de ambos aunque el cantante
tiene una actuación por la noche en Gibraltar.
La
pequeña tomará la comunión con sus compañeros de colegio en la iglesia
de Villafranca del Castillo, la urbanización en la que se encuentra el
domicilio familiar en el que permanecen la actriz y su hija ya que el
cantante se ha trasladado a un piso cercano. Todo parece indicar que
será a partir de esa cita cuando se clarifique legalmente la situación
de la pareja. Fuentes cercanas a ellos han asegurado que están pensando
en emitir un comunicado explicando la situación.
A Paula Echevarría se le ha visto con su hija realizando los
preparativos para la ceremonia del sábado. Uno de esos días se observó
que no llevaba su alianza de casada y otro que había vuelto a ponérsela. Detalles que han dado pie a todo tipo de especulaciones. Y es que
mientras llega el comunicado oficial, cualquier gesto de la pareja es
objeto de minucioso análisis. La actriz también ha vuelto al trabajo,
pero en las últimas horas se le ha visto en el centro de Madrid saliendo
de un despacho de abogados. La pareja ha ocultado su crisis, que se remonta a hace algo más de dos años. Fue entonces cuando acudieron a un notario y pusieron en orden sus asuntos. Se casaron en julio de 2006 en régimen de separación de bienes y crearon sociedades diferenciadas para manejar sus respectivas economías.De cara al exterior sí mantuvieron su sociedad familiar: la imagen de
pareja triunfadora y feliz que tantos beneficios les ha reportado. Un
amigo del matrimonio aseguraba a este diario: “Ha pasado lo que a tantas
otras parejas, su ciclo se ha acabado. No hay que darle más vueltas”.