Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

14 abr 2017

El gran cambio físico de Carmen Borrego.......................Pilar Eyre

La hija de María Teresa Campos ha ido cambiando su aspecto a medida que iba adquiriendo protagonismo mediático. Éste es su gran cambio

La vida de Carmen Borrego ha dado un giro de 180 grados en los últimos tiempos.

 La hija de María Teresa Campos ha pasado de ser la componente más desconocida del clan Campos a adquirir un protagonismo que traspasa la pantalla.

 Carmen está en todas partes: protagoniza el docu-reality 'Las Campos' en Telecinco, es portada de numerosas revistas y hablan de ella día sí y día también en 'Sálvame'.

 Prueba de su creciente importancia mediática es que ha sido capaz de generar tramas y polémicas sin necesidad de pisar últimamente un plató de televisión. Y para prueba, la que tiene liada con Mila Ximénez.

 

De igual forma que su exposición mediática ha ido creciendo, su físico también ha ido cambiando. Poco tiene que ver la Carmen Borrego que se escondía a la sombra de su madre y de su hermana en los actos públicos a los que acudía con ellas hace unos años, a la Carmen Borrego de ahora. La hermana de Terelu ha modificado su forma de vestir, su pelo y también su maquillaje. 
 Carmen ha dejado atrás los colores vistosos y los estampados imposibles y ahora luce prendas mucho más elegantes de colores más suaves y sobrios. Lo mismo ha pasado con su pelo... La hija de María Teresa Campos ha cambiado el rubio platino por un color mucho más natural y en harmonía con su rostro. Carmen se ha 'naturalizado' y eso se nota también en su maquillaje.
Una naturalidad que ha triunfado en el docu-reality que comparte con su madre y su hermana.Pues me parece muy fea, la verdad y no porque sea guapa su madre ni su hermana.

Por los clavos de Cristo........................... Elvira Lindo...............

Dónde está el pecado en decir que parecen excesivos los eventos religiosos estos días.


Traslado del Santísimo Cristo de la Buena Muerte realizado por los legionarios del Tercio "D.Juan de Austria" III de La Legión.
Traslado del Santísimo Cristo de la Buena Muerte realizado por los legionarios del Tercio "D.Juan de Austria" III de La Legión. EFE

Igual que hay un torero (con menos luces de las que debiera dada su profesión) que se pregunta si para ser antitaurino hay que dejar de ducharse, hay una España que “procesiona” (ese verbo) y que se revuelve con furia contra quienes contemplamos abrumados desde lejos la fiebre de los tronos, eligiendo para estos preciosos días primaverales la ciudad más vacía y más libre de tradiciones, salvo las culinarias.
 Unos ven en nosotros una falta de espiritualidad, otros, una dejación de la defensa de nuestra civilización, que como todos sabemos está amenazada.
 Unos ven en nosotros una falta de espiritualidad, otros, una dejación de la defensa de nuestra civilización, que como todos sabemos está amenazada.
 Pero, a pesar de la supuesta amenaza contra la religión católica y la cultura que de ella se desprende, las calles españolas, de arriba abajo, se llenan de tronos estos días.

A mí lo que me provoca esto es una tremenda nostalgia. 
Nostalgia, sí.
 Porque hubo un tiempo, hará no mucho, 15 años tal vez, en que la ironía podía ejercerse contra las creencias de otros sin ánimo a ser lapidado con palabras que quieren ser pedradas.
 La ironía no era un recurso que convirtiera al cronista en practicante de un oficio de riesgo.
 Recuerdo haber leído artículos y haberlos escrito sobre el papanatismo de los políticos que se apuntaban los primeritos a encabezar manifestaciones religiosas. 
Para nuestros representantes era, así lo explicaban, una manera de sumarse al sentir del pueblo.
 Y ya se sabe que cuando se habla de “pueblo” no se admiten excepciones.
 Los que nos quedamos fuera somos otra cosa, extranjeros en nuestro propio país, dado que vamos siendo sistemáticamente excluidos de lo que cada partido entiende por “pueblo”. 
 Yo, actualmente, siento que he entrado ya en la categoría de alienígena, aunque por suerte emito señales que otros alienígenas reconocen y estamos formando un grupo la mar de majo, sin llegar a la categoría de colectivo, porque no tenemos nada en común entre nosotros salvo que no somos pueblo, sino individuos cada uno de su padre y de su madre.
Añoro, sí, aquel pasado aún reciente en que la prosa pesaba menos, era más ligera, y se podía una reír hasta de su sombra.
 En mi caso sin hacer sangre, porque no es mi estilo, pero en estos tiempos de la ira hasta el chiste más blanco te manda a la hoguera si hay quienes lo consideran sacrilegio. 
Y cualquier cosa te convierte en sacrílega, curiosamente todavía más aquello que se refiere a las creencias, dado que mucha gente ha aceptado definirse por ellas, sean ideológicas o religiosas. 
Ay, con lo esclarecedor que resulta que las personas se definan por sus virtudes y sus defectos.
 Pero eso se ha quedado muy antiguo. Recuerdo debates que de pronto parecen caducos porque ya hemos renunciado a traerlos a los foros públicos, a no ser, claro, que un partido los abandere: la pertinencia de los políticos en los actos religiosos o en tradiciones que el presente ha puesto en entredicho.
 De eso estaban llenos los periódicos entonces; ahora solo se expresa el que grita, pero los que escribimos en un tono sosegado también entonces criticábamos cada Semana Santa o cada verano las abusivas fiestas populares, esas celebraciones imposibles de eludir para el no creyente, para el no aficionado o para el que simplemente desearía disfrutar de su derecho continuamente vulnerado a la tranquilidad.
Las descalificaciones a los que no formamos parte del buen pueblo, sea lo que se dé por bueno en cada momento, son tan ásperas, tan faltonas, que una traga saliva antes de manifestarse, pero hay que hacerlo.
 Hay que decirle al torero, por ejemplo, que el antitaurinismo no se lleva en las pintas, es un convencimiento ético no estético, y tampoco se reduce, no debería creerlo así, a los que salen a la calle con pancartas; precisamente, esta es la época en que hay más gente callada por detestar la bronca o por no exponerse, y más temas que van convirtiéndose en tabú sepultados por la gresca y el barullo.
 Lo que debería discutirse se zanja con un improperio.
 A mí tampoco me gusta la bronca, pero, díganme, por los clavos de Cristo, dónde está el pecado en decir que me parece excesiva la presencia de manifestaciones religiosas en estos días dulces de Semana Santa. 
No por ello soy menos espiritual. Ni menos limpia (de corazón). 

 

La estrella de la MTV Clay Adler se suicida en presencia de unos amigos

La muerte del actor, de 27 años, ocurrió el 26 de marzo pero sus padres la han revelado ahora.

 

Clay Adler, en una imagen de archivo.
Clay Adler, en una imagen de archivo. Getty
Clay Adler (Newport Beach, California, 1989), uno de los actores estrella del canal de televisión MTV, se suicidó delante de unos amigos con los que había ido al desierto para hacer unas prácticas de tiro. 
El joven, que había participado en el reality Make it or Break it o de Fish Tank, se disparó a la cabeza el pasado 26 de marzo, pero los hechos han sido revelados ahora por sus familiares.

El fallecimiento del joven, de 27 años y muy poco conocido fuera de Estados Unidos, ha causado gran conmoción en Hollywood. Su amiga Jennifer Lawrence, a quien conoció cuando ambos comenzaban sus carreras, ha asegurado que se siente "totalmente destrozada" por la muerte de Adler.
Adler se había ido con unos amigos a hacer prácticas de tiro en el desierto del sur de California. 
Mientras estaban practicando, volvió el arma contra sí y se pegó un tiro en la cabeza. El joven sobrevivió hasta llegar a un hospital, donde los médicos no pudieron hacer nada por su vida.
Imagen de Newport Habor: The Real Orange County.
Imagen de Newport Habor: The Real Orange County.
Los padres tomaron la decisión de donar sus órganos. "Al menos hemos podido salvar cuatro o cinco vidas", ha manifestado el padre de la víctima, Frank, a la revista People  
No se han hallado restos de alcohol o drogas en los análisis que se han efectuado al cadáver.
"Estamos tristes por la noticia del fallecimiento de Clay Adler", ha dicho en un comunicado la cadena MTV. "Nuestros pensamientos y oraciones están con su familia y amigos en este momento".



La calle habla: cazadoras y hombros al aire.................... Estel Vilaseca

Departamentos de venta de firmas como Mango y Promod cuentan cuáles son las prendas más vendidas de esta primavera para conocer qué lleva realmente la gente.

Una modelo con uno de los diseños de Christian Dior de su colección primaveraverano 2017.
Una modelo con uno de los diseños de Christian Dior de su colección primavera/verano 2017.

Según TagWalk, el Google de la moda, el rosa es el color de la primavera-verano 2017.
 Este motor de búsqueda, inventado por la parisina Alexandra Van Houtte, de 27 años, indexa miles de fotos de pasarela que permiten saber qué tonos, prendas, tejidos y motivos se han repetido más durante la temporada.
 Edited, la empresa capaz de pronosticar mejor que cualquier agencia de tendencias lo que la gente comprará en las tiendas, apuesta también por este color y destaca como silueta clave los diseños con mangas abullonadas.

Vestidos floreados, tejidos plisados, monos, leggins, lentejuelas, hombros redondeados y vestidos camiseros son algunas de las piezas que se repitieron en las propuestas durante las semanas de la moda del pasado septiembre y que llenan las páginas de estilo de las publicaciones de moda.
 Pero, aunque la pasarela dicta, la calle manda, y no siempre las prendas que captan la atención de editores y prensa especializada logran trascender a los consumidores. 
De toda esta amalgama de propuestas, ¿qué está comprando realmente la gente hoy?

 Desde el departamento de ventas de Mango, una de las principales empresas de moda rápida españolas, informan de que una de las prendas más vendidas es la cazadora perfecto, “que ya es un básico”, indican.

 Esta chaqueta de piel que puso de moda el actor Marlon Brando continúa siendo un best-seller que se reinventa: “Sus reinterpretaciones en los colores de moda son un auténtico hit de la temporada”, explican desde la firma.

 Como la famosa chaqueta amarilla de Zara. María Grazia Chiuri la sacó también teñida de rojo pasión en su debut para Dior.

Vestido crudo con botones negros de la nueva línea Commited, de Mango.
Vestido crudo con botones negros de la nueva línea Commited, de Mango.
Dentro de la lista de grandes éxitos de Mango, destaca también un vestido crudo con botones negros de la nueva línea Commited, su primera incursión en moda verde.
 “Es un vestido con un corte bastante especial que, sin embargo, se está convirtiendo en un superventas, sobre todo a nivel online”.
 De hombros redondeados, recuerda a las prendas prácticas de Céline y Stella McCartney y al valioso legado de la diseñadora estadounidense Claire McCardell.
 Por otra parte, la tendencia de hombros al aire y volantes, que ya despegó el verano pasado, continúa pegando fuerte esta temporada, mostrando que la fórmula sigue lejos de agotarse.
En la firma francesa Promod, los monos, las camisas de hombro descubierto y las camisas anudadas a la cintura son las más vendidas, mientras que el denim, el popelín y el lino son los tejidos que destacan.
  Da la sorpresa el trench, una prenda que vuelve a estar de moda gracias a Demna Gvasalia, quien lo recuperó en Balenciaga y Vétements: “En su versión sahariana está funcionando muy bien en todas nuestras boutiques”, detalla Promod. En Kling, una firma de diseño español, triunfa el vestido camisero y el baby-doll con vuelo; dos prendas que siempre aparecen en la lista de los más vendidos: “No importa que sean o no tendencia, este tipo de corte es, sin duda, el favorito de nuestras clientas”, explica el departamento de comunicación de la marca.
Vestido de Promod con hombros descubiertos.
Vestido de Promod con hombros descubiertos.
Otras de las piezas que escalan posiciones en ventas son aquellas que llevan estampados “de nubes, arco iris y gráficos geométricos”, cuentan. 
El rosa es un color recurrente en Kling, aunque si hay uno que persiste imbatible en la lista de sus grandes éxitos es el azul marino. Los que acumulan más cifras de venta en Promod son el amarillo, el blanco y el rojo.
 En mango, repiten el primero, pero cuentan que “el blanco y el negro siguen siendo los más vendidos”.
 Sí a las tendencias, pero con cautela.
 Lejos de estridencias, en la calle parece que ganan las prendas más cómodas y sencillas.