La formación dice que el grupo textil aprovecha las ventajas fiscales de Irlanda, Holanda y Suiza.
La compañía critica que el informe contiene graves errores.
Inditex, la compañía dueña de cadenas como Zara o Massimo Dutti, se ahorró 585 millones de euros en impuestos entre 2011 y 2014 gracias a sus filiales
en Holanda, Irlanda y Suiza, según un informe que presenta este jueves
el grupo de Los Verdes en el Parlamento Europeo.
La compañía rechaza las acusaciones y asegura que el informe contiene muchos fallos y se equivoca "gravemente".
La investigación de la formación política denuncia que la presencia de la multinacional española en estos tres países tuvo como objetivo principal beneficiarse de las ventajas fiscales que ofrecen. Para lograrlo, según el informe, declaró allí beneficios obtenidos en otros mercados, una práctica legal y generalizada, pero cada vez más contestada por sus efectos nocivos para la recaudación de los Estados que no participan en la carrera por atraer inversiones a costa de rebajar los tributos.
La compañía rechaza las acusaciones y asegura que el informe contiene muchos fallos y se equivoca "gravemente".
La investigación de la formación política denuncia que la presencia de la multinacional española en estos tres países tuvo como objetivo principal beneficiarse de las ventajas fiscales que ofrecen. Para lograrlo, según el informe, declaró allí beneficios obtenidos en otros mercados, una práctica legal y generalizada, pero cada vez más contestada por sus efectos nocivos para la recaudación de los Estados que no participan en la carrera por atraer inversiones a costa de rebajar los tributos.
El informe de
35 páginas desglosa las cantidades que algunos países europeos
supuestamente han dejado de percibir por las prácticas de la
multinacional española.
En concreto, los Verdes señalan que Inditex usó
Holanda para ahorrar impuestos a través de los royalties; Suiza, para comprar y vender mercancía con impuestos muy reducidos; e Irlanda para rebajar la factura fiscal de ventas online y seguros, entre otras cosas.
Así, según el texto, el pago de royalties
—una especie de canon a las franquicias— a su filial holandesa permitió
a Inditex reducir su factura fiscal a solo el 15% frente al 30% que
habría pagado en España, un ahorro de 218 millones de euros.
Inditex niega las acusaciones
Sin embargo, Inditex niega que sea así y critica que el informe “se equivoca gravemente”. “Las
entidades españolas no pagan por los derechos de propiedad industrial,
sino que reciben beneficios de su explotación”, alega la empresa.
También desmiente que haya eludido el pago de 84 millones a Hacienda a
través de ITX Merken, una de las más de 60 compañías que según Los
Verdes forman parte de la estructura de Inditex en Holanda.
Los autores
del estudio estiman que también disfrutó de condiciones benévolas en
Suiza, donde calculan que pagó un máximo impositivo del 7,8% por sus
beneficios gracias a los tax rulings que ofrecen los cantones
helvéticos, impuestos a la carta fruto del acuerdo entre empresas y
administraciones.
Por último, citan a Irlanda dentro del trío de Estados
con legislaciones laxas que la mayor empresa española por
capitalización habría aprovechado.
El documento señala que estableció
filiales en Irlanda dedicadas al comercio electrónico, la actividad aseguradora y a préstamos entre compañías del grupo Inditex para beneficiarse de su reducido impuesto de sociedades, de solo el 12,5%, el más favorable de la zona euro y uno de los más bajos del mundo.
La fórmula es relativamente simple: las multinacionales tienen filiales
que comercian entre sí, de forma que se producen transferencias dentro
de la propia compañía para que, por lo general, se acabe tributando por
los beneficios en el país con menores impuestos.
Inditex
también replica este punto.
Asegura que cuenta con más de 400 sociedades
en 93 mercados que realizan operaciones entre ellas, todas dentro de la
legalidad y auditadas por las autoridades, y argumenta que en el
periodo 2011-2015 su tasa fiscal se situó entre el 22% y el 24% pagando
en ese tiempo más de 4.400 millones de euros en impuesto de sociedades,
la mitad de ellos en España.
Los Verdes no ponen en duda la legalidad de
su actuación, pero consideran que el grupo creó subsidiarias en esos
tres países para pagar menos impuestos, como muestra que gran parte de
su actividad en ellos fuera ajena a la venta de ropa, y sobre todo, por
su facturación sobredimensionada.
Holanda: pocos empleados, mucho beneficio
El informe
recoge numerosos ejemplos de que su peso es muy superior al que les
correspondería por tamaño, con Holanda como el país más relevante del
rompecabezas.
Inditex solo contaba con 204 empleados y 56 tiendas en el
país centroeuropeo en 2014 frente a las más de 300 de Portugal o Italia.
Pese a ello, el texto asegura que casi un tercio de los beneficios
globales del periodo 2011-2014 se declararon a través de las tres
principales compañías de la multinacional con sede en Holanda. Otro
ejemplo más: el beneficio por empleado de la filial holandesa ITX Merken
habría ascendido en 2014 a 2,4 millones de euros frente a los apenas
18.000 euros de media por trabajador que estiman para todo el grupo.
Para facilitar
la comprensión de las “agresivas” técnicas de ingeniería fiscal que los
europarlamentarios ecologistas achacan a Inditex, el escrito hace un
recorrido por el proceso presuntamente concebido por la multinacional
para ahorrar impuestos.
En primer lugar, la filial suiza ITX Trading,
propiedad a su vez de otra subsidiaria holandesa de Inditex, compra la
ropa a proveedores de países como Bangladesh, Turquía, Marruecos o
China.
A continuación, la vende a la matriz española de cada marca
(Massimo Dutti, Zara…) obteniendo un beneficio por el que paga en Suiza
impuestos inferiores al 7,8% gracias a un traje a medida fiscal.
Luego, según
el informe, la marca española vende esa ropa a otros países.
Así lo hace
por ejemplo Massimo Dutti España a su equivalente en Italia, donde se
comercializa al gran público y se genera un beneficio.
El enrevesado
rastro del dinero continúa con la marca italiana pagando un 5% de las
ventas en concepto de royalties a una filial holandesa que
tributa los beneficios a un favorable 15% evitando así las mayores tasas
impositivas de Italia.
Entre tanto, las filiales financieras que operan
en Irlanda se aprovechan del bajo impuesto de sociedades, y finalmente
una parte del beneficio generado en los tres países llega a Inditex a
España en forma de dividendos pagados desde Holanda.
Tres países con un polémico historial
El historial de los tres países en los que se ha investigado la actividad de Inditex arroja oscuros precedentes.
Suiza ha sido hasta hace poco ejemplo de opacidad y
fiel garante del secreto bancario, y salió de la lista de paraísos
fiscales de la OCDE en 2009.
La Comisión Europea
ordenó a Starbucks devolver a Holanda entre 20 y 30 millones por
beneficiarse de ventajas fiscales ilegales, e Irlanda es el último
paradigma de economía dopada por los bajos impuestos a empresas y
luchará en los tribunales para salvar su maltrecha reputación después de
que Bruselas exigiera a Apple la devolución de 13.000 millones de euros por disfrutar de un traje fiscal a medida que distorsionó la competencia durante años.
Más allá de
visibilizar el caso de Inditex, Los Verdes reclaman acelerar los cambios
legislativos para avanzar hacia la armonización fiscal en la Unión
Europea y evitar así la competencia entre Estados miembros por su parte
del pastel. "Necesitamos urgentemente adoptar medidas para obligar
a las empresas a tributar allí donde se produce su actividad.
El
desglose de la información fiscal por países de las multinacionales, una
base imponible consolidada y un tipo mínimo del impuesto de sociedades
en la UE son tres medidas urgentes para terminar con este tipo de
prácticas", pide el eurodiputado de Los Verdes Ernest Urtasun.
Los precedentes de Ikea y BASF
Otras empresas como Ikea
o la alemana BASF han sido acusadas anteriormente por la formación
ecologista de utilizar trucos fiscales para ahorrar impuestos.
En el caso de la multinacional sueca, se estima que ahorró 1.000 millones de euros gracias a sus filiales en Holanda y Luxemburgo, mientras que la química alemana esquivó el pago de 923 millones valiéndose de incentivos en Holanda, Bélgica, Suiza y Malta.
No solo haciendo Batas cutres se llega a ser el Hombre más rico del mundo. Es más no dicen como obtienen las telas y quienes fabrican la Ropa y demás bisutería.
Copian descaradamente a otras firmas el triple de caras y esas marcas carisimas no hacen ni dicen nada......cosas raras me parece...
En el caso de la multinacional sueca, se estima que ahorró 1.000 millones de euros gracias a sus filiales en Holanda y Luxemburgo, mientras que la química alemana esquivó el pago de 923 millones valiéndose de incentivos en Holanda, Bélgica, Suiza y Malta.
No solo haciendo Batas cutres se llega a ser el Hombre más rico del mundo. Es más no dicen como obtienen las telas y quienes fabrican la Ropa y demás bisutería.
Copian descaradamente a otras firmas el triple de caras y esas marcas carisimas no hacen ni dicen nada......cosas raras me parece...