Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

18 ago 2016

Vargas Llosa e Isabel Preysler, vacaciones exóticas

La pareja pasea su amor en un 'resort' del sudeste asiático.

¿Esta mujer alguna vez hace algo que no sea fiestas, vacaciones, toros, ópera, porque va Vargas Llosa, él escribe, y hace reportajes pero ella? ni lee porque tiempo entre retoque y cirujia no tiene.

Si el verano pasado fue una escapada al Caribe, esta vez la pareja que forman Vargas Llosa e Isabel Preysler está viviendo lo que la revista '¡Hola!' califica de "luna de miel anticipada" en una playa del sudeste asiático. 

 Como muchos novios que eligen este exótico destino, el escritor y la reina del papel 'cuché' se han alojado unos días en un 'resort' de lujo y han disfrutado de largos paseos y de una excursión en lancha. 

El nobel, que está divorciado de Patricia Llosa, también se ha reservado tiempo para la lectura.

EN TRAJE DE BAÑO

La revista recalca que la imagen de Isabel en traje de baño se resistía y que hace 10 años que no se lograba captarla saliendo del mar
. La pareja, de la que se hacen todo tipo de conjeturas sobre una posible futura boda aunque ellos de momento dan la callada por respuesta, está disfrutando de un verano movido.
 Empezaron el mes de julio con un crucero por los fiordos, siguieron con una escapada a las islas griegas, dieron el salto a Bali y de ahí a este otro enclave del sudeste asiático.
 Los hijos de Isabel se han mostrado repetidas veces "encantados" con esta relación.   


Isabel Preysler presume de figura en bañador


preylser-banador770.jpg
La reina de corazones y su novio están disfrutando de unas exóticas vacaciones por el Sudeste Asiático, donde ella ha presumido de cuerpazo en traje de baño a los 65 años.
 Con un bañador de raya ancha en bonitos tonos pastel, Isabel Preysler es la viva imagen de aquel refrán que dice que "quien tuvo, retuvo".
 Hacía 10 años que la viuda de Miguel Boyer no se dejaba ver con un look playero, pero las nuevas imágenes, que publica este miércoles la revista Hola, demuestran que sigue exactamente igual que entonces.
 En ellas, Isabel Preysler presume de su bonita y estilizada figura con una elegante colección de trajes de baño que llevan su correspondiente pareo a juego.
 En tonos pastel a rayas, en un vivo coral o con detalles en rosa, la madre de Tamara Falcó está espectacular con todos ellos, prueba de que los cuidados y las rutinas de belleza que lleva a cabo a lo largo del año son más que efectivas.
 Isabel Preysler está veraneando con su novio, Mario Vargas Llosa (80), en el Sudeste Asiático.
 Allí han hecho una romántica parada tras pasar por los Fiordos Noruegos, las Islas Griegas y Bali.
 Ahora, la pareja vive sus días más románticos en una pequeña isla en la que ha reservado una lujosa villa que cuenta con personal de servicio exclusivo y situada al borde del mar con jardín propio. Rodeados de naturaleza y playas paradisíacas de arena blanca, Isabel y Mario ven pasar los días entre miradas, sonrisas, besos y abrazos.
 Todo un derroche de romanticismo que sólo se ve interrumpido durante cinco horas al día, tiempo que dedica el escritor a trabajar en su nueva novela, que luego lee ilusionado a su pareja. 
Un viaje que finalizará dentro de unos días, cuando la pareja regrese a Madrid para retomar sus quehaceres diarios.
A él ya se le nota el peso de la edad, bolsas, peluca e implantes de pelo, sobrepeso y cansancio en su rostro, ella ya no tiene 30 años y eso por mucho que se cuide tb se empieza a notar, pero...........

Y que quehaceres diarios tiene? Cirujia, entrenador personal, masajes, dar ordenes al servicio, volver a cenas y viajes.....

Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa regresan este lunes a Windsor.


preysler-llosa-windsor.jpg
Un año después de aparecer juntos en la cena de gala que ofreció Carlos de Inglaterra a Porcelanosa y sus vips habituales, Isabel y Mario regresan al castillo de Windsor invitados de nuevo por el Príncipe de Gales. Richard Gere y su novia, Cayetano Rivera y Alfonso Díez estarán entre los privilegiados asistentes. 
No es probable que la visita de Cameron a Gibraltar sea unos de los temas de conversación.

Esta vez las circunstancias son otras.
 En junio de 2015 el hecho de que coincidieran en la fiesta la viuda de Miguel Boyer y el premio Nobel no extrañó a nadie aunque alguno se preguntaba qué hacía el escritor integrado en la troupe de la empresa valenciana.
Unos días más tarde la portada de Hola desvelaba la incógnita con unas fotos de la pareja después de un almuerzo en el hotel Eurobuilding de Madrid. Isabel y Mario vivían un romance, el romance del año.
El próximo lunes 20, Isabel y Mario forman parte de again el grupo de invitados de la empresa de cerámicas de Villarreal, propiedad de las familias Colonques y Soriano.
 La diferencia es que ahora su romance es oficial, Vargas Llosa está divorciado y hasta podrían casarse antes de terminar el año.

Y también unos 200 clientes de Porcelanosa.
 Todos ellos deberán seguir el estricto protocolo de los Windsor: cóctel de ocho a nueve de la noche, en el que el príncipe saludará y charlará con cada uno de los asistentes, seguido de la cena que se acaba a las once menos cuarto en punto, m, momento en el que Carlos se levanta, se despide únicamente de los comensales con los que ha compartido la mesa y todo el mundo debe abandonar después el salón.
 Las imágenes exclusivas de la elegante velada, dos días después en la revista que descubrió el romance .
 

 

 

Benedetti y la memoria de su exilio caben en una maleta........................................................ María Robert....

El montaje 'Una mujer desnuda y en lo oscuro' rescata los años más desconocidos de uno de los poetas más universales.

Esther Vega y Emilio Linder en una escena de 'Una mujer desnuda y en lo oscuro'.

"Un viento misionero sacude las persianas. 
No sé qué jueves trae, no sé qué noche lleva. Ni siquiera el dialecto que propone...". 
Mario Benedetti escribió esos versos con una maleta en la mano.
 El libro Viento del exilio y otros versos forman parte del recuerdo literario de una de las etapas vitales más olvidadas del poeta: su exilio. 
Así lo cree el dramaturgo Mario Hernández, autor del homenaje teatral Una mujer desnuda y en lo oscuro, que permanecerá en el Teatro Lara de Madrid todo agosto, y con el que pretende acercar al público al Benedetti más político. 
"En España lo conocemos como el poeta del amor, pero nos hemos olvidado que puso su talento y su voz, su poesía y su prosa, para denunciar la situación tan terrible que vivía América Latina. Es de los poquitos escritores que contó eso", recalca Hernández. "Creo que rendirle ese homenaje, sin desmerecer al Benedetti romántico, erótico, divertido, y tantas cosas más que era, que también lo recoge la obra, era justo".
Benedetti (1920-2009) partió al exilio en 1973, tras un golpe de Estado en Uruguay.
 Tenía 53 años, y atrás dejó a su mujer, Luz López Alegre. 
No volvería a la patria hasta 10 años después, una vez restaurada la democracia.
 Durante el tiempo que estuvo alejado de su hogar, viajó y vivió por Buenos Aires, Madrid, Cuba, Mallorca, sin parar de denunciar la situación de su país ni la represión de otros vecinos como Chile y Argentina.
 "Él siempre cantaba, dentro de todo su activismo, a la vida y a la esperanza", subraya el director. "Espero que en el montaje hayamos transmitido que la vida es muy dura, que el mundo es injusto, pero que a pesar de todo ello, hay mucha esperanza y que la esperanza está en nosotros".
Encontrar a un actor que pudiera resaltar sin estridencias todos esos matices tan complejos de una figura como la de Benedetti era una tarea arriesgada.
 Si físicamente el parecido entre el escritor y Emilio Linder, el protagonista, es, como asegura Hernández, "perturbador", cuando comienza a recitar el texto, la emoción no hace sino expandirse.
 El director es consciente de la sensación que causa el actor en el público. 
"Para Emilio, recitar poesía es como respirar. 
La transformación es fácil, se le pone el bigote y ya está. Solo eso. Ya es Benedetti".
Fotografía del montaje 'Una mujer desnuda y en lo oscuro'.
Esther Vega es la otra protagonista, la mujer desnuda y en lo oscuro, trasunto de las mujeres conocidas y amadas del poeta.
 A ella, la noche antes de que termine el exilio, comienza a relatarle sus recuerdos de esos 10 años, sus viajes, sus anécdotas, su soledad, sus miedos.
De hecho, todo el libreto está extraído de poemas, cuentos, novelas, artículos de periódicos... 
"Solamente he reconstruido el viaje de 12 años de Mario a través de sus propias palabras", explica Hernández.

Una travesía en la que, pese a todo lo políticamente activo que se mantuvo, no para de escribir al amor y a las emociones más mundanas.
 De su último periodo en el exilio datan algunos de sus poemas más reconocidos, como Táctica y estrategia.
 Esa combinación de hombre comprometido, romántico y divertido es la que el autor se empecina en resaltar, es el Benedetti que él imagina desde que empezó a empaparse de su obra.
 "Por mucho que la historia sea trágica, la obra tiene mucho humor también. Porque él era así". 

 

A quien corresponda.....................................................................................Enrique Vila-Matas

María Ogura es insegura, cualidad que el escritor catalán considera de gran utilidad en esta recomendación que dirige a una universidad neoyorquina.

COLUMNISTAS-REDONDOS_VILAMATAS
ES PARA MÍ un placer recomendarles a María Ogura para la plaza de lecturer de español en el Department of Spanish and Portuguese de la escuela de Artes y Ciencia de New York University.
Tras haber leído la hasta ahora única novela de Ogura, El inventor del individualismo, creo intuir que esa exquisita sujeción al canon realista español de la que hace gala en su primer libro tendrá continuidad en la segunda novela que se propone escribir y para la que necesita la estabilidad económica que podría proporcionarle la plaza de lecturer.

Para el puesto solicitado considero que es una candidata idónea, no sólo por la experiencia que tiene en la enseñanza del español, sino porque, como deja ver en El inventor del individualismo, su particular relación con el lenguaje revela una clase de conocimiento íntimo de la lengua y unas capacidades comunicativas fuera de lo común y que, a buen seguro, en caso de ser elegida, sabría también transmitir de una manera clara y desenfadada en las aulas.
He insinuado un notable genio comunicativo, y créanme que sin duda lo tiene.
 No hay día en que al hablar en público no mantenga con fuerza el interés de los oyentes. Y es curioso y debo exponerlo aquí: parte del interés que sabe crear surge en realidad de la íntima fascinación que siente por un tipo de inseguridad que tiene a bien delatar en público de pronto, cuando menos uno lo espera.
Es la misma fascinación por la fragilidad que se asoma de vez en cuando a las páginas de El inventor del individualismo, donde de repente todo cambia y, como si se hubiera hartado de ser tan adorablemente convencional y de estar sólo complaciendo a trasnochados “sociólogos de la literatura” de su fúnebre país, da giros de 180 grados y entonces personajes, sentimientos y hechos se ven sometidos a un vuelco radical que apenas dura nada, pero nos deja perplejos, pues sentimos que, sin haberlo solicitado, se nos quiere obligar por momentos a poner patas arriba todo, especialmente la buena conducta de la convencional narradora.
Ni que decir tiene que, dado que hay que saber mantener en todo momento la atención de los alumnos, considero que esa peculiar fascinación por la inseguridad que la lleva de pronto a buscar en la intemperie el frío de lo imprevisto, le habrá de ser  a Ogura de una gran utilidad a la hora de mantener tanto la tensión como la atención en las aulas, siempre y cuando se dé el caso, claro, de que se decidan ustedes a elegir a mi recomendada y por tanto se atrevan a correr el bello riesgo de que hallándose ella, por ejemplo, dictando una lección sobre la prodigiosa incidencia de la crisis económica en la narrativa española actual, interrumpa en seco su discurso para tatarear Help y preguntarse poco después cómo puede ser que en su tierra muy pocos sean conscientes de que el lenguaje no es nunca algo que represente la realidad, sino algo que “hace y deshace” esa realidad, siempre desde la más irrevocable subjetividad. Por esto y por lo otro, apoyo la candidatura de María Ogura, pues su insegura forma de trabajar sólo puede mejorar las clases de la New York University.
 Pero no duden en consultarme cualquier información adicional. Reciban un cordial saludo.



Un año de lecturas feministas...............................................................Emma Rodríguez

La actriz británica Emma Watson abandera un club literario con un único fin: que se lean más libros escritos por mujeres.
Parece que Emma Watson ha crecido fiel a su personaje de Hermione en Harry Potter, una joven inteligente, valiente y convencida de que hay mucho que aprender en los libros.
 La actriz creó el pasado enero su propio club de lectura y anunció que dejaba de lado la actuación para dedicar 2016 a leer y a estudiar temas de género, un ámbito cada vez más importante en su vida desde que se convirtió en embajadora de buena voluntad para la ONU y puso palabras a la desigualdad entre los sexos con un discurso que dio el pistoletazo de salida a la campaña HeForShe.
Que Watson está cumpliendo con creces su objetivo se comprueba al entrar en la plataforma Goodreads, donde se aloja su comunidad, que ya supera los 140.000 miembros y es un buen lugar para hablar de feminismo, especialización que marca la diferencia con aventuras similares lideradas por famosos como la presentadora Oprah Winfrey o el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.
Para empezar su andadura, Watson optó por Mi vida en la carretera, unas memorias –que Alpha Decay publicará en castellano en octubre– de Gloria Steinem, veterana activista e icono de la lucha por los derechos de la mujer en los sesenta.
 Cada dos meses se elige un nuevo título, que se lee y discute.
 La propia intérprete destaca citas y fragmentos interesantes de los libros seleccionados, hace comentarios, formula preguntas para abrir el diálogo y, cuando tiene ocasión, sorprende con entrevistas a las autoras.
 En su estantería se encuentran obras como El color púrpura, la estremecedora historia de Alice Walker sobre la esclavitud; novelas gráficas como Persépolis, de la iraní Marjane Satrapi, o el rompedor ensayo de Caitlin Moran Cómo ser mujer.
 Aún no está en la lista la autora nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie, quien en su ensayo Todos deberíamos ser feministas señala que “no es fácil tener conversaciones sobre género”.
 Irritan a la gente, escribe, “porque incomoda pensar en cambiar el estado de las cosas”.
Romper con esos esquemas, promover la conversación, es lo que pretende Emma Watson, quien, como dice Elena Lasheras Pérez, fundadora de la Librería de Mujeres de Madrid, “se ha puesto las gafas moradas y ya no se las puede quitar, porque eso significa un cambio de conciencia.
porque eso significa un cambio de conciencia. Hay que aplaudir que un rostro conocido declare su pasión por los libros, pero mucho más que se declare feminista”.
Feministas se han declarado actrices como Patricia Arquette o Amy Schumer, que han alzado la voz ante las desigualdades de Hollywood, pero como alertaba recientemente en el diario The Guardian la periodista estadounidense Andi Zeisler, autora del libro We Were Feminists Once, hay que valorar en su justa medida la aportación de los personajes famosos a causas como la feminista. A todos ellos, escribía, se les da muy bien abanderar movimientos, pero “se limitan a ofrecer un mensaje seductor y, sobre todo, comprensible para el mayor número posible de gente”. 
Y, recordaba, el feminismo ni es sencillo ni es entretenido para la mayoría.


Emma Rodríguez

(S/C de Tenerife). Cuenta con una larga trayectoria como periodista cultural, desarrollando su trabajo en medios como el periódico El Mundo.
 Actualmente dirige la revista digital Lecturas Sumergidas, especializada en entrevistas y artículos a fondo de literatura, pensamiento y otros ámbitos de la cultura.