La actriz recibe el premio Corral de Comedias del festival de Almagro por su extensísima trayectoria.
Será casualidad, pero Almagro (Ciudad Real) amaneció hoy, jueves,
nublado y con llovizna en el día de la inauguración de la 39ª edición de
su festival Internacional de Teatro Clásico, un cielo inhabitual en estas fechas en la localidad manchega.
Sin embargo, fue llegar la actriz Concha Velasco al palacio Valdeparaíso para charlar sobre la concesión del 16º premio Corral de Comedias del festival por su relevante trayectoria en las artes escénicas, y salió el sol.
Concha Velasco (Valladolid, 1939) nunca había estado en Almagro como actriz, sí como espectadora.
Ahora, a los 76 años, ha acudido para interpretar en el monólogo Reina Juana a quien la historia motejó como La Loca, en una obra escrita por Ernesto Caballero y dirigida por Gerardo Vera que ya se pudo ver este año en Sevilla y Madrid. ¿Por qué es su primera vez en Almagro?
"No lo sé, nunca me lo habían ofrecido, y eso que soy de las que llama a los directores y productores para trabajar. Ha llegado cuando tenía que llegar".
Sin embargo, fue llegar la actriz Concha Velasco al palacio Valdeparaíso para charlar sobre la concesión del 16º premio Corral de Comedias del festival por su relevante trayectoria en las artes escénicas, y salió el sol.
Concha Velasco (Valladolid, 1939) nunca había estado en Almagro como actriz, sí como espectadora.
Ahora, a los 76 años, ha acudido para interpretar en el monólogo Reina Juana a quien la historia motejó como La Loca, en una obra escrita por Ernesto Caballero y dirigida por Gerardo Vera que ya se pudo ver este año en Sevilla y Madrid. ¿Por qué es su primera vez en Almagro?
"No lo sé, nunca me lo habían ofrecido, y eso que soy de las que llama a los directores y productores para trabajar. Ha llegado cuando tenía que llegar".
Con camisa, pantalón y zapatos negros y chaqueta blanca, acudió Velasco al encuentro con los medios, con su eterna sonrisa y simpatía.
"Doy gracias a Dios por tener a los 76 años ilusión en la vida y en el trabajo", declaró quien ya lo ha sido todo en el teatro, el cine y la televisión
. De su preparación para Reina Juana contó que dedicaba "cinco horas de estudio al día por página" de una obra que muestra las últimas horas de la reina castellana.
La gran intérprete se felicitó porque, a pesar de que en su trabajo ha sufrido "todo tipo de enfermedades y caídas", ha sido providencial su "memoria prodigiosa".
El futuro inmediato de quien quiso ser bailarina en sus comienzos es dar voz a la atormentada Juana la Loca "hasta finales de 2017, aunque les he dicho a los responsables de la obra ‘pero vosotros sabéis que edad tengo?"
. Uno de estos la acompañó en la rueda de prensa: el director Gerardo Vera, que se declaró “impresionado” cada vez que ve a Velasco en el escenario, “un lugar que se ha convertido en prolongación de su vida”.
Vera, para quien también es su primer Almagro, alabó a la vallisoletana porque, “en un monólogo no hay trampa ni cartón, o tienes una gran actriz o te pegas una hostia”
. De la relación entre ambos en la preparación del montaje, Vera señaló que "no hablaron mucho de trasfondos, no hemos perdido ni un segundo, porque a Concha la pones en un trampolín y ella se tira".
Una imagen que le llevó a definir a Velasco como su “flotador” para que el texto no naufragase
. A esa metáfora respondió la actriz con humor:
Sobre el otro motivo de su presencia en Almagro, el premio Corral de Comedias, la directora del festival, Natalia Menéndez, dijo que cuando ella propuso a Concha Velasco como merecedora del galardón, los miembros del jurado lo aceptaron por unanimidad.
Una distinción que para Velasco "supone seguir adelante, porque la vida, a los 76 años, puede comenzar".
Este reconocimiento se suma al premio Nacional de Teatro (1972), la Medalla de Oro de las Bellas Artes (1987), un Goya de Honor (2012), el premio Ondas a Mejor Actriz (2012), el premio de la Academia de Televisión a toda una vida…
Antes de despedirse, Velasco —que recogerá esta noche el galardón en el teatro Municipal de Almagro de manos de Menéndez y del ministro de Educación, Cultura y Deporte en funciones, Íñigo Méndez de Vigo (en principio la ceremonia iba a celebrarse en el precioso Corral de Comedias del siglo XVII) — quiso remarcar que lo suyo fue siempre “vocacional” y que su célebre frase de “Mamá, quiero ser artista”, que se convirtió hasta en un musical, “estaba bien”, pero que ella tuvo claro siempre que lo que le gustaba era el teatro.
Eso y cantar, porque en el día en que han comenzado los Sanfermines, no se le olvidó que en la plaza de toros de Pamplona, cuando se paran las corridas para dar cuenta de las viandas y el vino, se canta La chica ye ye, el tema que ella popularizó en los sesenta, cuando protagonizó comedias indispensables del cine español.
Y cuando, como confesó en una entrevista, todos los actores le querían meter mano “porque estaba buenísima”.
Y fue irse Concha Velasco y volvió a nublarse, quién sabe por qué.
“Me han llamado muchas cosas en la vida, pero flotador, nunca”.