Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

21 feb 2016

Esta es la diferencia entre tristeza y depresión...................................................... Raquel Rivera

La primera afecta a emociones básicas. La segunda dura, al menos, dos semanas, e implica bajón de autoestima o pérdida de peso. También hay penas largas.


Para sentirnos tristes, tenemos que vivir experiencias dolorosas, frustrantes, desafortunadas, estresantes: la pérdida de un familiar, un divorcio, el desempleo, una grave enfermedad, la enemistad…. Pero para sentirnos deprimidos, no es necesario que se haya cruzado un hecho dramático, lamentable, hiriente.
 La depresión es resultado de la interacción de varios factores: genético, cambios neurobiológicos y ambientales
. “La tristeza es una emoción básica que experimentamos por situaciones negativas: cuando muere un ser querido, no se cumplen las expectativas personales…
 Es como el miedo, la rabia, el asco", explica Luis Caballero, vocal de la Sociedad Española de Psiquiatría.

"En cambio, la depresión es una enfermedad, en el sentido psiquiátrico, en la que hay una tristeza patológica que es intensa y más duradera y que está asociada a otros síntomas.
Estos son la anhedonia (la incapacidad para sentir placer), la abulia (notable falta de energía), la pérdida de peso y apetito, trastornos del sueño, fatiga, dificultades para concentrarse, y sucesión de ideas reiteradas de sentimiento de culpa, preocupación excesiva por la salud y fantasías suicidas”, agrega el experto.
La depresión puede desencadenarse por los hechos trágicos enumerados al principio.
Pero también, sin causa externa que la justifique. “Puede surgir en una vida normal, sin pasar por situaciones estresantes”, expone Caballero, que, además, es jefe del servicio de psiquiatría y psicología clínica del grupo HM Hospitales CINAC.
Un aspecto para diferenciar la tristeza de la depresión es la duración. El estado de ánimo depresivo con pérdida de interés y agotamiento, dura, como mínimo, dos semanas.
Los cambios químicos del cuerpo influyen en el estado de ánimo, y los procesos de pensamiento y factores biológicos contribuyen en algunos casos de depresión. Un trastorno, que según indica José Ángel Arbesú, coordinador del Grupo de Trabajo de Salud Mental de SEMERGEN, cuando se manifiesta con intensidad afecta a la funcionalidad de la persona que lo sufre –tanto personal como familiar y social.
Para este especialista, “se ha frivolizado con la palabra depresión”; y entre las causas, menciona que se confunde también con otros problemas de salud mental.
 Por ejemplo, el trastorno adaptativo. “Es un proceso de tristeza que dura unos seis meses y que presenta síntomas depresivos, pero no lo es realmente, como ocurre con la pena cuando perdemos un trabajo o a un ser querido”.
Existen señales sutiles que pueden ayudar a identificar la depresión, según indica la American Psychological Association (APA), como la pérdida de identidad o de autoestima.

Una genética predispuesta

¿Ha influido en un repunte de consultas por cuadros depresivos? "Ha podido desencadenar cuadros mixtos de ansiedad y depresión en personas predispuestas a ello, porque la depresión siempre se produce por la interacción de varios factores, genéticos y externos”, incide el doctor Caballero.

¿Y cómo incide el factor genético? “Convierte a una persona en vulnerable ante situaciones adversas”, señala José Ángel Arbesú.
 También, existe la depresión endógena, en la que el componente biológico y genético pesa tanto que el trastorno se puede hacer crónico y más profundo.
La depresión afecta a entre el 4 y 5% de la población en España, y el riesgo de padecer un episodio es el doble entre las mujeres debido a factores sociales y hormonales.
Otra diferencia con la tristeza es el daño físico.
 Según Luis Caballero, la enfermedad se enmascara en ocasiones con síntomas que son la punta del iceberg.
 De hecho, hay veces que, por error, "se trata un cuadro de pérdida de peso, fatiga crónica o problemas de colon irritable, pero no se aborda la depresión, que es lo que está de fondo”, advierte el doctor.
Identificar las causas que conducen a la depresión es el primer paso para tratarla, con ayuda profesional y la esperanza de una luz al final del túnel.
 Cuando el enemigo es la tristeza, hay estrategias más sencillas, como llamar a un amigo una desabrida tarde de domingo.

 

Ciudad sin ley.................................................................................. CLARA LAGO

La actriz reflexiona sobre los insultos y desprecios sufridos por el actor Dani Rovira tras presentar la última gala de los Premios Goya.

Dani Rovira y Clara Lago, en la gala de los Premios Goya de 2015. EFE
Comencé a escribir este texto queriendo denunciar algo que me generaba mucha rabia: el linchamiento a Dani Rovira por su presentación en la última gala de los Goya.
 Pero este fue únicamente el detonante para hacerme reflexionar de una manera más profunda sobre algo que, lejos de ser un hecho puntual, sucede con más frecuencia de lo que pensamos.
Y, lógicamente, no estoy hablando de las críticas, ya que si estas son constructivas nos pueden ayudar a mejorar y a crecer.
 Pero no hablo de eso. No.
 Hablo de algo que no tiene pies ni cabeza ni razón de ser.
 Y cuando digo que no tiene pies ni cabeza lo digo en sentido literal, ya que a veces no suelen ser más que un huevo seguido de un timeline que consta, básicamente, de insultos y desprecios. Estoy hablando de los haters u "odiadores" en las redes sociales.
Las redes sociales… Qué cosa tan demencial.
 Hace apenas cinco años no existían y hoy parece que el friki es quien no tiene al menos dos.
Pero, desgraciadamente, nadie nos ha enseñado a usarlas.
Y es que no es casualidad que hayan surgido en estos últimos años, en los que Twitter e Instagram parecen haberse convertido en el guion de las vidas de mucha gente, nuevos términos tales como haters o trolls.
 ¿En qué mundo loco vivimos que ya tenemos hasta una palabra para definir a aquellos que se dedican simplemente a eso, a odiar en la Red?
Cuando veo los comentarios que dejan algunas de estas personas no puedo evitar preguntarme:
 ¿Por qué tanto enfado? ¿A qué responde tanto odio? Entiendo que tengamos distintas opiniones respecto a algo, y si se argumenta de una manera crítica pero con educación no hay ningún problema. Ahora bien, la falta de respeto y el desprecio gratuito ¿a santo de qué?
Y lo que intuyo al seguir tirando del hilo es que, en muchos casos, no se trata tanto del hecho en sí sino de la persona que lo ha llevado a cabo.
 Y si dicha persona es "famosa" todavía mejor, pues la impunidad para cometer la agresión se eleva automáticamente al cuadrado (porque, oye, "ese también es el precio de la fama, ¿no?").
Me entristece comprobar la cantidad de gente que hay en nuestro país deseando que haya una nueva polémica para poder desprenderse de parte de su amargura lanzándosela a otro, hasta hundirlo.
 Da igual cuál sea el tema, da lo mismo si me importa mucho, poco o nada, porque el objetivo no es luchar por algo sino destruir.
 Odiar. Machacar al de al lado, para sentirme yo un poco mejor
. O incluso criticar por criticar... porque, total, ¡es gratis!

Ya, pero el hecho de que el golpe no se dé con un bate no quiere decir que no duela. Existen muchos tipos de violencia y la que se sufre por las redes sociales es una de ellas.
 
 
Y yo me pregunto: ¿quién hace las normas? ¿Por qué se puede censurar una fotografía de un pezón (femenino, que no masculino) en Instagram y sin embargo se permiten este tipo de agresiones virtuales?
 El odio es una emoción humana tremendamente poderosa pero, precisamente por eso, hemos de ser responsables y escoger muy bien cuándo y para qué usarla.
 Creo que debemos aprender algo de todo esto, reflexionar y no menospreciar la influencia, el poder y el peligro de las redes sociales; porque si continúa creciendo esta falta de ética cibernética dichas plataformas terminarán convirtiéndose en la nueva ciudad sin ley.
Clara Lago es actriz, candidata al Goya por El viaje de Carol, protagonista de Ocho apellidos vascos y pareja sentimental de Dani Rovira.

 

20 feb 2016

Desde el trópico de Cáncer: [Cuentos para la edad adulta] Hoy, "La noche boca arriba", de Julio Cortázar

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Diana con un jersey que yo tuve, me lo puse mucho antes que ella.

Foto: © Gtresonline

"Una imagen informal de los entonces novios"

Según pone en el pie de foto oficial, esta fotografía es una imagen informal de los entonces novios Carlos de Inglaterra y Diana Spencer. Diana parece casi un adolescente. Esos hombros subidos, esas manos en los bolsillos, ese jersey del altiplano al más puro estilo Evo Morales...