Grete Stern fue pionera en denunciar la opresión femenina en sus mordaces fotomontajes, que ahora se exhiben en Madrid. Su obra saltó de la revista del corazón ‘Idilio’ a los museos
Por la misma época en que se popularizaba el Consultorio de Elena Francis en la radio española, la revista argentina del corazón Idilio iniciaba su andadura con dos grandes novedades entre las publicaciones femeninas de entonces, las fotonovelas y una sección titulada El psicoanálisis te ayudará. Corría el año 1948. El sociólogo de origen italiano, huido del fascismo, Gino Germani dirigía el consultorio psicológico que se encargaba de responder a las pesadumbres, inquietudes y dudas expresadas por las lectoras.
Y la judía alemana, que había estudiado en la vanguardista escuela de la Bauhaus, y se había instalado en Buenos Aires tras el ascenso de los nazis, Grete Stern, ilustraba con sus fotomontajes los problemas y conflictos planteados a través de la interpretación de los sueños.
En esta serie que adoptaba las técnicas aprendidas de los padres del fotomontaje como Heartfield, Hausmann o Grosz, y bebía de las influencias de surrealismo y del dadaísmo, Stern criticaba el sometimiento y la opresión de la mujer y el papel que a menudo ella misma se asignaba en la sociedad, mucho antes de que estallaran los movimientos de los derechos sociales en la década de los sesenta y de la articulación artística de la reivindicación feminista.
Y lo hacía con humor, con ironía y mordacidad, en un trabajo en el que confluían sus intereses creativos y su formación, sin dejar de ser un encargo.
Serie extraordinaria
El resultado fue una serie extraordinaria de fotomontajes, Sueños, cuyo valor artístico va más allá de las limitaciones de su propósito original, como se puede comprobar en la exposición abierta hasta el 31 de enero en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Compuesta por 46 fotografías originales positivadas por el que fue el marido de la artista alemana, el gran fotógrafo argentino Horacio Coppola, al que conoció en la Bauhaus, la muestra Grete Stern. Sueños pone de relieve el vigor vanguardista de la creadora, nacida en 1904 en la población alemana de Wuppertal-Elberfeld y fallecida en Buenos Aires en 1999, según destaca el escritor y director del Círculo, Juan Barja.A pesar de ser publicados semanalmente durante casi tres años, “los fotomontajes fueron completamente ignorados en su época.
Por un lado, la mala reputación de revistas como Idilio contribuyó a ello.
Por otro, la crítica fotográfica en los medios masivos no existía, y el fotomontaje carecía de prestigio artístico como para que los críticos de artes plásticas se ocuparan de los Sueños”, señala en un texto recogido en el catálogo de Luis Priamo, estudioso de la fotografía.
Sin embargo, la obra de Stern se ha ido revalorizando con el paso del tiempo, así como la fotografía de Coppola (Buenos Aires, 1906-2012).
Prueba de ello es la reciente exposición del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA), De la Bauhaus a Buenos Aires, que se clausuró la pasada semana y que, en realidad, se trataba de dos muestras monográficas paralelas de los dos artistas que se conocieron en 1932, en Berlín.
De allí se marcharon a Londres y luego se establecieron en la capital argentina, donde compartieron estudio y exposición en 1935 en la revista y editorial Sur, fundada por la intelectual y mecenas Victoria Ocampo. El matrimonio se disolvió unos años después.
Modernidad alternativa
“Ha llegado un momento de dar reconocimiento a una modernidad alternativa, una modernidad que tradicionalmente se ha descuidado y que apunta a Latinoamérica”, apuntó la comisaria de la exposición en el MoMA, durante la presentación de la misma, Sarah Meister.El momento del reconocimiento de Coppola y Stern se remonta, no obstante, a algunas décadas atrás gracias a la persistencia de algunos estudiosos y algunas instituciones.
En este sentido, en la presentación de la exposición en el Círculo de Bellas Artes, en la que colabora, el galerista Jorge Mara recordó la labor emprendida por el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) ya a mediados de los años noventa, cuando organizó exposiciones sobre Coppola y Stern, bajo la dirección de Juan Manuel Bonet.
Y precisamente, el IVAM revisará la figura y la obra de la fotógrafa en otra exposición con fondos del museo el próximo mes de diciembre. Casos de Estudio. Grete Stern volverá a poner de manifiesto la vigencia y actualidad de una singular creadora vanguardista y protofeminista.
Fotomontaje sin título de 'Sueños de c