Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

26 sept 2015

La temporada de ópera 2015/2016 se inauguró con "Roberto Devereux", de Gaetano Donizetti


Sus Majestades los Reyes presiden la inauguración de la Temporada de Ópera en el Teatro Real 22 de septiembre de 2015 
Sus Majestades los Reyes presidieron el martes, 22 de septiembre, la inauguración de la temporada de ópera en el Teatro Real, con la representación de la ópera "Roberto Devereux", de Gaetano Donizetti.

Don Felipe y Doña Letizia estuvieron acompañados por el presidente del Tribunal Constitucional, Francisco Pérez de los Cobos; el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo; el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso; la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena; el presidente del Patronato de la Fundación del Teatro Real, Gregorio Marañón y por el director general del Teatro Real, Ignacio García-Belenguer.Seguidamente, Sus Majestades los Reyes recibieron el saludo de los miembros del Patronato del Teatro Real para dirigirse a continuación al Palco Real donde, tras las interpretación del Himno Nacional, asistieron al inicio de la representación.

Al término de la ópera, Don Felipe y Doña Letizia tuvieron la oportunidad de saludar al director artístico del Teatro Real, Joan Matabosch; al director musical de "Roberto Devereux", Bruno Campanella; que estará al frente del Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real y que se alternará con Andriy Yurkevych en las 11 funciones que se ofrecerán hasta el 8 de octubre; al director del Coro, Andrés Máspero; al director de escena, Alessandro Talevi, junto con el resto del equipo artístico de la producción, así como a los cantantes Mariella Devia, Marco Caria, Silvia Tro Santafe, Gregory Kunde, Juan Antonio Sanabria y Andrea Mastroni. 
 

'La Preysler' y Vargas Llosa eclipsan a los reyes en la apertura de la temporada de ópera

Los fotógrafos del cuore hicieron su agosto este martes por la noche en el Teatro Real de Madrid gracias a la 'reina de corazones', la filipina, que coincidió en la misma sala con su actual pareja, su exmarido Carlos Falcó y su hija Tamara.
Y su hija Ana no fué? es la única huerfana de la familia. Su Mami le han dejado con expresión de asombro de tanta cirujia y unos labios muy feos terminará como la Duquesa de Alba.... 

Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler, este martes en el teatro - Foto EFE
No cabía ni un alma el pasado martes por la noche en el Teatro Real de Madrid.
 Nunca una ópera clásica en italiano suscitaría tanto interés si no fuera porque este martes por la noche, en el Teatro Real de Madrid, era uno de esos días para ver y dejarse ver, donde la alta sociedad acudía para aplaudirse entre ellos, para vitorear el himno de España y para 'disfrutar' de una obra operística escrita en el XIX que jalearon como pocos, aunque entre los corrillos pocos reconocieron entender.
A pesar de la presencia de Felipe VI y de Letizia Ortiz en el palco de honor, todo el mundo estaba a la espera de la pareja más de moda en la capital.
Efectivamente, Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler lograron ser los más fotografiados al pasear su amor por el centro del graderío.
 Le cuentan a este Buscón que la reina filipina consiguió eclipsar totalmente a la reina asturiana. Como dato curioso, Preysler coincidió en la misma sala con su actual pareja y con una de sus antiguas relaciones, Carlos Falcó, quien acudió al evento con la hija de ambos Tamara.
En cualquier caso, un cazador de autógrafos tenía trabajo más que sobrado con la cantidad de prohombres y 'promujeres'
. Por el Partido Popular, acudieron Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz-Gallardón o el ministro de Sanidad Alfonso Alonso.
 En el PSOE no se quedaron cortos con la presencia de Elena Salgado o Carmen Calvo. El mundo del periodismo estuvo representado por unos cuantos plumillas sobre los que sobresalía Iñaki Gabilondo, quien saludó con dos fuertes besos en la mejilla a Aguirre, así como Pedro J. Ramírez y su esposa Agatha Ruiz de la Prada.
 Del mundo de la farándula llamó la atención la presencia de Antonio Resines.
 Por otra parte, llamativa y comentada fue la asistencia de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena.
 Aunque en un principio hubo dudas sobre si Carmena asistiría al acto, ya que devolvió las entradas del Real que le correspondían como alcaldesa de Madrid (con la petición de que se revendieran), finalmente sí que asistió ya que para la inauguración de la temporada tenía la 'obligación' institucional de hacerlo.
Le cuentan a este Buscón que fue muy llamativo ver llegar a Carmena en metro y andando al Palacio Real, mientras que el resto de ricos del PP y PSOE optaban por el coche oficial o extraoficial. Carmena no parece sentirse demasiado a gusto en estos 'saraos' con cierto tufo clasista
. Cuando al acabar la función, los asistentes abrieron un pasillo a la salida del teatro para despedir con aplausos y vivas a los reyes, el silencio absoluto se hizo cuando después de ellos salió la que fue candidata apoyada por Podemos.
 Parecería que entre los asistentes el pasado martes a la ópera Roberto Devereux, los votantes de Ahora Madrid podían contarse con los dedos de una mano.



 

Don't Stop Me Now' de Queen, elegida la canción más feliz de la historia

queen
Rock and roll, nena.
La ciencia ha dado con la canción más feliz jamás compuesta. Se trata de un pegadizo himno de los setenta. ¿Se te ocurre cuál puede ser?
Si estabas pensando en el mítico Don’t Stop Me Now de Queen, has acertado.
Está bien, puede que no sea la única canción más feliz jamás compuesta, pero, según este estudio, se trata de un ejemplo perfecto de la fórmula de la felicidad en el ámbito de la música: tempo rápido (aproximadamente 150 pulsaciones por minuto) + letra alegre + tonalidad mayor.
En una encuesta que realizó el fabricante británico Alba, se pidió a 2000 adultos de Reino Unido que escogieran las canciones que les hacían sentirse mejor, y la que más veces se mencionó fue este himno tan optimista de Queen.
Cuando el neurocientífico cognitivo Jacob Jolij —que se encargó de completar el análisis de los datos para Alba— examinó las características de este tema de 1978 e identificó los elementos de los que hablábamos antes como la ecuación para darle a una canción la cualidad de provocar alegría.
"Mi análisis confirmó lo que la literatura ya nos había enseñado: las canciones compuestas en tonalidad mayor y con un tempo rápido son más eficaces a la hora de producir emociones positivas", declaró el doctor Jolij —que además imparte Psicología en la Universidad de Groningen— a la edición estadounidense de The Huffington Post vía correo electrónico. "Prácticamente todas las canciones felices están compuestas en tonalidad mayor (salvo contadas excepciones), y todas ellas tienen un ritmo superior en 10 pulsaciones por minuto al de una canción estándar de pop".
Entre las que fueron mencionadas en la encuesta se encuentran el Dancing Queen de ABBA, el Good Vibrations de The Beach Boys y el Uptown Girl de Billy Joel.
Aunque, según el doctor Jolij, lo que determina si una canción nos hace sentir bien o no es, más que nada, nuestra propia asociación de esa canción con cosas positivas.
"No se pueda señalar a una canción como la canción feliz definitiva, pero lo que sí es posible es identificar las características específicas que hacen que un tema le levante el ánimo a la gente", declaró Jolij. "Cuanta más información haya disponible, más podremos aprender sobre la manera en que la música afecta a nuestro estado de ánimo".
!!!Hombre y si quieren buen rollito se me ha ocurrido que podrían poner ""Els segadors"" jajajajajaj eso de cortar la cabeza a castellanos, a Canarias no que estamos muy abajo de Catalunya y els catalans se creen que somos islas del Caribe por mucho Atlantico que se vea....

Moda a ritmo de rock and roll.............................................................. Brenda Otero.

El diseñador Tommy Hilfiger ejerce de comisario en una exposición de Sotheby’s sobre la influencia de la música en las tendencias.

 

David Bowie durante una presentación de su álbum Ziggy Stardust. / Terry O’Neill (© Iconic Images)

Hubo una época en la que los músicos vestían sin la ayuda de estilistas ni diseñadores
. En la que Debbie Harry cosía sus propios vestidos con tela de tapicería de coche, The Ramones llevaban los vaqueros rotos porque no tenían ni para fundas de guitarra y John Lennon posaba con una camiseta de recuerdo de Nueva York.
 La muestra Rock Style, organizada por la sede de la casa de subastas Sotheby’s en Londres, recaptura esos años en los que los artistas creaban su propio estilo sin recurrir a las firmas.
Las instantáneas que recopila la exposición, abierta al público hasta el 30 de octubre, se encuentran a la venta y han sido seleccionadas por el diseñador de moda Tommy Hilfiger en colaboración con su amigo el galerista Jeffrey Deitch
. Forman parte de una selección procedente de un libro del mismo nombre que publicó el diseñador para diseccionar la influencia de la música en el mundo de la moda.
 En su caso se trata más bien de un homenaje personal a las figuras que han marcado su vida y su trabajo:
"Vi a los Beatles en la televisión y pensé que eran lo más
. Entonces supe que quería ser rockero", admite Hilfiger. "No sabía tocar la guitarra, así que decidí tener el aspecto de una estrella de rock".
Elvis Presley. / Terry O’Neill (© Iconic Images)
Gran parte de las fotografías de la muestra llevan la firma de Bob Gruen, el autor de uno de los retratos más icónicos de John Lennon.
 El neoyorquino empezó su carrera con Ike y Tina Turner y ha tenido acceso de primera mano a los Rolling Stones, Elton John, los Sex Pistol, los Ramones o Blondie. Gruen y Hilfiger se conocen desde su juventud, cuando el diseñador se dedicaba a vender el merchandising del grupo que habían formado sus hermanos.
 "¡Nadie se imaginaba que el tipo de las camisetas iba a tener tanto éxito", recuerda entre risas Gruen.
El fotógrafo es una mina de anécdotas, que desgrana a medida que recorre la exposición.
“Nadie tenía un look tan extremo como el de Elton John", comenta frente a uno de sus retratos.
"En un principio me imaginé que iba a ser difícil hacer algo bueno con un pianista. No obstante, él era diferente y se las arreglaba para saltar mientras tocaba".
Debbie Harry, en 1976 la discoteca Max's Kansas City en Nueva York. / © Bob Gruen
Gruen fue de gira con los Sex Pistols, con tan mala suerte que el grupo se separó justo al terminar el tour y nadie quiso comprarle el material que había acumulado:
 "Años después, en 1986, se estrenó la película Sid & Nancy.
 El actor Gary Oldman, dio más personalidad a Sid Vicious de la que en realidad tenía, los Sex Pistols volvieron a resultar interesantes y mis fotos se vendieron".
 El neoyorquino contaba con una serie de ases en la manga para congraciarse con los artistas más ariscos. "Se negociaba después de un porro y una raya de coca.
 Con los Sex Pistols había que beber constantemente para encajar
. Como norma general había que vestirse de la misma manera que ellos sin llegar eclipsarlos. En ocasiones me era difícil porque yo tenía más estilo".
Con los New York Dolls reconoce que le costó más mimetizarse.
 “Llevaba purpurina ¡pero nunca pintalabios!", puntualiza.
 Después de toda una vida haciendo callo entre bambalinas
, Gruen se lamenta de que fotografiar a estrellas ya no es lo que era. "Ahora es imposible hacerlo sin catering, asistentes y revuelo", reflexiona.
 Y en su caso, el reconocimiento le ha complicado el negocio.
 "Es muy complicado trabajar con la novia del batería sacándome fotos.
 Tampoco ayuda que el músico se ponga delante de mi objetivo preocupado porque cualquiera de sus gestos puede terminar convirtiéndose en una imagen icónica".