Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

23 abr 2013

Ambientazo en La Rambla

La periodista Rosa Mora recorre Barcelona en esta jornada de Sant Jordi.

 

Miles de libros para todos aquellos que se acercan a las Ramblas. / Massimiliano Minocri
14.00. Hora de la comida. Hora de descanso. Volvemos a las 16.00 horas.

13.45. La Fiesta de Sant Jordi empieza antes. La librería Negra y Criminal lo celebró el sábado con más de 30 autores y muchos lectores que consumieron 22 botellas de vino, seis kilos de mejillones, dos litros de vermú, dos kilos de patatas fritas y medio litro de Campari. La revista literaria Qué leer volvió a hacer su fiesta _el año pasado no pudo hacerse por el ERE_ en la que se entregan los premios que los lectores dan a los autores. Los ganadores este año son Misión olvido, de María Dueñas, y El invierno del mundo, de Ken Follet. Asistieron más de 400 personas, entre autores, editores y periodistas. Antes se celebró la del programa de TVE Continuará. Hoy está prevista la fiesta del grupo Contexto, que agrupa pequeñas editoriales, en el café Salambó, y la de Planeta en Luz de Gas. A las dos de la tarde, las diversas editoriales ofrecen almuerzos/descanso a los autores que firman.

13.30. Ya se encuentran rosas a dos euros.

13.27. Los de Polònia, que firman libros de Polònia Independent, repiten carpa propia en Paseo de Gracia con Gran Via. Algunos otros autores como Moccia o Jorge Javier Vázquez no hacen el recorrido por las diferentes casetas.

13.24. Hay tantas aglomeraciones que en Portal de l'Àngel ha tenido que intervenir la Guardia Urbana para poner orden entre dos mujeres que se peleaban por un puesto en la cola. A las 12.30 Albert Espinosa ha colapsado la calle y los empleados de la Casa del Llibre han tenido que evacuar a los peatones por el interior de la librería.

13.21. Albert Espinosa ha vuelto a recordar hoy que un 23 de abril fue cuando le amputaron la pierna y para él esta jornada fue el día que volvió a nacer.

13.12. Muchos libreros y editores creen que algunos de los libros más vendidos, mediáticos aparte, son  Victus, en catalán y en castellano, de Albert Sánchez Piñol, y Brújulas que buscan sonrisas perdidas, también en los dos idiomas, de Albert Espinosa.

12.54. En Laie, Eduardo Mendoza, que no tiene libro nuevo, firma sin parar. Cristina Fernández Cubas, que ha sacado libro nuevo, está firmando muchos ejemplares de una obra suya de 1980 que se llama Mi hermana Elba, porque ha entrado como lectura obligatorio en los institutos. Y congrega a los lectores más jóvenes del Sant Jordi. Con ellos están Ignacio Vidal-Folch, Enrique Vila-Matas y Jordi Soler.

12.40. Los libreros creen que con el buen día que hace las ventas se mantendrán, sobre todo porque el precio de los libros se ha mantenido. Otros menos optimistas piensan que hay más gente paseando que comprando. Pero todos ellos están un poco preocupados por el partido de semifinales de la Champions entre el Bayern y el Barça. Las firmas en las casetas acabarána las ocho de la tarde y están abiertas pasadas las nueve. El partido empieza a las 20.45.

12.20. Rosa sube al metro. Y mientras tanto... algunos datos: los floristas catalanes esperan vender entre cinco y seis millones de rosas durante la jornada, una cifra similar a la del año pasado pero que supondrá un menor margen de beneficios, pues ellos mismos asumirán la subida del IVA del 8% al 21%. Además, la campaña Rosas contra el olvido, organizada por la ONG Amics de la Gent Gran (Amigos de la Gente Mayor), regalará hoy, día de Sant Jordi, 2.000 rosas y libros a personas mayores que viven solas
12.15. En La Rambla no hay famosos ni escritores firmando, sino librerías y casetas populares, además de iniciativas como los que recogen firmas por una renta mínima.
12.10. Encontré a Jorge Javier Vázquez. Firmando como un descosido. Explica su editora que ha vendido 240.000 ejemplares de su novela La vida iba en serio. Junto a él firman Federico Moccia. Entre los dos monstruos, se defiende Dolores Redondo.

11.36. En plaza de Catalunya no se puede dar un paso. Entre las colas del bus turístico y la de la parada del Corte Inglés, es un infierno. Firman ejemplares María Teresa Campos, Àngel Llàtzer y Mario Vaquerizo. Sobre todo mujeres de mediana edad y más jóvenes estaban desesperadas no ya por conseguir una firma sino simplemente por verlos. Los guardas de seguridad que controlan las colas no podían con ellas y algunas enfadadas han dicho: "Ni que hagamos colas todo el día no podremos verlos".

11.19. Sarah Lark, con El grito de la tierra, y Matilde Asensi, con La conjura de cortes, tienen largas colas en su parada. La gente les esperaba. En la misma caseta del FNAC, Vicky Martín Berrocal y Sor Lucía Caram, con Mi claustro es el mundo, apenas firman libros. Eso sí, están muy solicitadas por la prensa.

11.00. Abandonamos el Regina. Pero antes hablamos con algunos de los autores, entre codazos y cámaras. Ferran Torrent dice: "Lo que pasa es que hay muchos escritores que matarían por vender un libro". Alícia Giménez Bartlett se lamenta: "No tocamos ni a medio lector por escritor". Para Jordi Soler es la primera vez en este desayuno: "Existe una disfunción estética. Para una bar de copas a las dos de la madrugada pero son las 10 de la mañana". Jorge Javier no ha sido visto. Ahora me vuelvo a la calle.

10.44. Sor Lucía Caram, una monja dominica del convento de Santa Clara de Manresa, centra todas las miradas en el Regina. Además de realizar una encendida defensa del Papa Francisco. "Se abre un futuro de esperanza", ha dicho entre cámaras.

10.38. En el Regina: del entusiasmo a la desesperación. Es imposible caminar ni comer
. Dolores Redondo viene por primera vez: "Estoy como loca. Es sorprendente. No hay nada en el mundo comparado con esto. También estoy firmando muchos libros en catalán".
9.58. Ya en el hotel Regina. Se esperan más de 150 autores, muchos mediáticos. Hay gente que ya se queja de que esto es cada vez más un circo. Ya han llegado Andreu Martín, Andrew Morton... que compartirán sala con Maria Lapiedra y Jorge Javier Vázquez. Hay café para todos, bollería y bocadillos. Acaba de llegar Dolores Redondo, la de El Guardián Invisible. Y te dejo porque no oigo nada.
9.31. En la plaza de Catalunya no cabe ni una rosa más. Está a tope de floristas, algunas aficionadas. Dicen los rumores que les han prohibido estar en La Rambla por temas de competencia desleal a los floristas tradicionales. En el FNAC Triangle están un poco impresionados: "Hay mucha más gente que el año pasado". Eso no significa de momento que compren. Allí firmarán Sarah  Lark, que hizo la trilogía de Nueva Zelanda, y el libanés Amin Maalouf, entre otros.
9.10. Sensación de fiesta. Un poco más de alegría hoy en las calles de Barcelona. Las paradas de rosas hace ya mucho que están en marcha.
 Se venden las flores a unos tres euros.
 En el centro ya se pueden encontrar algunas más caras, como las de colores. El gremio espera vender unos seis millones de rosas. Además de rosas, se pueden ver muchas senyeres por el centro de la ciudad. En todas las panaderías se vende el pan de Sant Jordi, hecho con sobrasada. En la plaza de Catalunya, Happy Books ya tiene su parada en la que anuncia con grandes carteles descuentos del 10%
. La gente mira pero de momento no compra. Hay chicos jóvenes que venden rosas. "Estoy en el paro y con esto me sacaré algunos euros", ha contado uno de ellos.
Que recuerdos me trae este Dia todo el mundo por la Rambla un libro y una rosa para todos.....Es el Lugar dónde realmente se respira un aire diferente, lo siento por Madrid que me desilusiona siempre y por nuestras islas......

Sin excusa para localizar a tu autor favorito

Lista con más de 200 autores, los libros, los lugares y las horas donde estarán firmando durante el 23 de abril.

 

VIDEO: ATLAS
La jornada de Sant Jordi permite a los lectores, que durante el año se tienen que conformar con leer sus libros, la oportunidad de conocer y estar junto a sus escritores favoritos y conseguir durante unos breves momentos que estampe su firma y una dedicatoria en uno de sus últimos libros. Durante todo el día, desde las 11 hasta las 21 horas, más de 200 escritores recorrerán los tenderetes instalados por las librerías en muchas de las principales calles de las ciudades catalanes. Como la jornada es larga y muchos los autores, aquí tienes una exhaustiva lista con los escritores, el título de sus nuevas obras, los lugares y las horas en las que firmarán. Ya no hay excusa para localizar a tu autor favorito.

Listado autores

Storm Thorgerson, diseñador, el rostro de Pink Floyd

Algunas de sus portadas forman parte sustancial de la experiencia estética del rock de los setenta.

 

Storm Thorgerson, en 2008, con una de sus portadas. / YUI MOK (AP)
La explosión creativa del rock que siguió a la revolución de 1967-1968 tuvo un correlato en una extraordinaria expansión visual, impulsada por los diseñadores que elaboraban sus portadas. La implantación del album oriented rock, el rock que se expresaba a través de discos largos, hubiera sido inconcebible sin la labor de estos visionarios, no siempre en estrecho contacto con los músicos.
Entre ellos destacaba Storm Elvin Thorgerson, que falleció el jueves 18 de abril, a los 69 años, victima del cáncer. Como parte de Hipgnosis, Thorgerson concibió algunas de las más memorables portadas del rock de los setenta, aunque en su caso convendría hablar de “envoltorios”; su implicación era total e incluía bolsas interiores, insertos y, desde luego, las galletas de los vinilos.
Thorgerson creció en Cambridge con varios de los futuros miembros de Pink Floyd y fueron ellos los que le ofrecieron debutar con A saucerful of secrets (1968). Su socio era Aubrey Powell, que se centraba más en las relaciones públicas y la parte económica.
 En Denmark Street, uno de los centros de la industria musical londinense, alquilaron un par de pisos donde se instaló Hipgnosis.
Intuyeron que las fundas de los discos eran parte de la experiencia estética exigida por los oyentes y que podían prescindir del típico retrato de la banda.
 Dado que buena parte de la música que les llegaba tendía hacia lo enigmático, tenían el campo libre para las imágenes misteriosas, las yuxtaposiciones inesperadas, las fotos manipuladas
. No había problemas presupuestarios: para In through the out door, de Led Zeppelin, se reconstruyó en Londres un auténtico bar de Nueva Orleans.
Aparte de los ya citados, se convirtieron en los portadistas preferidos de The Pretty Things, Wishbone Ash, Peter Gabriel, Roy Harper, Bad Company, 10cc, la ELO, UFO o Scorpions. ¿El método?
Escuchaban la grabación, intentaban extraer confesiones a músicos renuentes, atendían a las sugerencias de las empresas que pagaban...pero la inspiración podía venir a altas horas de la noche, entre amigos y con la ayuda de sustancias.
Sobrevivieron a delirios, como el cerdo volador de Animals (Pink Floyd), una idea de Roger Waters, que literalmente se les escapó de las manos y alteró el tráfico aéreo sobre Londres.
 Pero también cayeron en tópicos, como la mera traducción de títulos o las obviedades sexuales para grupos de rock duro. En 1983, el equipo se rompió.
Mientras Aubrey Powell trabajaba en publicidad y documentales, Thorgerson hizo videos musicales y continuó realizando portadas.
 Las dimensiones de sus encargos se habían encogido, con la entrada del CD, pero aún pudo permitirse caprichos como A momentary lapse of reason (1987), para Pink Floyd, con centenares de camas de hospital alineadas en una playa
. Ocurrencias que palidecían ante añejos golpes de genialidad, como las imperturbables vacas de Atom heart mother (1970).
Abundantes libros y exposiciones mantuvieron vivo el legado de Hipgnosis, ya contextualizados como herederos de Magritte o de Dalí.
 Aunque Thorgerson pasó sus últimos diez años entre médicos, todavía pudo atender encargos de jóvenes admiradores, como Muse o The Mars Volta.

 http://youtu.be/ntm1YfehK7U

Da de Sant Jordi en Cataluña. Libros recomendados por "Los Cervantes"


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Decenas de lectores en la Rambla de Barcelona en el día de Sant Jordi de 2011. / JOAN SÁNCHEZ
para quien, a lo largo de su vida, habrá escrito y leído cientos (¿miles?).
 Pero la pregunta no deja espacio para las excepciones, ni siquiera para los premios Cervantes: ¿qué obra regalarías en ocasión del Día del Libro?
 Algunos intentan escaquearse y proponen una lista más larga
. Dos, tres o hasta siete opciones. El conde de Montecristo, La isla del tesoro, el Calila e Dimna en su edición original de 1252, Pedro Páramo y Reloj de príncipes, de Fray Antonio de Guerra, salen a lo largo de las conversaciones, pero quedan descartados ante la obligación de quedarse con un único regalo.
Todos, eso sí, avanzan que es “muy complicado” escoger solo una opción.
Y José Emilio Pacheco subraya que, por encima de todo, es importante que se lea “por placer, no por obligación”.
 Y sin prejuicios, como le explicó una vez García Márquez. “Los escritores suelen despreciar los bestsellers, pero Gabo me dijo que al leerlos me fijara en cómo están contados más que en el estilo. Y, por ejemplo, con la trilogía de Stieg Larsson me ocurrió que no podía dejar de leerla”, asegura el mexicano, que recibió el Cervantes en 2009.
Alguna novedad, muchos clásicos, sobre todo novela pero también poesía
. Es lo que se obtiene de la lista de respuestas ofrecidas por los ganadores del premio más prestigioso de las letras en lengua española, junto con una receta perfecta para coger un sillón, varias horas de tiempo y pasarse el Día del Libro en los Estados Unidos de principios de siglo con Jay Gatsby o en la Francia ocupada por los prusianos de 1870.
Jorge Edwards (Santiago de Chile, 1931), Cervantes de 1999. Escojo Los ensayos de Michel de Montaigne, en una edición reciente publicada por la editorial Acantilado.
 Se trata de una obra muy libre y moderna en el contexto del siglo XVI francés. Lo único parecido de aquella época es El Quijote. La escritura de Montaigne y Cervantes es una mezcla muy sabia y divertida de narración y reflexión.
José Jiménez Lozano (Langa, 1930), Cervantes de 2002. La verdad es que no suelo regalar libros. Nunca sabes si a la otra persona le va a gustar como a ti, ni tampoco quiero ponerle en un compromiso. Prefiero, a lo mejor, recomendar a alguien que se compre un libro
. De todos modos, elijo lo último que he leído, Antimemorias de André Malraux, una obra muy interesante.
Rafael Sánchez Ferlosio (Roma, 1927), Cervantes de 2004. Un entremés de Cervantes titulado El viejo celoso, por su esplendor. En la obra aparece una de las frases más bonitas del castellano. Una muchacha burla a su marido, pero con la verdad. Finge que está con un amante; él no se lo cree, aunque en la habitación hay un muchacho que ella ha metido con la ayuda de una vecina cómplice.
 Y entonces la muchacha le dice: “Lavar quiero a un galán las pocas barbas que tiene con una bacía llena de agua de ángeles porque su cara es como la de un ángel pintado”.
Sergio Pitol (Puebla, México, 1933), Cervantes de 2005. Misericordia, de Benito Pérez Galdós
. Aún ahora Benito Pérez Galdós me parece uno de los novelistas más vivos y complejos de la lengua castellana. Mi generación aprendió a leerlo de la mano de comentaristas excepcionales: Luis Cernuda, Buñuel, Bergamín, Alfonso Rejes, Max Aub, María Zambrano y Octavio Paz, quien dedicó su discurso de aceptación al Premio Cervantes al novelista madrileño, supieron insuflar en nosotros la desmedida vitalidad de su obra, que ha alcanzado incluso a novelistas tan disímiles como Antonio Tabucchi o César Aira.
Durante décadas, cierta crítica malintencionada o de plano cegatona, quiso ver al Maestro como al exponente de un realismo áspero, monolítico e incluso costumbrista. Nada más lejano de la verdad. Pocas novelas como las suyas han sido susceptibles a esa grieta de lo real de la que emanan los personajes y situaciones más disparatadas, excéntricas y rabiosamente humorísticas; el punto en que todo se deshace y vuelve caricatura. Misericordia es, entre muchas otras cosas, la suma de todo esto. Una novela fundamental, humana y profundamente divertida.
Antonio Gamoneda (Oviedo, 1931), Cervantes de 2006. Si se puede dar una analogía lectora entre yo que regalo el libro y quién lo recibe, porque la sensibilidad más o menos inteligente que tengo la supongo en el lector, escojo mi vicio, La celestina. Es mi predilección, casi una obligación, ya que lo leo todos los años.
Juan Gelman (Buenos Aires, 1930), Cervantes de 2007. Los poemas humanos del autor peruano César Vallejo. El libro es una muestra de cómo, sin perder la humanidad ni dejar de producir emoción en el lector, se propuso romper los límites de la lengua, como ya hizo Cervantes que los ensanchó y como Lope de Vega. Los poemas de Vallejo dan una visión de todas las posibilidades que ofrece este maravilloso idioma castellano.
Juan Marsé (Barcelona, 1933), Cervantes de 2008. El gran Gatsby. Jay Gatsby encarna el sueño americano del siglo XX y entronca con la gran novela del siglo XIX de los Balzac, Stendhal y Tolstói.
José Emilio Pacheco (Ciudad de México, 1939), Cervantes de 2009. Lo más importante es que nunca hay que ver la lectura como una obligación, sino como un placer. Si un libro no te gusta, déjalo, y a lo mejor retómalo en 10 años. Hay dos ejemplos brillantes de novela corta: los relatos Bola de sebo de Guy de Maupassant y Corazón sencillo de Gustave Flaubert. Tienen una forma excelente, son completas, y además son dos grandes novelas con protagonistas femeninas, que defienden la figura de la mujer en un siglo, el XIX, que la ataca constantemente.
Ana María Matute (Barcelona, 1925), Cervantes de 2010. Los poemas de San Juan de la Cruz. Me parecen impresionantes, me estremecen. Es una obra extraordinaria, de una espiritualidad honda y auténtica.
José Manuel Caballero Bonald (Jerez de la Frontera, 1926), Cervantes de 2012. Intemperie, de Jesús Carrasco. Es una obra sorprendente, con una prosa admirable, sobre las aventuras de un niño que huye de su casa por la miseria material y moral que allí se vive.
Y yo que no soy Cervantes regalaria La Liebre de los Ojos de Ambar.