Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

23 mar 2013

Masako, la princesa deprimida

Consumida por los rigores milenarios de la casa imperial nipona, la esposa del príncipe heredero de Japón no levanta cabeza

Madre de una niña, presionada para alumbrar un hijo varón, ve ahora cómo su sobrino empieza la formación para ser emperador.

Masako y Naruhito en las celebraciones del último año nuevo. / KIM KYUNG-HOON (REUTERS)
La princesa Masako no pudo concebir el hijo varón exigido por el Trono del Crisantemo y se derrumbó emocionalmente. A partir del próximo mes de abril, el príncipe Hisahito, de seis años, tercero en la línea de sucesión, único hijo varón de los príncipes Akishino y Kiko, cursará estudios en la escuela primaria de la elitista Universidad de Ochanomizu, en Tokio. Arranca así la formación del futuro emperador de Japón, que será dura, espartana, casi de clausura. Una ley sálica impide serlo a la princesa Aiko, hija del heredero, el primogénito Naruhito, y de su esposa, Masako. El príncipe Akishino es el segundo hijo de los emperadores Akihito y Michiko.
Triste y monacal, consumida por protocolos del pleistoceno, la melancólica existencia de la frustrada madre, la princesa Masako, solo puede entenderse recordando que los emperadores japoneses fueron divinos hasta el término de la II Guerra Mundial, en 1945, año en el que dos bombas atómicas rindieron el imperio y Estados Unidos humanizó por decreto a Hirohito, última deidad en el Trono del Crisantemo. Hace años, en Tokio, una nonagenaria confesaba a este periodista que descubrió la mentira siendo niña, al observar que el emperador tiraba una colilla por la ventanilla de la limusina imperial al paso por su aldea. “Los dioses no fuman, pensé”. La plebeya Masako Owada emparentó con esta dinastía arcana, la más antigua del mundo, sin pretenderlo: el príncipe heredero Naruhito la eligió a dedo, ignoró sus primeras calabazas y consiguió desposarla en 1993, después de que la joven de 30 años sucumbiera a las presiones palaciegas y a las invocaciones al patriotismo de sus padres. Al no poder concebir el hijo varón que garantizase la sucesión dinástica, entró en un abatimiento que una reciente recaída acerca a la depresión crónica.
Masako, en la celebración del 78º cumpleaños del emperador en 2011. / TORU HANAI (REUTERS)
Felipe de Borbón y Letizia Ortiz son Romeo y Julieta, y los reinos europeos, verbenas comparados con el sacerdotal romance de Naruhito y Masako y la impenetrable sobriedad del trono japonés, fundado en el siglo V antes de Cristo y administrado por una plantilla de funcionarios alérgicos a las transigencias occidentales. La princesa, de 49 años, ha reducido sus apariciones, y aunque sonreía ante las cámaras y saludó a las multitudes en las dos únicas apariciones en público de 2012, su estado emocional en privado sigue siendo un misterio y ha desatado todo tipo de especulaciones, según alertó el pasado 29 de enero el diario The Asahi Shimbun, el más prestigioso de Japón. Tras más de un decenio de tratamientos clínicos y psicológicos, conviene renunciar a los partes oficiales eufemísticos y hablar abiertamente de depresión, aconsejan las fuentes consultadas por el rotativo.
La hija de un diplomático ex viceministro, licenciada en Ciencias Económicas por Harvard, en Derecho por la Universidad de Tokio y con un posgrado de Oxford en Relaciones Internacionales, entró en el asfixiante radar de la casa imperial muy a su pesar, mientras ascendía con rapidez en el organigrama de la cancillería nipona. El perfil de la joven, moderna y emancipada hasta su transformación en vestal sintoísta, imantó a los celestinos encargados del casting de jóvenes casaderas. El príncipe la había conocido fugazmente en 1986, durante una recepción oficial a la infanta Elena, y no tardó en decidirse. Sigue enamorado, dicen. Ella rechazó sus requerimientos en varias ocasiones porque el matrimonio concertado no entraba en sus planes y menos la inmolación profesional: la renuncia al ejercicio de la diplomacia a cambio del enclaustramiento y la sistemática persecución del hijo varón.
De alguna manera, su carrera y su personalidad fueron negados"
Naruhito, príncipe heredero
Tras un breve noviazgo, siempre con carabina, y superado un curso intensivo en urbanidad palaciega, el 9 de junio de 1993 se celebraron los esponsales. Poco a poco, el ánimo de la princesa se deslizó hacia la melancolía. Sometida a tratamientos de fertilidad, abortó en 1999 y dos años después alumbró una niña. El Trono del Crisantemo es de naturaleza dinástica y la sucesión se producirá conforme a la ley sálica promulgada por la Dieta (Cámara baja del Parlamento japonés). Las líricas reflexiones de la princesa en fechas previas al nacimiento de la hija revelaban ilusión, voluntad y complicidad de pareja: “Con mi marido guiándome a lo largo de estos siete años, nuestros sentimientos son más profundos día a día”. Pero un trienio después sobrevino el primer derrumbe, y la adaptación a los preceptos se manifestó lenta, agónica. El primer aldabonazo depresivo obligó a Naruhito a viajar solo a la boda de Felipe y Letizia en 2004. El autor Ben Hills escribió que la tribulación es entendible: no puede salir de palacio sin permiso, no tiene tarjeta de crédito, no dispone de acceso ilimitado a las comunicaciones telefónicas y a los familiares directos, ni cuenta con pasaporte individual, ni rutina propia. Articulada, sobresaliente, fluida en inglés, francés, ruso, alemán y español, pudo haber sido una excelente embajadora, pero en lugar de eso se hundió en un ambiente mohoso, y extemporáneo, donde le aconsejaron caminar tres pasos por detrás de su marido, no hablar a menos que se le hable, sonreír un poco, saludar un poco…
Es imposible saber en qué condiciones se encuentra o qué tratamiento sigue", dicen los médicos
Ni el cariño del esposo, que el pasado 22 de febrero cumplió 53 años, ni la alegría de la hija, Aiko, de 12, parecen ser suficiente para levantar el ánimo de una mujer agotada, cautiva de un sistema refractario a la modernidad. Masako sigue recibiendo terapia y medicación y “está mejorando”, según aseguró Kyoji Koamchi, funcionario de palacio. Hace siete años el heredero reconocía que su compañera era víctima de los extenuantes esfuerzos de adaptación a la tradición imperial. “De alguna manera, su carrera y su personalidad fueron negadas”. Los emperadores Akihito, de 79 años, y Michiko, de 78, se dijeron “sorprendidos” por las declaraciones del hijo mayor.
Los esfuerzos contra el desaliento parecen tan baldíos como previsible fue el desmoronamiento de una mujer abocada al desengaño y el empequeñecimiento. Debió empaquetar ambiciones profesionales, arrumbar su tesis de Harvard sobre Ajustes externos en los precios de importación. El petróleo en el comercio de Japón, renunciar al deporte en equipo y sumergirse en clases de poesía, protocolo y violín. La relajación mental no es fácil cuando cerca de mil funcionarios de la casa imperial escrutan las necesidades y movimientos de los 23 miembros de la familia real.
Hisahito, a su llegada a la escuela de la Universidad de Ochanomizu. / REUTERS
Lejos de la mansedumbre que el machismo japonés reclama, la princesa se sublevó en ocasiones contra los mandamientos del comisariado monárquico: llamó “gusano” a un paparazi, corneó a funcionarios cargantes y acudió a restaurantes de su gusto para separar su vida pública de la privada.
 A veces decide en el último minuto ir o no a determinados actos, según publicó la prensa cortesana.
 La emperatriz le prometió en su día no ser una suegra entrometida, pero la nuera habría de conocer muy temprano otras intromisiones, las legalmente vigentes en el conventual palacio de Togu.
 La osadía de hablar 39 segundos más que Naruhito en la conferencia de prensa del anuncio del compromiso matrimonial le costó el primer tirón de orejas, y también fueron reprendidas sus lecturas del nobel Kenzaburo Oe, crítico con el funcionamiento de la casa imperial.
Masako sigue luchando contra la postración, pero hay pocas certezas sobre su última recaída.
“Es imposible saber en qué condiciones se encuentra y qué tipo de tratamiento sigue”, dicen los médicos citados por los principales periódicos de Japón.
 La opacidad informativa alimentó rumores y disparates de alcoba en los tabloides. La revista Shukan Shincho publicó que la casa imperial había importado abundantes dosis de extracto de ginseng, un tubérculo originario de Asia supuestamente portentoso contra la pereza sexual.
La tristeza y la ansiedad son viejas conocidas en palacio.
 Hace seis años, la emperatriz confesó haber recurrido a la fantasía infantil, haberse imaginado invisible, escapando de las rigideces monárquicas en una feliz ensoñación.
 Volaba hacia una estación abarrotada de transeúntes y caminaba entre la multitud, desapercibida, liberada, llena de vida; después se detenía en una de las librerías del barrio más bohemio de Tokio para extasiarse largamente con las novedades de su preferencia
. Víctima de crisis nerviosas y estrés crónicos, la emperatriz era también plebeya cuando se casó en 1959 con el hijo de Hirohito, antecediendo a Masako en el vía crucis hacia la perfección de modales exigida por una dinastía emparentada con Amaterasu Omikami, la diosa sol, según sus sacerdotes.
 La princesa triste batalla de nuevo contra los grilletes imperiales, reclama aire fresco, libertad y presente para que el Trono del Crisantemo deje de ser la institución herrumbrosa y vacua criticada en el Japón liberal y moderno.
De ser yo esa Princesa habría hu´do o me montaría una vida como Sissi Emperatriz, tuvo ue imaginarse cuando le pusieron 7 kimonos para la boda ue cargaría con ese peso toda su vida, 2 pasitos o 3 detrás del Emperador porque arrastra mucha tela bordada.

 

22 mar 2013

PUESTA DE SOL

PUESTA DE SOL




Siempre me ha gustado el momento en que el sol se despide del cielo y convierte su entorno en una hermosa y hechizante marea naranja de la que resulta imposible desviar la mirada. Hoy para despedir a nuestro Astro Rey como se merece, estoy sentado a la orilla del mar con los codos apoyados en las rodillas y contemplando el reflejo de esa maravilla en las aguas color turquesa que acuden solícitas a aportar su grano de arena a la serenidad del entorno... Hace algo de frío, al fin y al cabo estamos en invierno, pero en realidad poco importa. Bajo esa luz transparente y onírica la paz se apodera del espíritu y el viento me contagia de ese olor a mar que apacigua y produce bienestar. Sin saber muy bien por qué, me viene a la mente un relato de Borges en el que dice haber soñado con inmensas aulas polvorientas repletas de pizarras en las que hay escritas interminables relaciones de palabras alfabéticamente ordenadas, y donde continuación de cada una de ellas hay números expresando cantidades: Se trata de las palabras que nos estará permitido pensar o pronunciar a lo largo de nuestra vida. El número no está cerrado, se modifica por razones inexplicables y por circunstancias que nunca entenderemos.
Estremecedor, ¿verdad? Especulo con cuantas palabras pasarán por nuestro cerebro y que jamás serán pronunciadas... ¿Qué será de ellas? ¿Y cuántas pronunciaremos sin pensarlas antes? ¿Y qué pasa cuando las proferimos en soledad, se las llevará el aire o quedarán flotando a nuestro alrededor como fantasmas, esperando el momento propicio para volver a la vida? Supongo que habrá también una cifra que indicará lo que sentiremos contemplando una puesta de sol de las que nos será dado disfrutar, para sobrellevar con mejor ánimo la inmutabilidad de lo cotidiano.
 
Escrito con Sentido
 
Es el momento en ue se ven por segundos La Luna y el Sol y si se dan las condiciones puedes ver El Rayo Verde cuento de Julio Verne y una Película de Rhomer..verde del todo no lo he visto dicen ue si lo ves sabrás lo ue está pensando la gente ue te rodea.

ESCRIBIENDO UN POEMA No es fácil escribir poesía, siempre que lo hago he de hacerle ver al poema que preciso su ayuda para acabar la tarea. El caso es que su habitual carácter de ausencia irreflexiva le impide colaborar con la necesidad de expresar lo que en un determinado momento necesito. Porque resulta que los poemas suelen ser muy suyos, tienen la manía incorregible de no interesarles lo que pienso: en un principio me proponen otras cosas y a menudo simplemente se lo toman como un juego divertido viendo mis apuros frente a un texto que me supera. Pero resulta que al menos en esto soy constante y me comprometo a obligarles a escuchar cada palabra de mi alma hasta que consigo que se construyan un hogar en el espacio vacío del correspondiente folio en blanco para que, con su alma poética, vayan haciendo lentamente el dibujo preciso del pensar. Y una vez acabado su quehacer, no aguantan a mi lado sentados por mucho tiempo: tienen un corazón que les impele a la aventura de ser leídos y hacer amistades perdurables por donde quiera que pasan.

ESCRIBIENDO UN POEMA



No es fácil escribir poesía,
siempre que lo hago
he de hacerle ver al poema
que preciso su ayuda
para acabar la tarea.
El caso es que su habitual
carácter de ausencia irreflexiva
le impide colaborar
con la necesidad de expresar
lo que en un determinado
momento necesito.
Porque resulta que los poemas
suelen ser muy suyos,
tienen la manía incorregible
de no interesarles lo que pienso:
en un principio me proponen
otras cosas y a menudo
simplemente se lo toman
como un juego divertido
viendo mis apuros
frente a un texto que me supera.
Pero resulta que al menos
en esto soy constante
y me comprometo a obligarles
a escuchar cada palabra
de mi alma hasta que consigo
que se construyan un hogar
en el espacio vacío
del correspondiente folio en blanco
para que, con su alma poética,
vayan haciendo lentamente
el dibujo preciso del pensar.
Y una vez acabado su quehacer,
no aguantan a mi lado
sentados por mucho tiempo:
tienen un corazón que les impele
a la aventura de ser leídos
y hacer amistades perdurables
por donde quiera que pasan.

Sin crédito no hay paraíso


Protesta en Madrid durante la huelga general. / I. F. Calvo

El presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, dijo en un programa de Salvados, de La Sexta, que “la falta de crédito es terrible, tremenda”. Bien.
 Pero a continuación afirmó que entendía que las entidades financieras no concedieran más créditos: “Probablemente, yo tampoco daría los créditos que rechazan las entidades porque el índice de morosidad en España es muy alto; en estos momentos es del 11%”, se lamentó Rosell.
No fue una respuesta que tuviera buena acogida entre algunos de sus correligionarios, que apuntaron que su respuesta podía estar influida por la pertenencia de Rosell al Consejo de Administración de Caixabank.
El hecho cierto es que desde mediados de 2009 hasta final de 2012 el crédito bancario al sector privado ha caído en España un 9,2%, con una reducción en torno a 172.000 millones, equivalente al 17% del PIB, según el informe Las restricciones financieras de las pymes españolas: la importancia del crédito bancario, elaborado para Funcas por Joaquín Maudos, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Valencia. Las pymes —las que tienen entre 10 y 249 trabajadores— son las que más sufren esta situación
. Y en España dan empleo al 74,5% de los trabajadores, según el informe citado.
 Además de escaso, el crédito es más caro, porque el 80% de las pymes declara que han aumentado los costes de financiación.
El problema de la falta de crédito en España ha alcanzado cotas que no se veían desde 1963. La situación es algo similar a un partido de tenis entre las empresas y la banca, que empezó a complicarse en el año 2007. Lo más posible es que no haya ningún ganador.
 A corto plazo, las empresas (sobre todo si son pymes) tienen más posibilidades de perder pero, a medio plazo, la banca tampoco logrará el triunfo y las consecuencias serán malas para toda la economía. La muerte de un negocio genera paro, con posterior recesión por la caída del consumo y más morosidad bancaria. En esta situación, el sector financiero se enfrenta a una mayor necesidad de provisiones y, al mismo tiempo, a una caída de ingresos porque desciende la actividad comercial. Es un cruce fatal. Esto provoca una necesidad de cerrar oficinas y echar a parte de la plantilla…
Algo que ya está ocurriendo.
Una de las razones que ha generado este problema es que buena parte de los bancos, sobre todo los procedentes de las antiguas cajas, ya han caído víctimas de su mala gestión y de su apego al ladrillo y han tenido que ser socorridos por los contribuyentes (los mismos a los que les rechazan el crédito). Estos zombis bancarios han agudizado el problema del crédito.
 Los clientes de las antiguas cajas, sobre todo si son pymes, se han quedado de la noche a la mañana sin prestamistas
. ¿Dónde pueden ir las pequeñas empresas (muchas de ellas exportadoras y con proyectos viables) de la Comunidad Valenciana, por ejemplo, si ha desaparecido el Banco de Valencia, Bancaja y la CAM? Las entidades financieras que siguen vivas no les conocen y no tienen su historial de crédito, un aspecto clave en un momento en el que abundan las dudas sobre la posibilidad de cobrar deudas.
 Además, los bancos sanos no pueden renovar el 100% del crédito con una empresa si antes le habían concedido el 50% y lo compartían con otras entidades que ya están enterradas.
Precisamente por eso —dice el ministro de Economía, Luis de Guindos—, se ha priorizado la reestructuración bancaria. “Las entidades que se han nacionalizado o que han recibido ayudas del Estado no estaban en disposición de ofrecer crédito hasta que recuperaran su solvencia y su capital. Ahora ya lo tienen y podrán conceder crédito cuando llegue el momento”, comenta. ¿Significa eso que Bankia, CatalunyaBanc y Novagalicia van a conceder créditos después de haber recibido los 40.000 millones inyectados? En teoría sí. “Tenemos tres magníficos bancos saneados y con liquidez.
 Hay que utilizarlos de la forma más adecuada, tenemos que usar esa palanca para impulsar la concesión de crédito”, dijo hace unos días De Guindos, en el Congreso de los Diputados.
 Según el ministro, España ha emprendido una reestructuración financiera que “no tiene parangón” y “gracias a eso, hoy tenemos un sistema fuerte, saneado y solvente”.
La falta de préstamo ha alcanzado cotas que no se veían desde 1963
No obstante, el propio responsable del FROB, Antonio Carrascosa, admite que es difícil que el crédito regrese con fuerza en 2013. “La historia económica demuestra que así como el crédito continúa concediéndose cuando aparece una recesión, también es cierto que no vuelve a aparecer hasta que el PIB se recupera y sale de la recesión. Es decir, el crédito no se antepone a una recuperación de la economía, sino que va por detrás. La economía española debe arrancar con las reformas realizadas por el Gobierno”, asegura.
Para engrasar la maquinaria del crédito, el 23 de febrero pasado el Gobierno anunció una línea de crédito extraordinaria de 22.000 millones del Instituto de Crédito Oficial (ICO), “en condiciones más ventajosas que las que ofrecen los bancos”, a la que se sumarán 10.000 millones que movilizarán las entidades financieras. Sin embargo, los expertos consideran estas cantidades pequeñas para solucionar un problema tan grande como este.
Lo que hace más compleja la situación es que lo que debería crecer por un lado, está obligado a disminuir por otro. Es decir, es incuestionable que España llegó a la crisis con uno de los mayores excesos de crédito del mundo
. Como recordó José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, en el año 2000 el porcentaje de crédito total sobre el PIB era del 194% en España.
“Ocho años más tarde, esta ratio pasó al 327%. España llegó a tener un récord mundial; había más gasto que ahorro y un fortísimo endeudamiento exterior. Fue una trayectoria similar a la de América Latina en la década de los noventa, cuando se endeudó masivamente en dólares”, recordó.
 Y lo más grave es que cuando explotó la burbuja, entre 2007 y 2008, las Administraciones públicas pidieron todo el crédito que se denegaba a las empresas.
 Así, la ratio de deuda sobre PIB siguió creciendo: en 2011 cerró con el 346% para bajar ligeramente, por primera vez en décadas, a mediados de 2012.
Los economistas consultados coinciden en el diagnóstico: España es un enfermo grave que debe sobrevivir con menos crédito. Ahora, el total asciende a 2,87 billones.
 El tema es más grave porque el caso español tiene otro elemento que pesa como una losa: la banca sigue contaminada por el enorme peso del ladrillo, cuyos activos se deprecian y lastran la recuperación del sector. No hay que olvidar que la mitad del crecimiento del crédito en la burbuja estuvo relacionado con el negocio inmobiliario, promotor, constructor e hipotecario. La caída de valor del ladrillo está afectando incluso a las entidades más sanas y grandes, lo que les paraliza a la hora de aceptar más riesgos, aunque sea en otras actividades industriales.
 Por eso, muchos expertos consideran que no se ha culminado la recapitalización de la banca y que la maquinaria del crédito no arrancará hasta que se despejen del todo las dudas sobre si está correctamente tapado el agujero del ladrillo.
La perspectiva no es buena. “El sistema financiero tendrá problemas este año y el crédito caerá más que en 2012. Europa ha exigido unas medidas de restricción de préstamos a las entidades nacionalizadas que no les animarán a conceder más, sino todo lo contrario”, apunta José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney. No obstante, Bankia ha asegurado que destinará más de 44.000 millones de euros a créditos para el desarrollo de actividades de pymes y autónomos durante los próximos tres años.
 A los particulares destinará 8.000 millones hasta 2015.
Las compañías pequeñas son las que más sufren la situación
Desde que empezó la crisis, los banqueros han negado que hayan cerrado el grifo del crédito. Su respuesta siempre es que “no hay demanda solvente”. Incluso algunos dicen que aprueban más operaciones, en porcentaje, que hace un año, pero argumentan que los empresarios “no quieren invertir; las pymes tampoco y las familias no compran coches ni pisos”. ¿Qué está fallando, la oferta o la demanda? Ángel Laborda, director de coyuntura de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), considera que las dos cosas. “La oferta de crédito por parte de los bancos es menor que antes porque no pueden acceder a los mercados internacionales y, por lo tanto, tiene escasa financiación y más cara.
 El dinero que consiguen de sus clientes, captando depósitos, lo destinan prioritariamente a sus vencimientos de deuda. Si la prima de riesgo está por encima de 200 puntos básicos, se financian a precios muy caros. Falta bastante tiempo para que se normalice la situación”, concluye.
Respecto a los clientes, Laborda cree que la banca cada vez exige más requisitos “para ser solvente”. “Después de una etapa en la que dieron créditos con mucha alegría, ahora son muy severos”. Ante esta situación, prefieren colocar su dinero en deuda pública, con menos riesgo y más rentabilidad.
Otro factor que frena a la banca es que su relación entre créditos y depósitos es muy alta, alrededor del 140%. Es decir, que por cada 100 euros en depósitos tienen concedidos créditos por valor de 140 euros. Y los 40 restantes han sido financiados con préstamos de inversores mayoristas que ahora exigen su dinero al llegar los vencimientos
. Europa ha exigido a la banca española que acerque esta relación hasta el 100%, otro incentivo para no prestar. Por último, los informes de los analistas auguran un incremento de la morosidad en hipotecas y pymes, como ha confirmado Bankia. Es la profecía autocumplida: si cortas el crédito, aumentará la morosidad, seguro.
Joaquín Maudos, catedrático de Economía de la Universidad de Valencia, pone cifras a la situación: “Dudo que una entidad rechace sin más dar un crédito si la empresa tiene un proyecto atractivo, ya que los bancos viven de los créditos que otorgan.
Dicho esto, sí creo que hay una situación generalizada de corte de crédito (credit crunch) como declaran las pymes españolas cuando contestan la encuesta del BCE sobre las condiciones de acceso a la financiación. En la última encuesta del BCE, el 57% de las pymes españolas declara que los bancos han reducido su predisposición a dar financiación, frente a un porcentaje medio del 37% en la eurozona y por encima de las empresas griegas, el 49%”.
A los bancos les preocupa este tema, pero también les parece vidrioso
. La prueba es que ni el Santander, ni el BBVA, ni La Caixa han respondido a las preguntas sobre este asunto. La patronal bancaria, AEB, sí lo ha hecho. “Los bancos no recortan el crédito a todos los sectores de forma indiscriminada.
 Continúan analizando todas las operaciones, con independencia del sector que provengan, aplicando los criterios de solvencia y rentabilidad ponderado por riesgo”, afirma la AEB, que insiste en que “no ha habido ayudas públicas al sector financiero, sino a determinadas entidades en dificultades”.
La patronal del sector niega que se haya
cerrado el grifo
La confederación española de cajas, CECA, sin embargo, apunta a nuevas líneas: se podrían establecer “mecanismos públicos que permitan identificar qué empresas son solventes y aportar una señalización que reduzca el coste del crédito para estas empresas a través de garantías o dándoles acceso a la obtención de calificaciones crediticias”. También apuntan otro elemento que frena el crédito: “Las exigencias de capital cada vez más fuertes que tienen las entidades limita su capacidad para la financiación”.
Desde el Banco Popular se niega que hayan cortado el grifo. En el año 2012 “aumentaron los créditos un 18,6%”, aseguran, y han puesto “en 2013 a disposición de las pymes 500 millones de euros captados en los mercados, así como una línea de financiación de liquidez de 3.000 millones”. En la entidad presidida por Ángel Ron consideran que hay un factor que ayudaría a que las entidades aflojaran el cerrojo: “La adecuación de la ponderación de los activos en el consumo de capital, porque los bancos españoles están sufriendo un trato discriminatorio frente a sus pares europeos”.
Fuentes del Banco Sabadell no creen que reducir las exigencias de capital perjudique al crédito.
Este banco, que afirma intermediar “uno de cada cuatro créditos”, comenta que espera una mejoría de la financiación “de los proyectos empresariales más rentables”.
¿Y qué piensan los del otro lado de la barrera, las pymes? Jesús Terciado, presidente de la patronal Cepyme, cree que la banca está fallando:
 “Es necesario que las entidades tengan en cuenta la viabilidad de los proyectos empresariales y no solo la capacidad de responder a las garantías exigidas.
 Lo importante es que las entidades valoren la viabilidad del proyecto empresarial independientemente del sector de actividad o del tamaño de la empresa”.
La Asociación de Trabajadores Autónomos, ATA, cuyo préstamo medio es de 8.000 euros (sobre todo para circulante), reclaman que se desarrolle “un sistema de microfinanciación de pequeños importes para afrontar la falta de liquidez”. ATA culpa de la situación, en parte, a la lentitud con la que se ha reestructurado el sector financiero.
Cepyme pide que se valoren los proyectos por encima del sector y el tamaño
Juan Sitges, director de Cofidis, financiera europea especializada en créditos a distancia, comenta que en 2012 elevaron un 4,7% el crédito, y que la clave del problema está en “lograr un equilibrio entre el endeudamiento y la capacidad de ahorro. Cualquier impulso del crédito desde la Administración ayudará a las empresas”.
Mario Draghi, presidente del BCE, negó la mayor: “Hoy los bancos españoles están bien capitalizados y en posición de prestar”. Sin embargo, algunos expertos apuntan a Alemania, donde está la sede del BCE, como culpable de la situación.
 El Servicio de Estudios de La Caixa, en su informe de enero pasado, recuerda que Alemania está bajando su deuda sobre PIB más que Portugal. “Sería altamente beneficioso que los países con capacidad crediticia infrautilizada, no se desapalancaran”, dice.
Miguel Ángel Bernal, profesor del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), lo explica gráficamente: “No se puede luchar contra un tigre con un matamoscas.
 Ante este gigantesco problema, no se pueden plantear temores inflacionistas. Alemania debe impulsar su demanda interna y generar una leve inflación, como ha hecho Estados Unidos.
 Quizá si el tren alemán echara a andar, el temor de los bancos, que decía Rosell, fuera menor y la recesión española se empezaría a alejar”.