Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

8 ene 2013

Los inspectores acusan al Banco de España de alterar sus conclusiones


Fachada del Banco de España. / CARLOS ROSILLO

La Asociación de Inspectores del Banco de España, que representa a más del 80% de los profesionales, denuncia irregularidades en los procesos de supervisión de las entidades financieras.
“Entre el informe de la inspección y la toma de decisiones de la Comisión Ejecutiva del Banco de España hay un excesivo nivel de filtros que solo tienen sentido para modular las conclusiones de la inspección, de modo que el informe de los inspectores no figura entre los documentos de los que dispone la Comisión Ejecutiva”, reza un informe elaborado por los inspectores en sus primeras páginas. Y añaden: “Todo ello ha conformado una organización en el Banco de España en la que se ha debilitado la autonomía funcional y/o la técnica de los inspectores, que perjudica el desarrollo efectivo de su tarea supervisora”.
La crítica al supervisor llega tras la acusación de injerencia política en la crisis de las cajas
Fuentes oficiales del supervisor no han querido comentar estas afirmaciones. Sin embargo, ante esta reivindicación, en otras ocasiones, el Banco de España ha argumentado que se tiene en cuenta la opinión de los inspectores, si bien se realizan resúmenes de sus inspecciones (que pueden tener más de 100 folios) para un funcionamiento más práctico. La toma de decisiones, comentan, es un sistema colegiado en donde la responsabilidad de la intervención de una entidad recae en la Dirección General de Supervisión y no en un grupo de inspectores.
La crítica de la Asociación es de gran calado porque sugiere que se ha modificado el sentido del informe del inspector que ha analizado la situación de una entidad con profundidad. La acusación llega tras una crisis financiera que dura ya más de cuatro años y en donde ha sido necesario socorrer a dos tercios de las antiguas cajas con más de 50.000 millones de dinero público.
La acusación de injerencia política en la actuación del Banco de España se ha acentuado en los últimos años, marcados por la quiebra de Bankia, que puso a España al borde del rescate total.

Las principales denuncias

EL PAÍS
“No existe en la actualidad un procedimiento de rendición de cuentas y el sistema implantado de facto carece de la necesaria transparencia”.
“Los procesos de tomas de decisiones son inadecuados y poco transparentes: [...] hay un excesivo nivel de filtros que solo tienen sentido para modular las conclusiones de la inspección”.
 “La influencia de la industria [...] ha modulado la actual supervisión [...] se ha relajado la aplicación de medidas correctivas sobre las deficiencias observadas por los inspectores”.
“Se ha perdido la práctica habitual en otros momentos de la emisión de actas de inspección, que han sido sustituidas por relaciones de hechos o meras recomendaciones”.
 “Las peticiones de la inspección [a las entidades] son desatendidas”.
“Se ha actuado de un modo excesivamente suave en relación con infracciones [...], se ha sido laxo en la política de remuneraciones estratosféricas [...] o en situaciones como las de Alfredo Sáenz y otros directivos condenados penalmente”.
“Los problemas se conocían, simplemente ha habido una falta de actuación”.
“La forma habitual de reacción ante los indicios de delito es mirar hacia otro lado. En el trabajo de la inspección aparecen con relativa frecuencia indicios de conductas que puedieran ser delictivas. No obstante, la finalidad del trabajo inspector se orienta hacia la detección de deterioros y evaluación de la gestión [...]. Esta circunstancia unida a la dificultad de probar conducta delictuales complejas hace que no se trabaje activamente en la persecución del delito”.
La Asociación de Inspectores ha dado el escrito, de 30 puntos, a la cúpula del Banco de España, dirigido por Luis Linde. La institución está revisando los fallos cometidos en la supervisión por mandato de Bruselas. Tras entregar el dinero del rescate bancario, la troika (Comisión Europea, BCE y FMI), ha exigido al Banco de España “una revisión interna formal para detectar deficiencias e introducir las mejoras precisas”.
En el informe, titulado Mejoras en los procesos de supervisión del Banco de España, también se acusa a la dirección de que “la reacción ante los indicios de delito” hallados en la inspección, “es mirar hacia otro lado”.
Además de reforzar la condición de los inspectores como agentes de la autoridad y con categoría de altos funcionarios, proponen incrementar la transparencia en la toma de decisiones. “No existe en la actualidad un procedimiento de rendición de cuentas y el sistema implantado de facto carece de la necesaria transparencia”, señalan en el primer punto. Los inspectores afirman que “los procesos de toma de decisiones” en la institución “son inadecuados y poco transparentes”.
Para elevar el control sobre los gestores del Banco de España, los inspectores piden que sus obligaciones no se limiten “a la publicación de una memoria anual de supervisión” y a las comparecencias en el Parlamento. Reclaman que se conozcan “cuántos elementos emplea el banco para formar su criterio en materia supervisora, siempre que estos elementos deban ser conocidos”.
El primer paso para que haya luz y taquígrafos es que los autores de los informes se hagan responsables del contenido con su firma, algo que ahora no ocurre.
 “Cada actuación supervisora debe estar adecuadamente identificada. Cada informe debe ser firmado; ahora no ocurre y no son asumidos por nadie”, apuntan.
Los inspectores reclaman mayor "fiscalización democratica" del Banco de España
“En el caso de existir discrepancias entre los inspectores, los jefes de grupo y los directores de departamento, debe quedar expresa constancia de las mismas firmadas por cada responsable”, solicitan. La prueba de este problema llegó en la investigación judicial del caso Bankia. En dicho sumario, aparecieron informes sobre los graves problemas de gestión de Caja Madrid y de Bankia sin nombres ni firmas de los autores. En el Banco de España se considera que si algún documento oficial no está firmado, es la Dirección General de Supervisión la que se hace responsable de él.
También pide el informe más “responsabilidad de las actuaciones” del supervisor, en relación con los acuerdos tomados en los comités (ejecutivos, de política monetaria y de estabilidad financiera)”. En resumen, se reclama “una saludable fiscalización democrática que contribuya a asegurar que las autoridades se ocupan de los problemas de su competencia”.
 Buena parte de estas mejoras, se podrían recoger en el “código bancario” que a finales de este año debe presentar el Banco de España al Gobierno, dicen los inspectores. Además de refundir normativa, reclaman que se incluyan “las interpretaciones y acuerdos internos del Banco que afecten a los administrados”. Otros bancos centrales, como la Reserva Federal de Estados Unidos, hacen públicas sus deliberaciones pasado cierto tiempo. El objetivo que se persigue es presionar sobre los consejeros y que rechacen posiciones dudosas al saber que sus declaraciones van a ser conocidas pasado un tiempo.

Romeo Beckham se cuela en ‘Vogue’

La revista cuenta con una estricta norma de no publicar modelos menores de 16

Sin embargo, el hijo de Victoria y David aparece en las publicidades de Burberry.

Romeo Beckham en un enorme cartel publicitario de Burberry, en California. / CORDON PRESS

Cuando hace unas semanas la firma Burberry anunció que el segundo hijo de David y Victoria Beckham, Romeo, sería su nueva imagen publicitaria, la editora de la versión británica de Vogue, Alexandra Shulman, lo tuvo claro: el chaval no aparecería en sus páginas.
 Según la opinión de la periodista, un niño de diez años no tiene la madurez suficiente para enfrentarse a las presiones del mundo de la moda.
 Por esa misma razón, la revista cuenta con una política muy estricta que no permite la promoción de modelos menores de 16 años.
 Sin embargo, la sorpresa ha llegado este mes, ya que en el número actual, el rostro pícaro del prepúber aparece a todo color en una doble página que promociona la firma.
Para salir al paso, un portavoz de la revista ha asegurado a The Daily Telegraph que al oponerse a la aparición de un niño de 10 años en la publicación, Shulman se refería solo al uso editorial que se le pudiera dar a las imágenes de Romeo
. Y, como en el terreno publicitario la editora periodística no posee ningún control, la iniciativa de utilizar un criterio saludable para la edad mínima de los modelos de Vogue no podía ser aplicada en este caso
. En el anuncio, el segundo hijo de la diseñadora y la estrella del fútbol aparece junto a los modelos Edie Campbell y Charlie France.
Las críticas a la revista no han tardado en aparecer.
 Muchos opinan que hay un doble estándar a la hora de imponer una norma estricta en cuanto a la edad de los modelos. En otras palabras, que si hay dinero de por medio, las reglas se van al garete.
La propia modelo Edie Campbell, compañera de anuncio del pequeño Beckham, comentó cuando oyó los argumentos de la editora de Vogue que le parecía curioso, ya que la revista publicó hace unos meses una entrevista con la actriz estadounidense Chloë Moretz, de 15 años, ilustrada con varias imágenes de la chica. “Pero los actores infantiles seguramente entrarán en una categoría distinta”, interpretó.

 

¿SABES QUIËN ES?


Quién paga los arreglos estéticos de La Princesa que se cree Modelo?


Fotos: Princesa Letizia: fotos look en la boda real de Luxemburgo
La Princesa Letizia ha vuelto a pasar por el quirófano. Como la mujer del futuro rey de España que es, Doña Letizia quiere estar perfecta y a gusto con su físico ante todo el mundo y por eso, unos días antes de acudir a la boda de los Príncipes de Luxemburgo, pasó por el quirófano para hacerse unos arreglillos.
 Por lo que parece, según informa el portal Vanitatis, la Princesa se ha sometido a una operación que no requiere de post-operatorio, por eso ha podido continuar con su agenda, tanto en la boda, como en los siguientes compromisos a los que ha acudido de forma normal y sin que tenga ninguna señal que haga sospechar de su paso por el quirófano.
Antes de la boda de los Príncipes de Luxemburgo, en la que la Princesa optó por un diseño de Felipe Varela, pasó por el quirófano para practicarse un microlifting y así estar perfecta para la ocasión.
 Esta operación consiste en un estiramiento facial, con el que la Princesa también ha conseguido tensar su cuello y acabar con algunas que otras imperfecciones.
La operación la llevó a cabo el Doctor Antonio de la Fuente, un cirujano plástico muy conocido entre la alta burguesía que operó a la Princesa en la clínica Ruber Internacional de Madrid, donde es Jefe de la Unidad de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética.
Esta operación a la que se ha sometido Letizia es un tratamiento de última generación y por eso no necesita post-operatorio ni deja marcas visibles, sólo una pequeña incisión en la mandíbula pero que en unos días ha desparecido. Hasta ahora, la Princesa se había sometido a otros tratamientos más suaves como peelings o inyecciones
de botox.
Pero ya desde que se iba a casar con el Príncipe, Doña Letizia comenzó con sus retoques en la clínica Carmen Navarro
. Y en el año 2008 se sometió a una operación de nariz, de la que todos fuimos conscientes.
 Concretamente se hizo una septorrinoplastia con la que quería corregir una desviación del tabique nasal, según informó en su momento la Casa Real. Aunque otras fuentes aseguran que simplemente fue por cuestiones de estética.
Parece que la insistencia por Letizia de ser una princesa modelo no cesa, ya que además de destacar por sus looks perfectos, por algo ha sido elegida entre las 10 españolas mejor vestidas, ahora quiere sentirse rejuvenecida y perfecta a sus 40 años con algunos retoques más en el rostro.
Esperemos que al menos este tipo de operaciones continúen mejorando la imagen de la Princesa y no la empeore como les ha pasado a muchas famosas tras pasar por el quirófano.