Hace tres semanas, Aena instaló en todos los aeropuertos españoles carteles para avisar a los viajeros de que la normativa permite embarcar con bolsas o paquetes de productos adquiridos en las tiendas de las terminales, quepan o no en el equipaje de mano, sin que ello suponga un sobrecoste
. Para algunos viajeros, esta información ha supuesto una sorpresa: ¿por qué algunas compañías no permiten entrar en los aviones con esos bultos o cobran por ellos? Muchos, de hecho, se han acercado desde entonces a los mostradores de información para preguntar si esa ley es obligatoria para todas las aerolíneas.
La respuesta de la empresa pública propietaria de los aeropuertos españoles es tajante: todas las operadoras están sujetas a la Ley de Navegación Aérea, cuyo artículo 97 establece que "el transporte en cabina de los bultos y equipaje de mano, y en particular los adquiridos en las tiendas del aeropuerto, es obligatorio para todas las compañías sin excepción y debe realizarse de manera gratuita”, según recuerda en un comunicado. Por ello, recomienda a los viajeros que presenten reclamaciones cuando este derecho les sea denegado.
Las consultas de los viajeros se refieren sobre todo a las compañías de bajo coste, entre ellas Ryanair, que en ningún caso permite la entrada en sus aviones con más de un bulto en la mano, aunque sean productos adquiridos en las terminales
. La aerolínea irlandesa justifica su política de “tolerancia cero” en que los viajeros, al comprar su billete, aceptan esa condición, expresada en sus reglamentos relativos al equipaje de mano, que establecen un sobrecoste de 50 euros por los paquetes adicionales. Una condición que, según un portavoz de Aena, es “totalmente ilegal”.
Al hilo de la campaña informativa de Aena, la Confederación de Consumidores y Usuarios (Cecu) ha pedido hoy a las autoridades competentes -en este caso, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea- que intensifiquen las inspecciones para impedir que las aerolíneas se aprovechen de los viajeros que no conocen la legislación. “Muchas aerolíneas buscan resquicios en la normativa para aplicar nuevos cargos extra que los pasajeros, en su desconocimiento, creen que son legales. Por eso es importante que aumenten las inspecciones.
No se puede confiar en que las compañías vayan a cumplir la ley de buena voluntad”, afirma su portavoz.
. Para algunos viajeros, esta información ha supuesto una sorpresa: ¿por qué algunas compañías no permiten entrar en los aviones con esos bultos o cobran por ellos? Muchos, de hecho, se han acercado desde entonces a los mostradores de información para preguntar si esa ley es obligatoria para todas las aerolíneas.
La respuesta de la empresa pública propietaria de los aeropuertos españoles es tajante: todas las operadoras están sujetas a la Ley de Navegación Aérea, cuyo artículo 97 establece que "el transporte en cabina de los bultos y equipaje de mano, y en particular los adquiridos en las tiendas del aeropuerto, es obligatorio para todas las compañías sin excepción y debe realizarse de manera gratuita”, según recuerda en un comunicado. Por ello, recomienda a los viajeros que presenten reclamaciones cuando este derecho les sea denegado.
Las consultas de los viajeros se refieren sobre todo a las compañías de bajo coste, entre ellas Ryanair, que en ningún caso permite la entrada en sus aviones con más de un bulto en la mano, aunque sean productos adquiridos en las terminales
. La aerolínea irlandesa justifica su política de “tolerancia cero” en que los viajeros, al comprar su billete, aceptan esa condición, expresada en sus reglamentos relativos al equipaje de mano, que establecen un sobrecoste de 50 euros por los paquetes adicionales. Una condición que, según un portavoz de Aena, es “totalmente ilegal”.
Al hilo de la campaña informativa de Aena, la Confederación de Consumidores y Usuarios (Cecu) ha pedido hoy a las autoridades competentes -en este caso, la Agencia Estatal de Seguridad Aérea- que intensifiquen las inspecciones para impedir que las aerolíneas se aprovechen de los viajeros que no conocen la legislación. “Muchas aerolíneas buscan resquicios en la normativa para aplicar nuevos cargos extra que los pasajeros, en su desconocimiento, creen que son legales. Por eso es importante que aumenten las inspecciones.
No se puede confiar en que las compañías vayan a cumplir la ley de buena voluntad”, afirma su portavoz.