8 may 2012
Pedro Calderón de la Barca
(1600-1681)
(Este es el soliloquio más famoso del drama español;
ocurre al final del primer acto, cuando Segismundo
piensa en la vida y en su suerte.)
Sueña el rey que es rey, y vive
con este engaño mandando,
disponiendo y gobernando;
y este aplauso, que recibe
prestado, en el viento escribe,
y en cenizas le convierte
la muerte, ¡desdicha fuerte!
¿Que hay quien intente reinar,
viendo que ha de despertar
en el sueño de la muerte? Sueña el rico en su riqueza,
que más cuidados le ofrece;
sueña el pobre que padece
su miseria y su pobreza;
sueña el que a medrar empieza,
sueña el que afana y pretende,
sueña el que agravia y ofende,
y en el mundo, en conclusión,
todos sueñan lo que son,
aunque ninguno lo entiende.
Yo sueño que estoy aquí
destas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño:
que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son.
Janis, al desnudo
No era una flor suicida ni tampoco una víctima del mundo convencional. Janis Joplin se liberó en el San Francisco hippy y se transformó en una fiera bisexual que se comía el mundo a mordiscos. Dos discos recientes muestran su libertad expresiva y su búsqueda creativa. Live at the Carousel Ballroom 1968, con Big Brother and the Holding Company, es puro rock sanfranciscano, voz desgañitada y guitarras de cascabel. The Pearl sessions rescata tomas inéditas del último trabajo de Janis, con el rock de puño apretado de la Full Tilt Boogie Band.
NON PLUS ULTRA
NON PLUS ULTRA
Hermann Tertsch da también alguna vuelta para llegar a donde quiere
. Así que empieza por la extrema derecha griega para acabar en Andalucía: “Aquí en España hace unos días un comunista fue al Parlamento andaluz a jurar el cargo y lo que hizo fue anunciar su voluntad de hacer todo lo posible por destruir el sistema que le permite acceder al escaño
. Que aun así, ese parlamentario pudiera ocupar su escaño, y no fuera expulsado por su ofensa al sistema democrático, es muy significativo. Revela lo poco que ya respetamos unas formas que son imprescindibles como parte del fondo”.
Pilar García de la Granja dice cosas raras en La Gaceta. “El Gobierno del Partido Popular, infinitamente mejor que el Gobierno del PSOE liderado por el presidente Zapatero, llegó al poder pensando que España, económicamente hablando, se encontraba como en 1996. Los ahora prohombres del presidente Rajoy explicaban que ‘con un par de retoques serios’, saldríamos de ésta”. Serían buenísimos, pero parecen unos auténticos zotes, que no sabían nada de nada. ¡Y cuidado que era fácil, que casi todas las autonomías eran suyas! Lo dicho: unos incompetentes.
Gabriela Bustelo nos habla de “La enclenque Europa y el socialismo feroz”: “Sarkozy, pese a las críticas que recibe ahora por parte de sus compatriotas, ha hecho mucho en un país lastrado por una izquierda tan poderosa y tóxica como la española (…)
No hace falta ser experto en economía para saber que un socialista como Hollande podría llevar a su país por la misma senda ruinosa que han seguido los periféricos europeos, es decir, Italia, España, Portugal, Grecia e Irlanda”. ¿También Berlusconi era socialista? ¿Irlanda? ¿La mitad griega?
Y dos citas breves también de La Gaceta. Carlos Dávila: “Pensar que un tipo como Hollande y el PS pueden sacar a los galos del caos es volver atrás y creer en Zapatero, el mal ejemplo que quedará para siempre en la Historia mundial”. Y José Javier Esparza: “Ya sabemos por experiencia propia que los socialistas son especialistas en presentarse como la madre amante que nos acogerá –las verrugas de la bruja sólo las vemos después”.
Hermann Tertsch da también alguna vuelta para llegar a donde quiere
. Así que empieza por la extrema derecha griega para acabar en Andalucía: “Aquí en España hace unos días un comunista fue al Parlamento andaluz a jurar el cargo y lo que hizo fue anunciar su voluntad de hacer todo lo posible por destruir el sistema que le permite acceder al escaño
. Que aun así, ese parlamentario pudiera ocupar su escaño, y no fuera expulsado por su ofensa al sistema democrático, es muy significativo. Revela lo poco que ya respetamos unas formas que son imprescindibles como parte del fondo”.
Pilar García de la Granja dice cosas raras en La Gaceta. “El Gobierno del Partido Popular, infinitamente mejor que el Gobierno del PSOE liderado por el presidente Zapatero, llegó al poder pensando que España, económicamente hablando, se encontraba como en 1996. Los ahora prohombres del presidente Rajoy explicaban que ‘con un par de retoques serios’, saldríamos de ésta”. Serían buenísimos, pero parecen unos auténticos zotes, que no sabían nada de nada. ¡Y cuidado que era fácil, que casi todas las autonomías eran suyas! Lo dicho: unos incompetentes.
Gabriela Bustelo nos habla de “La enclenque Europa y el socialismo feroz”: “Sarkozy, pese a las críticas que recibe ahora por parte de sus compatriotas, ha hecho mucho en un país lastrado por una izquierda tan poderosa y tóxica como la española (…)
No hace falta ser experto en economía para saber que un socialista como Hollande podría llevar a su país por la misma senda ruinosa que han seguido los periféricos europeos, es decir, Italia, España, Portugal, Grecia e Irlanda”. ¿También Berlusconi era socialista? ¿Irlanda? ¿La mitad griega?
Y dos citas breves también de La Gaceta. Carlos Dávila: “Pensar que un tipo como Hollande y el PS pueden sacar a los galos del caos es volver atrás y creer en Zapatero, el mal ejemplo que quedará para siempre en la Historia mundial”. Y José Javier Esparza: “Ya sabemos por experiencia propia que los socialistas son especialistas en presentarse como la madre amante que nos acogerá –las verrugas de la bruja sólo las vemos después”.
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