Páginas que este año que se va han estado atestadas de acontecimientos (con las bodas como bandera) que nunca viene mal repasar..
El año que se va ha sido especialmente fértil en cuanto a nacimientos de famosines del futuro. No tanto por la cantidad (sí, todos los años nacen niños) sino por la calidad del apellido de los flamantes padres. Si enero trajo el blindadísimo nacimiento del pequeño Leo Bardem Cruz (al que no pudimos ver hasta verano), el año escolar comenzó con la cacareada llegada de Harper Seven Beckham.
Con el otoño llegaron dos hijos de la aristocracia política europea: Giulia Bruni Sarkozy, con genes de exmodelo italiana y presidente francés, e Iván Rosa Sáenz de Santamaría, el niño con la madre más poderosa de España. Año rico en nacimientos políticos y también taurinos: en 2011 han sido padres el Juli, José Tomás, José María Manzanares, Morante de la Puebla o Víctor Puerto. O
tros niños han venido a pares: los gemelos de los príncipes de Dinamarca y los de Mariah Carey, a quienes bautizó con nombres cuanto menos estrambóticos: Moroccan y Monroe
. Más tradicionales son los nombres de los mellizos de Miguel Bosé, de cuyo nacimiento se supo a finales de abril: Diego y Tadeo.
- Crecer y casarse...
El año que Diana habría cumplido 50 años, sus hijos se han hecho mayores.
Su primogénito Guillermo ha protagonizado uno de los grandes momentos de 2011, la boda del año y una (de tantas) de las del siglo.
El ya duque de Cambridge ha hecho surgir a una estrella, su esposa Catalina, protagonista de toda fiesta, viaje y gala benéfica, que ha creado a su vez un satélite casi igual de brillante: su hermana, Pippa Middleton.
Si el beso en el balcón de Buckingham fue la guinda del mejor año de la monarquía británica (que para rematar la jugada también celebró la boda de Zara Phillips, nieta mayor de la reina Isabel, tres meses después), las lágrimas de Charlene Wittstock en su boda con Alberto de Mónaco fueron la contrapartida. Una boda más cercana a la falsa pompa de Disneylandia que a la vida real.
Nada que ver con las dos uniones más alegres y sorprendentes (aunque esperadas) del año, la de dos mujeres diferentes entre sí aunque igual de independientes y creadoras de tendencias: Kate Moss y Cayetana de Alba. Sus divertidas bodas, en versión roquera y flamenca, levantaron expectación, críticas y alabanzas.
Otras dos neoprincesas que también se han casado este año han sido Petra Ecclestone y Kim Kardashian, en dos enlaces excesivos y millonarios.
A la segunda ya le ha dado tiempo hasta a separarse (y a venderlo todo, claro). Dos también han sido los matrimonios sorpresa: el de Paul McCartney y Nancy Shevell y el de dos grandes de la pantalla, Daniel Craig y Rachel Weisz.
- (Y separarse)
Tras las fiestas, los disgustos. 2011 también ha sido año de divorcios. Entre los más sonados, el de Demi Moore y Ashton Kutcher, íntegramente retransmitido vía Twitter, o el de las dos grandes estrellas latinas de EE UU, Jennifer López y Marc Anthony, que ya no compartirán vida, pero sí negocios.
Menos esperado era el de Maria Shriver y Arnold Schwarzenegger: un hijo secreto del actor con una de sus empleadas de hogar acabó con un cuarto de siglo de romance demócrata-republicano. Ya en España, David Bisbal y Elena Tablada también rompieron su relación, y los últimos en anunciar el adiós han sido Fernando Alonso y Raquel del Rosario.
No estaban casados, pero ha habido rupturas de noviazgos para recordar. Compuestos y sin novio se han quedado Elisabetta Canalis en junio (Clooney tenía nueva novia en menos de tres meses) y Sean Penn y Scarlett Johansson, cuyo fugaz romance apenas duró lo que la primavera.
- Reproducirse...
Aunque algunas parejas sí sobreviven. Pronto llegará al mundo uno de los bebés más esperados, el hijo de Beyoncé y Jay-Z. La cantante mostró barriguita con un momentazo diva en una gala de premios, y ahora la luce siempre que puede. Otra a la espera es Victoria de Suecia, que en marzo dará a luz al heredero de la heredera de la corona nórdica. Jennifer Garner, Hillary Duff, Jessica Simpson o Paloma Cuevas también serán madres en 2012.
- Y alguna mala noticia
No es momento para ponerse tristes con despedidas (como las de Elizabeth Taylor, que falleció en marzo, o la de Amy Winehouse, en julio) para dar cuenta del cierre de ciclo vital. Pueden valer los muchos escándalos de este año, que sirven para hundir (o al menos para dejar tocada) la carrera de cualquiera: desde yernos de reyes como Iñaki Urdangarin a políticos mundiales como Strauss-Kahn, de familias y magnates hipermillonarios como Lilliane Bettencourt o Rupert Murdoch a dioses del Olimpo de la moda como John Galliano o toreros como José Ortega Cano. Caídos o ungidos, henchidos de felicidad o en los momentos duros, son gente que seguirá llenando las páginas de Gente.