Su piano es capaz de abrirle nuevas ventanas a los clásicos norteamericanos, pero también a las inmarchitables creaciones brasileñas de Vicinius, Jobim o Chico Buarque. Agarrar de los pelos a Renato Carosone, Michael Jackson y los Beatles para traerlos junto a Beethoven y Keith Jarret en un ejercicio de repentismo a demanda popular. Un piano puesto al servicio del entretenimiento, donde la precisión se disfraza siempre de divertimento y la falta de grandilocuencia esconde una propuesta ambiciosa.
La RAI 3, que fue el canal público de orientación comunista hasta derivar en la cadena cultural, satírica y de calidad informativa donde se puede ver la mejor Italia, esa que está en proceso de demolición por suerte siempre inacabado, encargó hace unos meses seis programas de jazz a Bollani y él los envolvió con invitados y propuestas sugerentes. En la pura tradición del entertainer, ha acompañado al piano los descargos de conciencia televisados de Roberto Saviano titulados Vente conmigo (también en RAI 3 y ahora publicados en Anagrama), y ha sostenido dúos con Chick Corea o Phil Woods. En un territorio como el televisivo donde la música de calidad es tan rara como una confesión sincera en un mitin, este florentino de 39 años ha prometido regresar con nuevas entregas de su estimulante Sostiene Bollani.