Directora ganadora del Oscar .
Violencia, ansia de venganza y perdón: los tres ríos subterráneos recorren la trama de En un mundo mejor, el drama que le ha dado a Susanne Bier (Copenhague, 1960) el Oscar a la mejor película de habla no inglesa. Bier mezcla el acoso infantil y los matones del colegio con una visión muy descarnada del mundo actual, gracias al trabajo de un médico danés en misión humanitaria en un campo de refugiados de África.
Niños insomnes, violencia y redención
La primera película de Bier, Freud deja la casa, data de 1990. Entre sus filmes destacan Hermanos, que ganó la Concha de Plata a las mejores interpretaciones masculina y femenina; Después de la boda, candidata al Oscar, y Cosas que perdimos en el fuego, su incursión en Hollywood con Benicio del Toro y Halle Berry.
Pregunta. Antón trabaja como médico en África mientras su hijo es víctima del acoso escolar en Dinamarca; salva vidas mientras su hijo sufre en soledad. ¿A veces se ayuda a los demás mientras uno desprotege a su familia?
Respuesta. Es muy difícil hacer lo correcto. Lo que hace Antón en África es realmente bueno pero, a la vez, no es consciente de que su hijo le necesita. No sé cuál es la respuesta.
Quieres hacer lo correcto y dañas a una persona cercana a ti y a la que quieres.
P. La violencia del mundo se refleja en la brutalidad del microcosmos escolar, donde impera la ley del más fuerte y se machaca al débil sin contemplaciones.
R. Estamos hartos de conocer historias y de ver noticias protagonizadas por niños que se suicidan por el acoso de sus compañeros en el colegio. Los casos del niño que golpea a otro niño o del hombre que pega al padre de Elías en Dinamarca son la misma violencia con distintas escalas y grados de brutalidad, lo mismo que el tirano que comete brutalidades en África.
P. Elías se junta con Christian, un niño con una gran violencia en su interior a causa de la muerte de su madre.
R. Christian es básicamente un buen chico. No es malo. Se siente mal y dolido por lo que le ha pasado. Se siente herido y enfadado por la muerte de su madre. Y se comporta de una mala manera. Pero en el fondo es bueno. La noción que subyace en la película es cómo se crea un nuevo terrorista. Sus vivencias hacen que se cree un pequeño terrorista.
P. Antón enseña a los niños que lo inteligente no es responder con violencia a la violencia. Les enseña que, al final, el violento siempre sale perdiendo. ¿Está de acuerdo con esto?
R. No estoy en desacuerdo con esa idea, pero hay que ser consciente de que no siempre es una postura realista. Por ejemplo, cuando Antón intenta proteger a un asesino africano, duda en el fondo de su mente si hace lo correcto.
P. Es tremenda la incomunicación entre padres e hijos.
R. Es realmente grave. La brecha entre algunos de ellos es enorme.
P. Internet no parece servir para crear lazos entre las personas. De hecho, en la película, la Red solo sirve para fabricar una bomba.
R. Cuando estábamos escribiendo el guión, entraba en Internet para ver si existía la posibilidad de aprender a fabricar una bomba. Y llamé a la policía para decir que no teníamos esa intención.
P. La película deja una puerta abierta a la esperanza. ¿Opina lo mismo?
R. Era muy importante para mí abrir esa puerta. Existe una posible salida, una potencial esperanza. Hablo de la capacidad de perdonar y de la venganza. Y el mensaje es que si uno es capaz de perdonar hay esperanza.
P. ¿Qué le ha aportado trabajar en el cine estadounidense?
R. Una de las cosas que aprendí en Europa es que a los directores se les considera como autores, como la última palabra.
En Europa no se cuestiona a los directores. En cambio, en Estados Unidos el equipo Dreamworks me preguntaba y cuestionaba muchas cosas. Esto dio lugar a intercambios muy fructíferos.
En Europa los directores no están acostumbrados a ser cuestionados. No es sano que al director no se le planteen alternativas o se le cuestionen aspectos de su trabajo para hacer otras cosas.
2 abr 2011
Gira de primavera
BORIS IZAGUIRRE
Es una prerrogativa de las personas reales, herederos o soberanos, vivir alejados de la realidad. Por eso, cuando un jamón se cruza en su camino, como en la visita de Carlos y Camila al mercado de San Miguel, todos reaccionamos ante su negativa a probarlo.
Si letizia hubiera sido anglosajona, se habría puesto un clavel y castañuelas
Es curioso que esas cenas no incluyan representantes de la vida artística
Ellos no pueden aceptar un alimento con tanta crudeza cultural así como así. Judíos y musulmanes británicos podrían irritarse al verles masticar cerdo.
También hay que considerar que nuestra exposición al jamón a veces puede generar asombro. Esas patas, con pezuña, sobrevolando cabezas en los bares y jamonerías, goteando grasa como si el animal de alguna extraña forma aún transpirara, y el ejercicio de rebanar con un cuchillo, puede enmudecer al visitante.
Él es más ducho en estos encuentros con la cosa étnica y seguramente asoció la situación con muchos sitios de Asia que les agasajan con sesos de monos o insectos fritos.
Lo que claramente les descolocó fue el ofrecimiento de la vianda de una mano a otra. Sin mediar ni guante ni plato.
El príncipe de Gales realiza cada año lo que se denomina como Gira de Primavera.
En 2007 visitó los Emiratos Árabes, también con Camila.
En 2010, Brasil, Ecuador y Chile, volando en avión privado, ensuciando de carbono el cielo que sus convicciones ambientales desean limpiar. En Madrid, huéspedes de otros príncipes herederos, la visita planteó un tipo de sucesión de poder menos conflictiva que la de los primeros ministros.
Al ceder el Rey el foco de atención a sus hijos sucesores se dibujaba ya un nuevo escenario dinástico.
Los cuatro en fila evidenciaban que la vida de los herederos es lenta y de tanta paciencia como jamones hay colgados en nuestro país.
Camila prefirió enfundarse una fantasía británica en tono hielo que la convertía en sacerdotisa de alguna galaxia de David Lynch. Letizia mostró los brazos, quizás sin darse cuenta de que mostraba también la amplia diferencia de edad con su invitada.
Pero no se puede negar el salero de la princesa de Asturias al vestirse de clavel, no solo en color, sino todo el traje dibujándola casi como una de esas encantadoras bailarinas flamencas que todos, españoles o no, hemos adquirido para colocar encima de nuestros televisores antes de la era digital.
Lo único objetable al vestido Carmen de Letizia es el miedo al ridículo de nuestra idiosincrasia.
Si Letizia hubiera sido anglosajona, le habría puesto al atuendo castañuelas y hasta un clavel de verdad en el pelo.
Poco se sabe de los invitados a la cena de gala, aparte de la aristocracia con Cayetana de Alba al frente; el espectro político, nunca mejor dicho, y la fuerza empresarial, que no paran de acudir a todos sitios, con una vida social nunca antes vista.
Es curioso que esas cenas no incluyan representantes de la vida artística del país. Javier Marías, por ejemplo, es un autor español ampliamente celebrado en el Reino Unido.
Lo mismo Ferran Adrià, siendo Inglaterra una nación que actualmente impulsa a sus chefs como otrora hizo con los Rolling Stones.
A pesar de que Letizia lleve a su marido a películas subtituladas, ningún cineasta se sienta en sus cenas. Ni músicos del pop nacional, entendiéndose que el Reino Unido es la meca de esa industria.
Al día siguiente, Letizia descubrió que los brazos pueden estar cubiertos, pero la prensa estaba más ocupada en si Carlos había esquivado, igual que el jamón, todo lo del peñón.
Aunque hablara caballerosamente en nuestro idioma, Carlos no puso pie sobre la gran piedra. Para la realidad de Carlos, Gibraltar es el escenario de uno de los momentos más dolorosos de su anterior matrimonio.
Fue justamente con el peñón de conflictivo fondo, a bordo del Britania en su luna de miel, cuando Diana descubrió que Carlos vestía los gemelos que le había regalado Camila, ostentando sus iniciales. Al ver las dos ces unidas en los gemelos, Diana entró en un frenesí documentado en sus biografías, intentó arrojarse por las escaleras, entró en las cocinas reales y devoró todo lo que guardaban sus neveras.
El peñón es para Carlos un escollo doloroso y afilado, el fantasma de Diana, una constante en el matrimonio como la soberanía de la roca para nosotros.
Durante la visita a la finca del duque de Wellington, respiran tranquilos, igual que los ingleses que encuentran restaurantes abiertos en sus horarios en Estepona.
Imaginarlos allí, hectáreas infinitas sin cerdos, los hace esos futuros soberanos de apacible madurez. Admiramos de Carlos su paciencia.
No solo en la edípica espera para ser rey, sino también en hacer una vida junto a la mujer que ama.
Tampoco cuesta imaginarlos en el avión privado ya de camino a Marruecos, expectantes ante la aparición de nuevos alimentos comprometedores, formulándose la gran pregunta: ¿qué carne se puede comer con la mano?
Es una prerrogativa de las personas reales, herederos o soberanos, vivir alejados de la realidad. Por eso, cuando un jamón se cruza en su camino, como en la visita de Carlos y Camila al mercado de San Miguel, todos reaccionamos ante su negativa a probarlo.
Si letizia hubiera sido anglosajona, se habría puesto un clavel y castañuelas
Es curioso que esas cenas no incluyan representantes de la vida artística
Ellos no pueden aceptar un alimento con tanta crudeza cultural así como así. Judíos y musulmanes británicos podrían irritarse al verles masticar cerdo.
También hay que considerar que nuestra exposición al jamón a veces puede generar asombro. Esas patas, con pezuña, sobrevolando cabezas en los bares y jamonerías, goteando grasa como si el animal de alguna extraña forma aún transpirara, y el ejercicio de rebanar con un cuchillo, puede enmudecer al visitante.
Él es más ducho en estos encuentros con la cosa étnica y seguramente asoció la situación con muchos sitios de Asia que les agasajan con sesos de monos o insectos fritos.
Lo que claramente les descolocó fue el ofrecimiento de la vianda de una mano a otra. Sin mediar ni guante ni plato.
El príncipe de Gales realiza cada año lo que se denomina como Gira de Primavera.
En 2007 visitó los Emiratos Árabes, también con Camila.
En 2010, Brasil, Ecuador y Chile, volando en avión privado, ensuciando de carbono el cielo que sus convicciones ambientales desean limpiar. En Madrid, huéspedes de otros príncipes herederos, la visita planteó un tipo de sucesión de poder menos conflictiva que la de los primeros ministros.
Al ceder el Rey el foco de atención a sus hijos sucesores se dibujaba ya un nuevo escenario dinástico.
Los cuatro en fila evidenciaban que la vida de los herederos es lenta y de tanta paciencia como jamones hay colgados en nuestro país.
Camila prefirió enfundarse una fantasía británica en tono hielo que la convertía en sacerdotisa de alguna galaxia de David Lynch. Letizia mostró los brazos, quizás sin darse cuenta de que mostraba también la amplia diferencia de edad con su invitada.
Pero no se puede negar el salero de la princesa de Asturias al vestirse de clavel, no solo en color, sino todo el traje dibujándola casi como una de esas encantadoras bailarinas flamencas que todos, españoles o no, hemos adquirido para colocar encima de nuestros televisores antes de la era digital.
Lo único objetable al vestido Carmen de Letizia es el miedo al ridículo de nuestra idiosincrasia.
Si Letizia hubiera sido anglosajona, le habría puesto al atuendo castañuelas y hasta un clavel de verdad en el pelo.
Poco se sabe de los invitados a la cena de gala, aparte de la aristocracia con Cayetana de Alba al frente; el espectro político, nunca mejor dicho, y la fuerza empresarial, que no paran de acudir a todos sitios, con una vida social nunca antes vista.
Es curioso que esas cenas no incluyan representantes de la vida artística del país. Javier Marías, por ejemplo, es un autor español ampliamente celebrado en el Reino Unido.
Lo mismo Ferran Adrià, siendo Inglaterra una nación que actualmente impulsa a sus chefs como otrora hizo con los Rolling Stones.
A pesar de que Letizia lleve a su marido a películas subtituladas, ningún cineasta se sienta en sus cenas. Ni músicos del pop nacional, entendiéndose que el Reino Unido es la meca de esa industria.
Al día siguiente, Letizia descubrió que los brazos pueden estar cubiertos, pero la prensa estaba más ocupada en si Carlos había esquivado, igual que el jamón, todo lo del peñón.
Aunque hablara caballerosamente en nuestro idioma, Carlos no puso pie sobre la gran piedra. Para la realidad de Carlos, Gibraltar es el escenario de uno de los momentos más dolorosos de su anterior matrimonio.
Fue justamente con el peñón de conflictivo fondo, a bordo del Britania en su luna de miel, cuando Diana descubrió que Carlos vestía los gemelos que le había regalado Camila, ostentando sus iniciales. Al ver las dos ces unidas en los gemelos, Diana entró en un frenesí documentado en sus biografías, intentó arrojarse por las escaleras, entró en las cocinas reales y devoró todo lo que guardaban sus neveras.
El peñón es para Carlos un escollo doloroso y afilado, el fantasma de Diana, una constante en el matrimonio como la soberanía de la roca para nosotros.
Durante la visita a la finca del duque de Wellington, respiran tranquilos, igual que los ingleses que encuentran restaurantes abiertos en sus horarios en Estepona.
Imaginarlos allí, hectáreas infinitas sin cerdos, los hace esos futuros soberanos de apacible madurez. Admiramos de Carlos su paciencia.
No solo en la edípica espera para ser rey, sino también en hacer una vida junto a la mujer que ama.
Tampoco cuesta imaginarlos en el avión privado ya de camino a Marruecos, expectantes ante la aparición de nuevos alimentos comprometedores, formulándose la gran pregunta: ¿qué carne se puede comer con la mano?
Memoria total de Castilla del Pino
. .Por uno de esos incomprensibles azares del mundo editorial resultaba casi imposible encontrar Introducción a la psiquiatría, una de las obras fundamentales del psiquiatra, memorialista impagable, intelectual de las emociones y escritor Carlos Castilla del Pino (San Roque, Cádiz, 1922; Córdoba, 2009).
Su recuperación es uno de esos actos de justicia poética que en ocasiones solo depara la muerte.
La fundación que lleva el nombre del investigador y académico emprende la hercúlea labor de reeditar sus obras completas.
En suma, 14 volúmenes de psiquiatría y humanismo, que arrancan con los dos tomos que conformaban aquel manual introductorio (publicado en 1978 y 1979) con el que Castilla del Pino dio un paso de gigante en el desarrollo de su propia teoría sobre el sujeto (self, en inglés), basada en el lenguaje.
El organismo que gestiona el legado planea traducirlo al inglés
Aquella imprescindible labor le valió el apelativo del psiquiatra rojo por su feroz antifranquismo desempeñado durante los 38 años en los que día tras día atendió en el Dispensario de Psiquiatría e Higiene Mental de Córdoba a centenares de despojos sociales.
La parte científica protagoniza los 10 primeros volúmenes de las obras completas.
Los cuatro últimos se centran en su obra literaria. Entre los primeros destacan ejemplos como Un estudio sobre la depresión, "que fue producto de su trabajo con el psicoanálisis o la psicología marxista", señala el psiquiatra José María Valls, uno de los discípulos de Castilla del Pino y secretario del patronato de la fundación; su Introducción a la hermenéutica del lenguaje, "donde comienza a sustituir el marxismo por el análisis del lenguaje y la filosofía analítica", o Teoría de la alucinación, El delirio: un error necesario y, sobre todo, Teoría de los sentimientos.
En estos, añade Valls, "usa el modelo sociológico para definir las relaciones entre el espacio público, el privado y el íntimo, siempre a través del lenguaje y la conducta".
El empeño volverá a poner la atención más adelante en su labor memorialística, tan descarnada como humana en Pretérito imperfecto y Casa del olivo. T
ambién en sus dos novelas (El discurso de Onofre y Una alacena tapiada) o en la multitud de artículos y ensayos que escribió en prensa sobre arte y literatura. "Son estos escritos los que ofrecen la visión del intelectual de izquierdas comprometido, con una mirada optimista sobre la capacidad de la gente para cambiar las cosas a mejor", apunta Celia Fernández, viuda y presidenta del patronato.
La reedición, en la que colabora la Universidad de Córdoba y la Dirección General del Libro de la Junta de Andalucía, llega, aseguran los implicados, en un momento clave. Y no solo porque nos encontremos al filo del segundo aniversario de la muerte del psiquiatra. Los avances en neurobiología para explicar la memoria, los sentimientos, las emociones o la identidad han hecho que los investigadores vuelvan la vista a teorías psiquiátricas que, al igual que las del propio Castilla, hacía tiempo que habían sido dejadas de lado por su complejidad y sustituidas por visiones más reduccionistas y manejables que clasificaban las características y patologías de la mente humana.
En el horizonte se dibujan fronteras más lejanas. La misión que se plantea en un futuro el organismo que gestiona el legado de Castilla del Pino es traducir las obras al inglés, para que la comunidad científica internacional pueda acceder a ellas. Todo parece poco para dar a conocer la obra del psiquiatra y escritor, que estuvo trabajando hasta el final. Valls recuerda que pocos días antes de su fallecimiento insistía en acercar la fundación a los nuevos caminos de la neurociencia.
Pero en su afán por cumplir con su trabajo de manera seria, Castilla del Pino no dejó ninguna obra inacabada.
"Conductas y actitudes la terminó justo antes de morir para que lo publicase Tusquets", apunta Celia Fernández.
Recopilar el grueso de su labor, prosigue, "no ha sido un trabajo complicado porque Carlos era una persona muy ordenada y guardaba un completo archivo que nos ha facilitado mucho la tarea".
Su recuperación es uno de esos actos de justicia poética que en ocasiones solo depara la muerte.
La fundación que lleva el nombre del investigador y académico emprende la hercúlea labor de reeditar sus obras completas.
En suma, 14 volúmenes de psiquiatría y humanismo, que arrancan con los dos tomos que conformaban aquel manual introductorio (publicado en 1978 y 1979) con el que Castilla del Pino dio un paso de gigante en el desarrollo de su propia teoría sobre el sujeto (self, en inglés), basada en el lenguaje.
El organismo que gestiona el legado planea traducirlo al inglés
Aquella imprescindible labor le valió el apelativo del psiquiatra rojo por su feroz antifranquismo desempeñado durante los 38 años en los que día tras día atendió en el Dispensario de Psiquiatría e Higiene Mental de Córdoba a centenares de despojos sociales.
La parte científica protagoniza los 10 primeros volúmenes de las obras completas.
Los cuatro últimos se centran en su obra literaria. Entre los primeros destacan ejemplos como Un estudio sobre la depresión, "que fue producto de su trabajo con el psicoanálisis o la psicología marxista", señala el psiquiatra José María Valls, uno de los discípulos de Castilla del Pino y secretario del patronato de la fundación; su Introducción a la hermenéutica del lenguaje, "donde comienza a sustituir el marxismo por el análisis del lenguaje y la filosofía analítica", o Teoría de la alucinación, El delirio: un error necesario y, sobre todo, Teoría de los sentimientos.
En estos, añade Valls, "usa el modelo sociológico para definir las relaciones entre el espacio público, el privado y el íntimo, siempre a través del lenguaje y la conducta".
El empeño volverá a poner la atención más adelante en su labor memorialística, tan descarnada como humana en Pretérito imperfecto y Casa del olivo. T
ambién en sus dos novelas (El discurso de Onofre y Una alacena tapiada) o en la multitud de artículos y ensayos que escribió en prensa sobre arte y literatura. "Son estos escritos los que ofrecen la visión del intelectual de izquierdas comprometido, con una mirada optimista sobre la capacidad de la gente para cambiar las cosas a mejor", apunta Celia Fernández, viuda y presidenta del patronato.
La reedición, en la que colabora la Universidad de Córdoba y la Dirección General del Libro de la Junta de Andalucía, llega, aseguran los implicados, en un momento clave. Y no solo porque nos encontremos al filo del segundo aniversario de la muerte del psiquiatra. Los avances en neurobiología para explicar la memoria, los sentimientos, las emociones o la identidad han hecho que los investigadores vuelvan la vista a teorías psiquiátricas que, al igual que las del propio Castilla, hacía tiempo que habían sido dejadas de lado por su complejidad y sustituidas por visiones más reduccionistas y manejables que clasificaban las características y patologías de la mente humana.
En el horizonte se dibujan fronteras más lejanas. La misión que se plantea en un futuro el organismo que gestiona el legado de Castilla del Pino es traducir las obras al inglés, para que la comunidad científica internacional pueda acceder a ellas. Todo parece poco para dar a conocer la obra del psiquiatra y escritor, que estuvo trabajando hasta el final. Valls recuerda que pocos días antes de su fallecimiento insistía en acercar la fundación a los nuevos caminos de la neurociencia.
Pero en su afán por cumplir con su trabajo de manera seria, Castilla del Pino no dejó ninguna obra inacabada.
"Conductas y actitudes la terminó justo antes de morir para que lo publicase Tusquets", apunta Celia Fernández.
Recopilar el grueso de su labor, prosigue, "no ha sido un trabajo complicado porque Carlos era una persona muy ordenada y guardaba un completo archivo que nos ha facilitado mucho la tarea".
1 abr 2011
Descubiertas 20 nuevas especies marinas en Canarias
La organización conservacionista Oceana pide multiplicar por cien el área marina protegida en la actualidad en las islas para cumplir con la legislación europea y los compromisos de la ONU .
.Corales espectaculares -negros pluma y blandos bola-, campos de esponjas de cristal y otras denominadas chupa-chups azul, el pez armado, el pulpo blanco, la caracola pirámide y la ostra gigante son algunas de una veintena de especies vistas por primera vez en Canarias.
También es el caso de la raya noriega, reencontrada para la ciencia en un área cercana a Fuerteventura -Amanay-, consideraba ya extinguida.
Asimismo, ha sorprendido encontrar un tipo de pez de profundidad muy longevo, el pez reloj -70 años de vida-, y por tanto vulnerable por tardar mucho en reproducirse.
Diez años de exploración muestran que la vida en los océanos es más rica y está más alterada de lo esperado
Invertir en el mar
Las aguas de Australia y Japón son las más ricas en biodiversidad
"Sigo buceando en los océanos porque aún respiro"
Pez armado avistado en la expedición 'Oceana Ranger' en Canarias en 2009- OCEANA
Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Medio Marino
La investigación, realizada por la organización internacional dedicada a la conservación de los océanos Oceana, fue presentada ayer en la sede de la Fundación Biodiversidad en Madrid.
El relato de las 32 inmersiones hechas por buceadores y otras 49 con robot, en profundidades de entre 40 y 700 metros, lo hizo el coordinador del proyecto, Ricardo Aguilar, que mostró su asombro por haber encontrado tanta biodiversidad: "Hemos llegado a catalogar hasta 500 especies diferentes", apuntó.
A bordo del catamarán Oceana Ranger, la organización realizó una expedición de dos meses de duración en 2009 por aguas de Canarias, cuyos resultados se han presentado en un informe que pide la protección de 74.000 kilómetros cuadrados marinos. Esta extensión, sumada a las reservas marinas existentes en Canarias -en La Graciosa, El Hierro y La Palma-, supondría proteger un área 100 veces mayor que el 0,15% actual y permitiría cumplir lo establecido por la legislación internacional, destacó Aguilar.
Mientras el científico abogó por mantener los sebadales (Cymodosea nodosa) en el polémico Catálogo Canario de Especies Protegidas, la secretaria de Estado para el Cambio Climático, Teresa Ribera -presente en la rueda de prensa-, se excusaba de que esta especie haya sido excluida del Catálogo Nacional y no otras similares del Mediterráneo como las praderas de posidonias al recoger linealmente aquellas especies que estaban incluidas en el inventario autonómico en vigor. También precisó que el actual Catálogo Nacional articula un sistema que permite actualizar en cada momento la situación de las especies en peligro y que cualquiera puede hacer la petición para que se incremente o disminuya la protección dependiendo la decisión de un prestigioso comité científico.
A la pregunta de cuándo se va a primar la ciencia por encima de la política, Ribero consideró que la ciencia y la política cumplen funciones distintas y complementarias. No obstante, el coordinador de Oceana y la propia secretaria de Estado defendieron que se cumplan los convenios internacionales que protegen los sebadales.
Por otra parte, Aguilar precisó la cantidad de rayas y tiburones que se han encontrado -unas 84 especies-, lo que hace de Canarias un santuario de esta especie muy importante para la Unión Europea.
Ribera declaró que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, a través de la Fundación Biodiversidad, ha apostado por esta investigación, a la que se han aportado tres millones de euros. Se mostró convencida de que hay que conocer previamente las condiciones de biodiversidad en la región Macaronésica para tomar las decisiones oportunas de protección y poder gestionar su riqueza marina.
Oceana propone además en su informe medidas enfocadas a la gestión adecuada de los recursos marinos, así como la conservación de los ecosistemas: proteger especies y hábitats de gran importancia ecológica amenazados como los sebadales y desarrollar medidas específicas de gestión que eviten su continua regresión.
Aguilar enumeró las graves amenazas para la biodiversidad que existen en las islas Canarias como son el incremento de puertos y la construcción de infraestructuras costeras.
Y propuso que se reduzca la presión pesquera sobre recursos sobreexplotados y pidió el control de esta actividad.
Oceana instó a prohibir cualquier tipo de sondeo para explotar petróleo o gas natural en las costas canarias.
Opinión no compartida por Ribera. Compartieron, no obstante, la idea de favorecer el cambio de modelo hacia las energías renovables.
Aguilar hizo hincapié en la incidencia del cambio climático en el archipiélago, al estar apareciendo especies tropicales hasta ahora desconocidas allí.
Asimismo, señaló la necesidad de proteger la zona sur de Canarias por estar todavía virgen; la zona norte de Lanzarote; la reserva entre La Gomera y Tenerife, por ser un importante hábitat de cetáceos; así como ampliar las reservas ya existentes.
.Corales espectaculares -negros pluma y blandos bola-, campos de esponjas de cristal y otras denominadas chupa-chups azul, el pez armado, el pulpo blanco, la caracola pirámide y la ostra gigante son algunas de una veintena de especies vistas por primera vez en Canarias.
También es el caso de la raya noriega, reencontrada para la ciencia en un área cercana a Fuerteventura -Amanay-, consideraba ya extinguida.
Asimismo, ha sorprendido encontrar un tipo de pez de profundidad muy longevo, el pez reloj -70 años de vida-, y por tanto vulnerable por tardar mucho en reproducirse.
Diez años de exploración muestran que la vida en los océanos es más rica y está más alterada de lo esperado
Invertir en el mar
Las aguas de Australia y Japón son las más ricas en biodiversidad
"Sigo buceando en los océanos porque aún respiro"
Pez armado avistado en la expedición 'Oceana Ranger' en Canarias en 2009- OCEANA
Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Medio Marino
La investigación, realizada por la organización internacional dedicada a la conservación de los océanos Oceana, fue presentada ayer en la sede de la Fundación Biodiversidad en Madrid.
El relato de las 32 inmersiones hechas por buceadores y otras 49 con robot, en profundidades de entre 40 y 700 metros, lo hizo el coordinador del proyecto, Ricardo Aguilar, que mostró su asombro por haber encontrado tanta biodiversidad: "Hemos llegado a catalogar hasta 500 especies diferentes", apuntó.
A bordo del catamarán Oceana Ranger, la organización realizó una expedición de dos meses de duración en 2009 por aguas de Canarias, cuyos resultados se han presentado en un informe que pide la protección de 74.000 kilómetros cuadrados marinos. Esta extensión, sumada a las reservas marinas existentes en Canarias -en La Graciosa, El Hierro y La Palma-, supondría proteger un área 100 veces mayor que el 0,15% actual y permitiría cumplir lo establecido por la legislación internacional, destacó Aguilar.
Mientras el científico abogó por mantener los sebadales (Cymodosea nodosa) en el polémico Catálogo Canario de Especies Protegidas, la secretaria de Estado para el Cambio Climático, Teresa Ribera -presente en la rueda de prensa-, se excusaba de que esta especie haya sido excluida del Catálogo Nacional y no otras similares del Mediterráneo como las praderas de posidonias al recoger linealmente aquellas especies que estaban incluidas en el inventario autonómico en vigor. También precisó que el actual Catálogo Nacional articula un sistema que permite actualizar en cada momento la situación de las especies en peligro y que cualquiera puede hacer la petición para que se incremente o disminuya la protección dependiendo la decisión de un prestigioso comité científico.
A la pregunta de cuándo se va a primar la ciencia por encima de la política, Ribero consideró que la ciencia y la política cumplen funciones distintas y complementarias. No obstante, el coordinador de Oceana y la propia secretaria de Estado defendieron que se cumplan los convenios internacionales que protegen los sebadales.
Por otra parte, Aguilar precisó la cantidad de rayas y tiburones que se han encontrado -unas 84 especies-, lo que hace de Canarias un santuario de esta especie muy importante para la Unión Europea.
Ribera declaró que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, a través de la Fundación Biodiversidad, ha apostado por esta investigación, a la que se han aportado tres millones de euros. Se mostró convencida de que hay que conocer previamente las condiciones de biodiversidad en la región Macaronésica para tomar las decisiones oportunas de protección y poder gestionar su riqueza marina.
Oceana propone además en su informe medidas enfocadas a la gestión adecuada de los recursos marinos, así como la conservación de los ecosistemas: proteger especies y hábitats de gran importancia ecológica amenazados como los sebadales y desarrollar medidas específicas de gestión que eviten su continua regresión.
Aguilar enumeró las graves amenazas para la biodiversidad que existen en las islas Canarias como son el incremento de puertos y la construcción de infraestructuras costeras.
Y propuso que se reduzca la presión pesquera sobre recursos sobreexplotados y pidió el control de esta actividad.
Oceana instó a prohibir cualquier tipo de sondeo para explotar petróleo o gas natural en las costas canarias.
Opinión no compartida por Ribera. Compartieron, no obstante, la idea de favorecer el cambio de modelo hacia las energías renovables.
Aguilar hizo hincapié en la incidencia del cambio climático en el archipiélago, al estar apareciendo especies tropicales hasta ahora desconocidas allí.
Asimismo, señaló la necesidad de proteger la zona sur de Canarias por estar todavía virgen; la zona norte de Lanzarote; la reserva entre La Gomera y Tenerife, por ser un importante hábitat de cetáceos; así como ampliar las reservas ya existentes.
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