Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

17 nov 2010

Huequitos de Sol: Peliculas

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Saber o no saber ELVIRA LINDO

En una librería neoyorquina, McNally Books, en donde la literatura en castellano ha conquistado un espacio, nos reunimos para hablar en torno a un libro. Muchos españoles, la mayoría jóvenes, y la mayoría de esos españoles, científicos. Investigan sobre sida, memoria emocional, cáncer, memoria espacial... En los primeros tiempos disfrutan de su experiencia, a partir del tercer año comienzan a preguntarse por qué no pueden ejercer su profesión en casa.
 Vivir en Nueva York es excitante pero duro, agotador. Lo paradójico es que conforme su nivel de capacitación va subiendo, las posibilidades de encontrar trabajo en nuestro país decrecen. Les escucho y pienso en lo frecuente que es leer en la prensa dos juicios de valores del todo contradictorios sobre el nivel de preparación de los jóvenes.
Por un lado, tenemos al optimista inquebrantable que afirma que nunca la juventud española ha estado tan preparada; por otro, el tozudo catastrofista que piensa que de esta enseñanza media solo brotan ignorantes. Las dos opiniones son tan reduccionistas que la visión más cercana a la realidad se consigue sumándolas.






Lo tremendo es que hay una parte de esa juventud, sobrada de talento, a la que no le dejamos otra oportunidad que regalárselo, por ejemplo, a los Estados Unidos, que lo reciben sin preguntar de dónde viene.
 Y otra juventud que, como consecuencia dramática de los años burbujeantes de la construcción descontrolada, se encuentra con que ahora tiene las manos en los bolsillos por haber sido diabólicamente adiestrada para obtener beneficio sin tener oficio. La extraña convivencia de esas dos realidades, tan dispares la una de la otra, son las que definen un país en el que se abre un inmenso abismo entre los que saben mucho y no tienen dónde demostrarlo y los que no saben casi nada y no tienen dónde emplear su ignorancia.

De reinas y príncipes

Isabel Preysler, a punto de cumplir los 60, sigue siendo la estrella de las revistas, en las que Rania de Jordania y Carlota Casiraghi también destacan .
. .Aunque se esperaba la noticia de un momento a otro, las revistas de los miércoles se han quedado sin la portada de la semana: el anuncio del compromiso oficial de Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton. Solo la revista Hola ofrece dos páginas de alcance.






A falta de realeza de verdad, las de las revistas del corazón. Y en ellas reina sobre todos los personajes Isabel Preysler. A ella le dedica ¡Hola! su portada. En páginas interiores se justifcia su presencia con el hecho de que está viviendo "una nueva etapa familia". O lo que es lo mismo que su hija Tamara de casi 30 años se ha ido de casa. Un pretexto como cualquier otro. La realidad es que Preysler cumple 60 años y sigue siendo la número 1. Otras princesas de verdad no le hacen sombra como Rania de Jordania que es noticia en todas las publicaciones por su visita a Barcelona. La protagonista es ella y no su marido el Rey, que vende menos. Carolina de Mónaco también se pasea por las páginas de las revistas esta semana pero comparte protagonismo con su hija Carlota Casiraghi, elegida como la mujer con más estilo.



Las reinas de las televisiones igualmente tienen un hueco. En Semana apuesta por María Teresa Campos que muestra su espectacular casa. Espectacular por lo grande y también por su decoración. En Diez Minutos han elegido a Ana Rosa Quinta de la que destacan su éxito en el amor al cumplirse 12 años de relación con su actual marido y padre de sus hijos pequeños. Y en Lecturas hacen una mirada al futuro o quizá al presente, en el que ya reina por derecho propio Sara Carbonero, novia de Iker Casillas desde hace un año.



Las revistas también cuentan que Penélope Cruz está ya en Madrid a la espera de que nazca su niño y del inminente parto de Paulina Rubio, tan inminente que ya se ha producido. Pau tuvo el domingo su primer hijo. De él seguro que vemos fotos el próximo miércoles, exclusiva por medio.