18 sept 2010
EL AMERICANO, GEORGE CLOONY
¿Qué ocurre cuando algo empieza bien? Que esperamos que acabe aún mejor. Y esto es un fallo increíble a la hora de ver cine. Recordemos el comienzo de Magnolia, 1999, dirigida por Paul Thomas Anderson y protagonizada por Tom Cruise, que comienza de una forma tan potente, fresca y original, que el resto del film resulta espeso, aunque su calidad sea notable.A mi me pareció raro el comienzo porque sin darme cuenta me vino a la mente Bergman, y además en Suecia y nevado....
Pues en el caso de El americano, ocurre exactamente lo mismo. El comienzo es tan prometedor, tan de la vieja escuela, con un rodaje tan primoroso, exacto y limpio, con unas interpretaciones tan correctas y en su sitio, que no te esperas que el resto se desarrolle de una forma tan plana y decadente.
Y es que la película, centrada en el personaje de Jack, un asesino y fabricante de armas que busca cambiar de vida después de un incidente desafortunado que le atormenta, promete más de lo que ofrece.
Alejada de los típicos thrillers de acción norteamericanos donde la cantidad de disparos prima sobre el argumento y personajes, Corbijn nos plantea un largometraje donde hay tres persecuciones, si se las puede llamar así, y la más “veloz” se hace en Vespa, lo que nos puede hacer imaginar el ritmo narrativo.
Sin sorpresa ninguna, salvo las primeras acciones de Jack en el arranque del film, el argumento de desarrolla lentamente, mostrándonos la metamorfosis del protagonista a través de las relaciones que entabla con un cura (Paolo Bonacelli) y una prostituta (Violante Placido), en el pueblo italiano al que se retira para realizar su último trabajo.
En resumidas cuentas, no es un thriller del estilo al que estamos acostumbrados. Aunque la temática sea corriente –hay muchísimas películas en que el protagonista es un asesino que quiere retirarse y se le complica su último trabajo, quede aquí como ejemplo Sin perdón-, centrarse de esa forma en el personaje protagonista, en su perpetua cara de sospecha, agobio y tensión, en sus dudas que le llevan sospechar incluso de la persona de la que está enamorado, hasta el límite de apuntarla con un arma, no es lo corriente. Pero sobre todo, el ritmo narrativo, la pausa, la sensación de que la historia continúa pero no ocurre nada, es su gran fallo.
CRÍTICA DE LA PELÍCULA “EL AMERICANO”: GEORGE CLOONEY SE APODERA DE LA PANTALLA
CRÍTICA DE LA PELÍCULA “EL AMERICANO”: GEORGE CLOONEY SE APODERA DE LA PANTALLA
“El americano” recuerda al cine negro francés de los años 70 y 80. Cuenta la historia de un asesino a sueldo y experto en armas (sobre todo en montarlas para sus acciones).
Veterano y cansado decide dejarlo, en ese momento recibe un encargo que debería ser el último. Debe refugiarse en un pequeño pueblo italiano –deviene en un personaje más del film- para preparar un arma que otra persona, en este caso una mujer, utilizará. Será difícil que le permitan dejar su trabajo, sabe demasiado.
George Clooney se convierte en el protagonista absoluto, aparece en la mayoría de planos, y su presencia escénica es enorme, domina, hace crecer el valor del film.
La mítica canción de Renato Carosone “Tu vuo fa l´americano” actúa acertadamente de leiv motiv.
La vida cotidiana del americano en el pueblo nos depara momentos y escenas de gran nivel, que muestran un mundo en el que la vida se mueve a un ritmo distinto al de las grandes ciudades, más tranquilo, más pausado.
Anton Corbjin (Holanda 20 de mayo de 1955), el director, trabaja muy bien la ambientación y los tempos, poco a poco va construyendo una bomba de relojería, pero en una película de este estilo se espera mucho más, más personajes, más giros, más sorpresas. Hay secuencias algo exageradas por reiteración, los muertos en acción en un pueblo tan pequeño son poco creíbles, ya que nadie lo denuncia, la narración no tiene en cuenta sus consecuencias, genera reticencias en el espectador avezado en este tipo de historias.
La historia es demasiado lineal.
“El americano” es una buena película, pero debería haber sido mucho mejor
En el 2007, el holandés Anton Corbijn hizo su primera incursión en el cine con Control. Luego de trabajar en videoclips con bandas como Depeche Mode, U2, Nirvana o The Killers y ganar prestigio internacional como uno de los mejores fotógrafos de nuestra era, con su ópera prima logró conquistar otra faceta del arte, consiguiendo una película que muchos han catalogado como una de las 10 mejores de la década pasada. Adivinaron: nunca se estrenó en nuestro país. Este año nos presentará su segunda película, una que promete mantener su peculiar estilo estético fotográfico, aunque esta vez en una producción netamente americana. Se trata de The American, protagonizada por el cada vez más cotizado (¿se puede más?) e interesante George Clooney. Esta vez la historia se centra en un asesino a sueldo cuyo último trabajo ha salido mal. Con el cargo de conciencia encima, además de una total desconfianza en cada persona que se le cruza en el camino, decidirá refugiarse en un alejado pueblo de Italia, en donde una misteriosa mujer lo ha contratado para que cumpla una misión que no resulta ser lo que parece. Se estrena el 1ero de setiembre en los EEUU y recemos que, al ser producción 100% yanki, esta vez sí llegue por aquí.
Acaboo de ver la película, George Coony muy desmejorado se pasa todo el tiempo pensando y fabricando o adecuando armas, se supone que es un sicario, no ha tenido que aprender guión alguno, es hombre de pocas palabras y miradas intensas y se supone olfateando todo, para no hacerse notar se nota demasíado, no está en condiciones físicas para ser un asesino a sueldo.
Está delgado no muscalado y se pasa el dia haciendo flexiones.
Cara demacrada sin expresión, entre Bond, James Bond y un autista.
Salen algunos puntos de una película rodada en pueblos de Italia.
El pueblo en el que se alojan todos pero eso si de incógnito, para bajarlo bien, subirlo pateando se asfixia uno.
Ya el comienzo nos avisa que cuidadin, vamos a ver algo aburrido, quizás es que como espectadora pocas cosas me defraudan, pero me ha defraudado George Cloony. No acaban de encontrarle un personaje adecuado, quisieron hacer el II Gary Grant, pero imposible cloony es hierático, rígido, y le encontré además unos labios muy finos, debe retocarse un poco.
George Cloony eso si, se lo curra, está casi siempre en pantalla, andando, durmiendo con un ojo abierto en coche y en moto. Pero ya sabemos que el Criminal nunca gana, ¿Seguro?
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