Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

24 feb 2017

Sara Carbonero eligió este 'look' para ir al desfile de Burberry, ¡pero no fue la única!

La presentadora eligió el mismo 'look' que la creadora del blog 'Man Repeller' pero, ¿quién lo lleva mejor?

por Mónica Córdoba  

Su estilo la ha convertido en toda una it-girl en nuestro país, pero no es habitual ver a Sara Carbonero en eventos de moda (más allá de alguna fiesta multitudinaria y de su paso por el programa Quiero ser). 
Sin embargo, la presentadora no quiso perderse el último desfile de Burberry, dentro de la Fashion Week de Londres, donde coincidió con otra "española por el mundo", Penélope Cruz, y con fashionistas como Leandra Medine, creadora del blog Man Repeller.
 De hecho, la coincidencia con esta última -de cuyo trabajo Sara se ha confesado fan-, fue más allá... ¡porque las dos llevaban el mismo look!
 "Coincidir en un acto con el mismo 'look' que alguien es una faena, salvo que sea @manrepeller #fan", escribía Sara en su perfil personal de Instagram.
 El outfit en cuestión: un conjunto de blusa y pantalón de inspiración pijama, combinado con un abrigo fluído tipo bata de estampado paisley.
 La bloguera añadió, además, una bufanda en color crema; y ambas apostaron por llevar el pelo suelto.
 Una tendencia, la de los pijamas de calle, que ha cautivado a las celebrities en los últimos años.
 Y, a la vista de las imágenes, parece no querer decirnos adiós.



Sara Carbonero en el front row de Burberry

Sara Carbonero en el desfile de Burberry
Sara Carbonero, en el desfile de Burberry, con 'total look' de la firma


Look de Burberry de Sara Carbonero

Vestido 'wrap' de seda con estampado 'paisley' (1.695 euros)

Pantalón de pijama a rayas (775 euros)

Camisa de pijama estampada (725 euros)

Cinturón de piel con tachuelas planas (525 euros)

Bolso combinado con 'print animal' (2.595 euros)



El Capitán Trueno, cuando el cómic se llamaba tebeo

ENEKO RUIZ JIMÉNEZ Y ÁNGEL LUIS SUCASAS

EL PAÍS recopila en 60 tomos la edición original completa de las historietas del héroe español.

Cuando el pasado agosto murió el escritor Víctor Mora, varias generaciones de lectores quedaron huérfanos, incluso aunque no les sonara el nombre del autor. 
Los niños que llamaban tebeo al cómic y que corrían al quiosco (y no a una tienda especializada) cada semana con unas pesetas en el bolsillo habían perdido al responsable de darles algunos de los mejores momentos de la infancia, leyendo El capitán Trueno. 
 Y no eran pocos. El personaje, creado también por el dibujante Ambrós, llegó a tener tiradas de cerca de 350.000 ejemplares.
 Algo irrepetible medio siglo después.


"Nunca pensé que estaría aquí hablando del Capitán Trueno 50 años después", exclamaba asombrado Mora en una entrevista de 2011 cuando le era preguntado sobre la supervivencia del icónico personaje que se estrenó en las viñetas el 14 de mayo de 1956. 
"Fue una ventana visual, una formación, para los niños de los años cincuenta y los sesenta que pudieron visitar paisajes y lugares extraños que no se veían en la época", resumía el filósofo Patxi Lanceros, comisario de una exposición sobre el personaje abierta hace unos meses en Madrid.
 El escritor describía a su gran creación como un héroe progresista, subversivo, justiciero a favor de la democracia y defensor de los débiles, inspirado en el Príncipe Valiente de Hal Foster.
60 años después, y pese a sus diversos baches en el cine, este caballero de la Edad Media, así como sus compañeros Goliath, Sigrid y Crispín, sigue maneniéndose en la memoria como uno de los grandes monumentos del cómic español, incluso aunque para las nuevas generaciones quizás suene como parte de un género añejo, cercano a las enseñanzas franquistas y que utilizaba la historia para alabar los éxitos de los españoles. 
Pues bien, nada más lejos de la realidad. No había nadie más luchador dentro de la industria que Mora.
El mismo año de la creación de El Capitán Trueno, Mora sufrió la represión del régimen de primera mano a causa de sus afiliaciones políticas en el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), ilegalizado en la época. La Brigada Social lo detuvo junto a su mujer Armonía Rodríguez, secretaria de la editorial Bruguera, durante seis meses, acusados de "masonería y comunismo".
 "Sentía la obligación moral de hacer lo posible contra el régimen de Franco.
 Fui de aquellos ilusos que creía que la cosa no podía durar mucho si todos arrimábamos el hombro", contaba el que fuera creador también de El Jabato.
 Y así, entre odas al cristianismo y la lucha de la reconquista, en sus viñetas podían leerse frases tan rompedoras como "o la guerra o la represión" o asistir a una relación extramatrimonial entre Trueno y Sigrid que nunca hizo demasiada gracia al Ministerio de Información y Turismo. 

Paradójicamente, lo que siempre había querido ser Mora era dibujante, pero sus garabatos nunca interesaron a los editores. 
El dibujante Ambrós se convirtió al final en uno de sus grandes amigos. 
No así los editores de Bruguera, catalogados por él mismo como "esclavistas".
 Su lucha laboral y la de otros escritores la retrató Paco Roca en la insigne novela gráfica El invierno del dibujante
 Su pelea por los derechos de autor tiene casi tanta importancia en el cómic español como las aventuras de su gran cruzado del siglo XII, figura clave en la época dorada del cuadernillo de aventuras.
Para celebrar este aniversario y celebrar la figura del creador y su máxima creación, a partir de este domingo 26 de febrero, y de manera semanal, EL PAÍS da la oportunidad a los nostálgicos de rememorar la obra original completa, de 618 cuadernillos escritos por Mora y con dibujos de, entre otros, Ambrós, Beaumont, Martínez Osete y Ángel Pardo, así como una selección de las mejores 276 aventuras de la revista El Capitán Trueno Extra.
 Una edición de coleccionista de 60 tomos (9,95 euros cada uno) publicada junto a Salvat que incluye, además, páginas extras con textos e ilustraciones y una selección original de bocetos realizada en exclusiva. 
El primer tomo se podrá conseguir por solo 1,95 euros.

 

Carme Chaparro gana el Primavera de Novela con ‘No soy un monstruo’

El jurado del premio, dotado con 100.000 euros, galardona la primera obra literaria de la periodista.

Carme Chaparro, durante la rueda de prensa tras recibir e Primavera de Novela 2017. EFE
La periodista barcelonesa Carme Chaparro ha sido galardonada con el Premio Primavera de Novela 2017 por su obra No soy un monstruo, con la que debuta en la literatura, una obra policíaca "trepidante" que provoca en el lector "un magnetismo irresistible hasta la resolución del caso", según el jurado.

El jurado del premio, considerado uno de los más importantes de la lengua española y dotado con 100.000 euros, ha elegido esta obra entre los 1.125 originales que se presentaron a esta vigesimoprimera edición. 
El jurado ha estado presidido por Carme Riera y compuesto por Antonio Soler, Ramón Pernas, Fernando Rodríguez Lafuente y Ana Rosa Semprún.
Chaparro (Barcelona, 1973) ha expresado su alegría por este galardón para una obra que, ha asegurado, le había costado mucho esfuerzo emocional escribir porque "tiene partes duras". 
"La novela habla de los monstruos que todos llevamos dentro, no hay que buscarlos fuera, y no sabemos qué hecho va a desencadenar que nos convirtamos en monstruos", ha indicado la periodista que también ha escrito en este libro sobre "el periodismo, las presiones que se reciben, las que soporta la Policía y las razones por las que en los informativos sale un tema y no otro".
Los periodistas, ha explicado en la rueda de prensa, "hablamos de todo el mundo pero pocas veces nos abrimos en canal y contamos nuestro día a día sin matizar nada".
 Una novela "oscura y muy ágil" protagonizada por "dos mujeres fuertes", una inspectora jefe de Policía y una periodista que investigarán la desaparición de menores.
 Un niño desaparece en un centro comercial y el caso es investigado por la inspectora jefe Ana Arén y su equipo del Grupo de Menores que, de inmediato, se dan cuenta de que todos los indicios apuntaban a un viejo conocido: Slenderman, nombre con el que dos años atrás la prensa había bautizado al misterioso secuestrador de Nicolás, otro niño del que no se había vuelto a tener noticias.

Chaparro, al frente desde hace veinte años de las principales ediciones informativas del grupo Mediaset, en Informativos Telecinco y Noticias Cuatro, ha explicado que tiene "buenos amigos policías" que la han asesorado. 
La obra se adentra en el mundo del periodismo y situaciones que se viven a diario en las redacciones ante las que se plantean preguntas sobre las razones por las que una desaparición como la de Diana Quer en A Pobra (A Coruña) tiene tanta repercusión y otras no la tienen, ha indicado.
La periodista ha recalcado que es la primera vez que escribía un libro de ficción: "Lo máximo han sido mis columnas en la revista Yo Dona", donde tiene un espacio semanal, o un blog.
 Tres meses tardó en escribir el primer manuscrito de esta obra y fue, ha recordado Chaparro, a partir de todas las lecturas y las experiencias que ha acumulado a lo largo de su vida como si "descorchara una botella de champán que ha sido agitada".
La periodista ha explicado que no quería que su novela se publicara debido a que es un personaje conocido porque sale por la televisión y que por eso la presentó al premio con el pseudónimo de Paulina Murillo, el nombre de una tía suya que falleció cuando ella tenía 15 años.
 Tras escribirla "no quería que nadie publicara la novela con mi nombre por delante sino que quería que hablara por sí misma".
 Los miembros del jurado han coincidido en afirmar que se trata de una novela que "no puedes soltar", una obra que saldrá a la venta el próximo 21 de marzo publicada por la editorial Espasa.
 El Premio Primavera de Novela ha recaído en años anteriores en autores de muy diferente índole. 
Entre los galardonados figuran Lucía Etxebarría, Rosa Montero, Juan José Millás, Juan Manuel de Prada, Use Lahoz, Màxim Huerta, Juan Eslava Galán o Carlos Montero, entre otros.

 

23 feb 2017

La reina Letizia corrige a Mauricio Macri en pleno brindis institucional

Cualquiera diría que jamás se interrumpe a un político cuando se encuentra en medio de un discurso de agradecimiento y alza su copa para brindar en una cena de gala.
 Cualquiera, menos la reina Letizia.
Ella fue la protagonista del brindis de agradecimiento de Mauricio Macri, el presidente de la República Argentina, que se encuentra estos días de visita de Estado en España.
 Cuando el ocupante de la Casa Rosada terminaba su discurso y se disponía a elevar la copa, la reina española le hace notar un error.
"Espere, presidente", se oye decir a la monarca, mientras advierte a Macri de que ha tomado la copa con agua en lugar de la que contiene el vino o el champán.
 Es una superstición muy extendida la que dice que da mala suerte brindar con agua, y la reina Letizia ha impedido que esa "maldición" cayeseLETIZIA